Él es mejor que yo

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Cuando Lin Yuan se dijo a sí mismo que había ganado, una expresión nostálgica apareció en su rostro.

Cuando estaba administrando solo la tienda de vida espiritual en la Región Xia, Lin Yuan luchaba para siquiera mover una Usnea.

Tenía que apretar los dientes y esforzarse cada vez que enterraba minerales de energía con la Usnea.

Una Usnea de calidad Normal que ni siquiera era un fey no era pesada. Sin embargo, las raíces de la Usnea eran gruesas, y se requería una maceta grande para que la Usnea creciera bien.

Combinada con la tierra, una maceta de Usnea pesaba alrededor de 12.5 kilogramos. Había sido una gran lucha para Lin Yuan, que en ese momento ni siquiera tenía qi espíritu.

Lin Yuan necesitaba jadear y descansar cada vez después de colocar una Usnea en el estante. Así es como pasaba sus días.