Luchando Juntos

La pantera se movió de su posición original y se acercó a Sara.

Ella se puso tensa por el peligro de ser atacada por la pantera en esos momentos. Increíblemente la pantera se detuvo a una distancia de dos metros.

Le dió una breve mirada y se volteó para confrontar a los lobos.

"¡Roarrr!" Rugió amenazadoramente.

Ante esto los Lobos se enfurecieron y mostraron los dientes, el alfa se preparó para atacar, dobló el cuello mirando a lo alto y aulló amenazadoramente a la otra parte.

"¡Auuu!"

Sus acciones volvieron a sorprender a Sara, en el breve contacto visual que tuvieron no sintió ninguna hostilidad hacia ella, al contrario parecía querer protegerlos de los lobos.

Si no pudiera leer con claridad las intenciones de los seres vivos a su alrededor, creería que estaba alucinando. Sin embargo gracias a que conocía sus capacidades, sabía que no estaba equivocada con las intenciones de la Pantera.

Mientras ella pensaba esto, los demás estaba más nerviosos con su aparición.

"¡¿Que vamos a hacer?! ¡¿Tenemos siquiera una oportunidad con ésta Pantera aquí?!" Gritó uno de ellos.

"¡Cálmense, no atraigan la atención de la Pantera!" Dijo el hombre de mediana edad para evitar que cometieran alguna estupidez.

Al escuchar esto Sara dijo: "No se preocupen por la Pantera, solo concentrense en escapar cuándo se los indique".

"¡Pero no sabemos que pueda hacernos!" Dijo otro de ellos.

"Confíen en mí, la Pantera no nos atacará".

Cuándo el mismo chico estaba a punto de replicar, el hombre de mediana edad lo detuvo: "Confía en ella, es nuestra benefactora, debe haber alguna razón para su confianza"

Juan Carlos que estaba allí escuchando todo, suspiró de alivio por dentro al ver que sus intenciones fueron reconocidas por la chica.

Sin la preocupación de ser atacado por el grupo, comenzó a moverse lentamente por el lugar en espera de su próximo ataque.

Al mismo tiempo los lobos también cambiaban de lugar buscando una oportunidad para atacar sin morir en el intento.

Las serpientes de Sara parecían haber terminado de quemar a los desafortunados Lobos, inmediatamente regresaron a su lado.

Luego de que llegaran junto a ella, guío a una las serpientes y ésta atacó a uno de los Lobos.

El Lobo retrocedió para esquivar el ataque, pero en ese momento la Pantera verde se abalanzó sobre el.

Al ver esto otro de los Lobos corrió en su ayuda, cuándo estaba a punto de llegar ante la Pantera la otra serpiente de fuego apareció frente a el llenando instantáneamente su cuerpo.

Aprovechando ésta oportunidad Juan Carlos continúo su ataque asestando un zarpazo en el hocico del lobo dejándolo inutilizable, sin embargo no fue el único que vió la oportunidad.

El lobo alfa junto con el lobo restante corrieron hacia Sara con la intención de asesinarla rápidamente.

Juan Carlos se dió cuenta de esto, mordió directamente el cráneo del lobo con todas sus fuerzas y cuándo estaba a punto de ayudar a Sara, la serpiente que mantenía a raya a uno de los Lobos se apresuró en su defensa.

Los Lobos eran veloces pero la serpiente lo era aún más, antes de que éstos pudieran atacarla la serpiente ya estaba frente a ella.

La serpiente se retrajo y se abalanzó frente al compañero del alfa quemando su piel instantáneamente.

El alfa por otro lado continúo su ataque sabiendo que ya no tenía más medios para protegerse.

Juan Carlos hecho rápidamente un vistazo al Lobo que debería estar siendo quemado por la serpiente anterior y lo vió retorciéndose en el piso, mientras se rascaba el hocico.

Esto inmediatamente le trajo recuerdos sobre la forma de pelear, de la protagonista de la novela e instantáneamente supo que le sucedía.

Dejo a ese Lobo por su cuenta y se abalanzó sobre el Alfa.

El Alfa ya había llegado ante Sara, lanzó un zarpazo hacía su estómago y ella retrocedió esquivando el ataque por poco.

Se lanzó a un lado esquivando un segundo zarpazo y rodó por el suelo antes de incorporarse nuevamente.

En su mano derecha había un cuchillo de combate del tipo Bowie, con una hoja larga y una empuñadura no cilíndrica.

"¡Ahora, corran!" Gritó a los demás para que aprovecharan la oportunidad de escapar.

El grupo escuchó su grito y sin dudarlo corrieron lejos del lugar.

El Alfa se enfureció por esto, quería perseguirlos pero si no eliminaba a la mujer y la Pantera no podría cazarlos fácilmente.

Cegado por la irá, se abalanzó sobre Sara sin ninguna consideración.

Ella vio el descuido del Alfa y avanzó hacia él, cuándo estaba a punto de recibir el ataque se agachó dejando qué el Alfa pasara sobre ella.

El Alfa no pudo hacer nada y paso encima de ella, sin embargo antes de que aterrizara en el suelo, Sara soltó el cuchillo.

Cuándo el cuchillo llegó a la altura de su cintura, ella dió un giro y extendió su pierna dando una patada giratoria hacia el cuchillo con todas sus fuerzas.

El cuchillo se incrustó en el estómago del Alfa haciéndolo aullar de dolor.

Finalmente Juan Carlos llegó junto a Sara y vió ésta escena, estaba impresionado por la destreza de ésta mujer en el combate cuerpo a cuerpo, pero no podía distraerse y se abalanzó sobre el herido Alfa.

El Alfa lo vió venir y trató de retroceder, pero la herida en su estómago lo volvió más lento.

Juan Carlos lo alcanzó rápidamente y lo mordió en la pata izquierda.

El Alfa levantó su otra pata y le lanzó un zarpazo, cuándo las garras del Alfa estaban a punto de perforar su cabeza todo su cuerpo se volvió de un color gris metálico, las garras rebotaron creando chispas debido a la dureza de su cuerpo.

En ese momento una de las serpientes de fuego de Sara terminó con su presa y se acercó a ellos.

Juan Carlos vió ésta escena y dejo de morder al Alfa.

Sara comprendió rápidamente su intención y antes de que el Alfa pudiera recuperarse, la serpiente lo envolvió.

Si no estuviera herido habría soportado sin mucho esfuerzo a la serpiente, pero lamentablemente para el, la serpiente de fuego encontró su camino entre sus heridas atacando desde dentro también.

Viendo al Alfa ser quemado por la serpiente de Sara, centro su vista en el Lobo que se retorcía en el suelo y dió un rugido bajo a la chica.

"Grooo..."

Ante éste rugido, Sara sin dudarlo desactivo la llama verde dentro del hocico del Lobo para que Juan Carlos pudiera atacarlo sin miedo.

Momentos después el Alfa y el otro Lobo fueron asesinados.

Sara retrajo su serpiente hacía su cuerpo y se acercó al Alfa, cortó su craneo y saco su núcleo de energía.

Juan Carlos se acercó a ella y la observó sacar el núcleo.

Cuándo terminó le rugió suavemente y se volteó en una dirección indicándole que la siguiera.

Ella vaciló por un momento antes de asentir.

Poco tiempo después a la distancia vislumbró las siluetas del grupo que iba con ella.

El grupo se dió cuenta de su presencia y levantaron las manos mientras corrían a ella.

"¡Estás bien!" Dijeron todos con alegría en sus rostros, pero antes de acercarse más vieron a la Pantera y se detuvieron.

El hombre de mediana edad vió a Sara y le preguntó: "Eh... Señorita Sara, ¿Que haremos con la Pantera?"