Chris era un hombre muy machista que se preocupaba por el orgullo de los hombres. Tras enterarse de que su prometida había compartido la misma habitación que otro hombre en el hospital durante toda una noche, montó en cólera.
Por otro lado, Lauren se apresuró a explicar: —Chris, necesitas pruebas concretas antes de hablar. No sabes nada en absoluto. ¿Quién eres tú para decirnos eso a Jordan y a mí?
Jordan también estaba muy disgustado y los tres estaban desayunando alegres, pero la llegada de Chris interrumpió el ambiente. Dejó los cubiertos y le dijo: —Si te gusta ser un cornudo, puedo hacerte el favor. ¿Quieres que lo haga?
—Tú... —Chris estaba tan furioso que apretó los dientes mientras pensaba que Jordan tenía la lengua muy afilada. Ya sea en términos de lucha o discusión, ¡no era rival para él!
Como no quería que siguieran discutiendo, Lauren intervino: —Chris, tengo algo que decirte.
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