Suena el timbre de la escuela marcando la hora de almorzar. Issei, Asagi y yo nos dirigimos hacia el patio de la academia y nos sentamos a comer tranquilamente mientras teníamos conversaciones normales y una que otra frase pervertida de Issei, lo que se llevó unos cuantos golpes de Asagi.
Todo estaba pasando tranquilamente hasta que siento un par de ojos observandome desde la distancia, al dirigir mis ojos en esa dirección pude ver como una persona se escondía rápidamente, una persona normal no habria podido ver nada, pero, yo soy un vampiro con los sentidos mejorados y pude ver perfectamente a la persona. Era una chica de cabello negro y ojos azules, llevaba una mochila para llevar guitarras. En el momento en que la vi un solo pensamiento vino a mi cabeza.
(Himeragi Yukina.) La reconocí al instante.
Eso quiere decir que los eventos de la historia original de Strike the Blood están a punto de comenzar, solo faltan los de DxD, pero la verdad no le interesan mucho.
Devolví mi mirada hacia mis amigos que estaban a mi lado y fingí no haberme dado cuenta de su presencia a lo que me pareció escuchar un suspiro de alivio desde su dirección, el cual ignore.
"Oh. Por cierto, ayer se me confesaron y tengo una cita este domingo." Dijo Issei de forma emocionada.
Al escuchar esas palabras Asagi y yo tuvimos dos reacciones completamente distintas. Asagi tenía una cara de incredulidad como si no pudiera creer lo que está diciendo Issei. Y en cuanto a mi, tenía una mirada pensativa y emocionada ya que eso significaba que el Canon de DxD ya había comenzado.
"Vaya, pues felicidades Issei." Dije mientras seguí comiendo mi almuerzo e ignorando la mirada de Asagi que seguía siendo de incredulidad, pero menos que antes.
"Nunca pensé que un pervertido como tú iba a conseguir una novia. Sinceramente me siento muy sorprendida." Dijo Asagi al recuperarse de su asombro.
"¡Oye! ¡Eso me ofende!" Dijo Issei.
Mientras nos reíamos de Issei sentí dos presencias conocidas acercándose a nosotros. Al voltear mirada a esa dirección pude ver a un joven con gafas y otro con la cabeza rapada. Eran Matsuda y Motohama, ambos son integrantes del trío pervertido junto con Issei.
"Oye Issei. Vamos a espiar a las chicas del club de Kendo. ¿Vienes con nosotros?" Dice Matsuda mientras miraba a Issei.
"¡Ooh! ¡Voy, eso no me lo pierdo!" Dijo Issei con entusiasmo. Asagi y yo estábamos viendo la interacción con los tres con una mirada de asco. Me sorprende que estos idiotas puedan decir libremente que van a espiar chicas. Mientras seguía viendo al trío pervertido se me ocurrió una idea y una sonrisa siniestra se formó en mi cara.
"Oye Issei ¿Estás seguro de que deberías estar espiando chicas ahora que tienes novia?" Dije con la sonrisa siniestra aún en mi cara lo cual hizo temblar levemente a Issei, y en cuanto a los otros dos pervertidos.
"¡¿Que?! ¡¿Cómo que novia?! ¡¡Issei, traidor!!" Grito Matsuda indignado mientras agarraba por el cuello de la camisa a Issei.
"Tranquilisate un poco Matsuda. Seguro tiene una explicación para esto." Dijo Motohama mientras ponía una mano en el hombro de Matsuda.
"Tienes razón, debe haber una explicación para esto. ¿¡Cierto Issei!?" Dijo Matsuda.
"Dijo que ayer lo habían invitado a salir y que tenía una cita el domingo." Dije con mi simetría sonrisa en mi cara, al cual crecía cada segundo que pasaba.
"¡¡Ya no hay más explicación necesaria!! ¡¡Te castigaremos por traidor!!" Grito Matsuda mientras agarraba a Issei por el cuello y Motohama por lo miraba con pura rabia y envidia.
Las personas a nuestro alrededor miraba la interacción de los tres con miradas punzantes y asqueadas. En cuanto a mi, no podía dejar de reírme, y Asagi que estaba a mi lado intentaba contener la risa lo cual no le estaba saliendo muy bien que digamos.
"Bien trío de pervertidos. Si van a hablar de sus idioteces mejor vayanse a otro lugar que aquí molestas." Dije mientras los echaba a 'patadas' de dónde estábamos, lo cual salió muy bien y los tres se fueron a espiar a no se quién, ya había olvidado que habían dicho.
"Enserio, esos tres ni tienen remedio. Ahora estamos los tres solos." Dijo Asagi mientras que la última parte la dijo en un susurro casi inaudible, pero con mis sentidos mejorados fue algo fácil de escuchar.
Luego de eso estubimos conversando de cosas entre los dos hasta que escuchamos unos gritos y cuando volteando la mirada pudimos ver como el trío pervertidos escapaba de las chicas del club de Kendo, pero sin resultados ya que los terminaron alcanzado y golpeándolos. Sinceramente era una vista muy graciosa de ver.
Luego de eso llego un Issei lleno de golpes por todo el cuerpo y con la mirada decaída.
"Eso te pasa por pervertido." Dije mientras le daba una mirada fría y sin compasión al pervertido que tenía delante.
"Mmh. Yuu, tu no entenderías como me siento ya que eres alguien guapo y podrías conseguir todas las chicas que quisieras." Dijo Issei mirándome de manera acusadora y con resentimiento.
"De que demonios estás hablando. Yo no soy un pervertido como tú, y mucho menos alguien que se aprovecha de los demás. Solo saldría con alguien del que yo esté enamorado." Dije encogiendome de hombros y sentí una mirada a mi lado, al darme la vuelta ví como Asagi me estaba dirigiendo una mirada decidida.
"Etto ¿Asagi?" Pregunte sintiéndome incómodo por la mirada que Asagi estaba dirigiendome.
"No es nada." Dijo Asagi desviando la mirada con un pequeño tinte rosa en sus mejillas. "Me esforzaré." Dijo en un pequeño susurro que apenas y podía escucharlo.
Luego de eso el día fue normal hasta que me llamaron a la sala de los profesores. Una vez hay me encontré con una 'niña' de cabello negro que llevaba un vestido de Lolita gótica, la cual estaba esperándome. Su nombre era Minamiya Natsuki, y es la enviada a vigilarme por parte de una organización que es la encargada de mantener a raya a todo los sobrenatural en contra de los humanos.
"¿Que pasa Natsuki-chan?" Dije al momento de verla, de pronto tuve que esquíbar un golpe que iba directo a mi cabeza por parte de Natsuki-chan.
"Te he dicho cientos de veces que no me digas Natsuki-chan en la escuela. Soy tu profesora." Dije cruzándose de brazos frente a su diminuto pecho, aunque ella tenga la apariencia de una niña, en realidad tiene 22 años, es toda una Loli legal.
"Acabas de pensar en algo grosero ¿Verdad?" Dijo mirandome fijamente con los ojos entrecerrados.
"Nonono. Eso es imposible." Dije tratando de calmarla antes de que me de un buen golpe.
"Bueno, te había llamado aqui para advertirte de que tuvieras cuidado cuando salgas por la noche ya que últimamente han estado muriendo personas y siempre hay un poco de residuos mágicos en la escena donde se encuentra el cuerpo, por lo que debe tratarse de un ser sobrenatural. Ten cuidado con encontrarte uno, no quiero que destruyas media cuidad por un descontrol de tus poderes." Dijo Natsuki-chan mientras me miraba. "Por cierto, últimamente he sentido la presencia de alguien alrededor de la academia, estaría bien si fuera una persona normal, pero se trata de alguien con un gran poder mágico y al parecer tiene de objetivo alguien de aquí. Ten cuidado con eso también." Dijo, aunque en realidad ya sabía de quién se trataba solo me hice el tonto ya que sería un problema cuando le pregunte cómo se esas cosas.
"Ok. Si eso era todo lo que quieras decirme entonces me retiro." Dije y salí de hay para luego terminar con las clases que todavía quedaban por el día y luego le dirigí a mi casa junto con los chicos.
•••
Era viernes por la tarde. Me encontraba en saliendo del centro comercial de terminar de comprar unas cosas que le había pedido mi madre y me estaba dirigiendo hacia mi casa, pero, antes de llegar a mi casa entre en un callejón y espere a que apareciera la persona que ha estado siguiéndome todos estos días. ¿Que por qué? Pues ya me aburrí de esto así que pensé que ya era hora de conocer a mi acosadora.
No pasó mucho tiempo antes de que una chica de pelo negro y ojos azules entrara en el callejón y sacará una extraña lanza de su porta-guitarras y le apuntara con ella.
"Yuuishi Mochizuki. Cómo Cuarto Progenitor es mi deber matarte." Dijo la típica frase cliché y yo solo tenía un pensamiento en mente.
(¿Que demonios está pasando?) Era normal que tuviera ese tipo de pensamiento al ver la lanza que tenía en sus manos. Quiero decir, esa lanza ciertamente podria causar un gran daño tanto a demonios como a angeles, pero, esa lanza no iba a poder matarme ya que mi familiar podría curarme de cualquier herida causada por esa cosa.
Al principio no entendí que demonios estaban pensando al enviar a alguien con una lanza como esa a matarme, pero luego entendí lo que pasaba. Literalmente me acaban de decir "Te ofrecemos a esta chica junto con la lanza para que pueda ser tu guardaespaldas o lo que quieras. Pero a cambio no te metas con nosotros y no cuadra problemas."
Una vez entendí todo me di un facepalm en mi mente y seguí en lo que estaba.
"Yyyy, quien se supone que eres?" Dije inclinado ma cabeza fingiendo ignorancia.
"Mi nombre es Himeragi Yukina y soy una enviada de la Organización del Rey León para vigilarte y encargarme de matarte si resultas ser un peligro para los humanos." Se presentó Yukina sin dejar de apuntar la lanza en mi dirección.
"Enciendo lo básico. Por cierto ¿Podrías por favor bajar esa lanza?" Dije señalando a la lanza que estaba en sus manos.
"Me niego, no se lo que harás una vez la baje." Dijo mirandome fijamente sin dejar pasar ningún detalle o movimento mío.
"En ese caso." Dije y desaparecí en un borrón para aparecer detrás de ella, al darse cuenta de esto Yukina se dió la vuelta pero en cuanto lo hizo le quite la lanza de las manos, la tomé por la cintura y la acerque a mi.
"Entonces solo tengo que quitartela." Dije mientras seguía abrazándolas por la cintura y levantaba su barbilla para mirarla directamente a los ojos y ver cómo su rostro se ponía cada vez más rojos mientras le miraba.
"¡¡Suéltame pervertido!!" Grito tratando de liberarse de mis brazos pero son esfuerzos, paso un momento antes de que dejara de forcegear me miraba.
"¿Que demonia me vas a hacer?" Dijo con pequeñas lágrimas juntandose en la esquina de sus ojos y mirándome con enojo y vergüenza al mismo tiempo.
"Por ahora nada, no me gusta obligar a nadie a hacer algo que no quería. Mejor esperaré hasta el momento en que tú tomes la iniciativa." Dije con una sonrisa mientras la soltaba y me alejaba unos pasos de ella. Ella al ver que la dejaba libre tomo rápidamente su lanza y le apunto con ella de nuevo con el rostro rojo.
"De verdad eres un pervertido." Dijo mirándome fijamente.
"Quien sabe, solo le comporto así contigo." Dije con una sonrisa burlona lo que hizo que ella de pusiera más roja que antes. Mientras seguia disfrutando el molestarla me di cuánta de algo.
"¿Ese no es el uniforme de la academia Kuoh?" Pregunte curioso por la ropa que tenía puesta, era el uniforme femenino de la academia Kuoh, si ella lo llevaba puesto debe de significar solo una cosa...
"Si, me he inscrito en esa academia para tenerte más vigilado." Dijo a lo que yo solo me encogí de hombros.
"Bueno, será bueno tenerte cerca. Pero puedes bajar esa lanza de una maldita vez, no es como que puedas hacerme mucho con ella de todas formas." Dije de forma despreocupada asiendo señales con mis manos para que baje la lanza, lo que ella hizo unos momentos después.
"Bien, pero si intentas hacer de nuevo algo como lo que hiciste antes no voy a contenerme." Dijo mirándome con ojos acusadores.
"Si si." Dije
"¡Un solo 'si' es suficiente!" Dijo un poco enojada.
"Y bien, que demonios vas a hacer ahora. Más bien, dónde vives?" Pregunte curioso ya que si ella tenía que 'vigilarme' debe de vivir cerca de mi hogar, por lo que quería saber exactamente dónde.
Luego de eso seguí a Yukina a su casa y resultó que ella vive en la casa justo al lado de la mía. Al principio el sorpendio, pero no le di mucha importancia.
Me despedí de Yukina y entre en mi casa y le dirigí a mi habitación para pasar un rato viendo anime o leyendo alguna novela ligera. Quiero decir, aunque esté en un mundo anime no quiere decir que no existan animes como en mi anterior mundo. También habían videojuegos iguales al los de mi anterior mundo, como el Dark Soul o el Minecraft. Pero eso es otro hsitoria.
Luego de estar un rato jugando recordé algo importante.
"Mañana es la cita de Issei, lo que quiere decir que es el día en el que morirá y Rías Gremory lo reencarnara como un demonio, me siento mal al dejar morir a Issei pero es algo necesario, lo mejor es no interrumpir." Dije en voz baja mis pensamientos hasta que escuche un sonido familiar que no había escuchado hace mucho tiempo.
[*DING*]
[El sistema ha verificado el inicio de la historia de DxD por lo que comenzará a dar misiones al usuario]
[Tienes una nueva misión]
["Cambio del destino"]
[Mañana es la cita de Issei Hyodou con el ángel caído Reynare.]
[Impide la muerte de Issei Hoydou a manos del ángel caído]
[Recompensas:
Dos boletos gachas
Obtienes 1000 XP
Una habilidad aleatoria]
[Fracaso: Perderás confianza con Issei Hyodou, Perderás la oportunidad de participar en la historia original]
Mierda....