El valor del dinero
Qipao: vestido femenino utilizado en China.
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El edificio del ayuntamiento era la segunda estructura mas alta de todo el asentamiento después de la mansión de Ma Teng, en su entrada 5 guardias armados estaban apostados vigilando a todas las personas que ingresaban.
Con la carga en su espalda y la cabeza cubierta, Jin paso como una persona común que venía a intercambiar materiales, bajando la mirada, él camino por un largo pasillo llegando a un salón donde 2 encargadas registraban a las personas.
—Señor Guan Yu, por favor deposite todas las cosas que quiera intercambiar en las mesas delante de usted, nosotras nos encargaremos de registrar cada una de sus pertenencias entregándole el valor correspondiente sin ninguna falla—
Recibiendo su tarjeta de identificación, Jin camino a una de las mesas y dejando su carga empezó a sacar trozos grandes de carne y algunas hierbas que podrían tener algún valor.
—Espere un momento mientras calculamos el total de sus pertenencias, si gusta puede sentarse en la sala principal…no demoraremos mucho—
Después que dos hombres salieran detrás de las encargadas, ellos cargaron todas las pertenencias al interior mientras una de ellas anotaba todo en una pequeña libreta.
—Ya terminamos de realizar el conteo total, por las hierbas obtendrá 1 moneda de hierro y 5 de cobre, por las 2000 libras de carne obtendrá 240 monedas de hierro, sumando un total de 241 monedas de hierro y 5 de cobre, en un momento vendrá mi compañera y le entregará su dinero—
Dejando una sonrisa falsa, la encargada se olvido de la existencia de Jin y atendió a la siguiente persona en la fila, para ella, Jin era alguien fácil de engañar, él nunca esperaría que en realidad la carne pesara mas de 2500 libras, como funcionaria bajo Ma Teng, nadie podía hacer nada contra ella.
Apoyándose en una de las paredes, Jin espero paciente hasta que la segunda encargada trajo su dinero, aun si sufrió una perdida, la cantidad de carne en su inventario era algo que la encargada nunca creería.
Sin dejar una segunda palabra Jin se retiró del ayuntamiento evitando llamar la atención, había visto lo suficiente del ayuntamiento durante el día.
Ya en la calle, Jin se acercó a una de las tiendas y quiso ver el valor de las monedas, según lo que escucho de la encargada, 10 monedas de cobre eran equivalente a 1 moneda de hierro, y el tenia mas de 200, esperaba que le alcanzara para llevar las cosas que las demás le encargaron.
—Pase pase, todos nuestros productos son los mas frescos de la región, no se arrepentirá una vez pruebe el sabor de nuestras frutas especiales, acérquese sin compromiso—
Sobre el mesón, cientos de frutas rojas estaban apiladas formando la figura de un lobo, cuando Jin tomo una de ellas, el vendedor se acercó a Jin con los ojos brillantes.
—Así que le gusto nuestra fruta especial, se la puede llevar por solo dos monedas de cobre, si lleva 5 de ellas se las puedo dejar en 9 monedas de cobre, que opina, verdad que es una buena oferta— tomando 4 mas en sus manos, el vendedor le entrego las frutas a Jin sin que el dijera nada.
—Me llevare las 5 frutas, solo necesito que me responda una pregunta—
A Jin no le importo perder algunas monedas por las frutas, solo quería tener un poco más de información.
—Me gusta, pero debe saber que la información también tiene un precio, que tal si lo dejamos así, si la pregunta es sencilla le cobrare 1 moneda de cobre, pero si la pregunta es complicada, le cobrare 1 moneda de hierro, sea la respuesta de su agrado o no, primero págueme las frutas y luego haga la pregunta—
Recibiendo las monedas, el vendedor pudo ver un poco el interior de la bolsa que Jin cargaba en su cintura, sin revelar algún tipo de emoción espero que Jin preguntara.
—Necesito saber la ubicación de una herrería y una tienda donde vendan muebles, también me gustaría que me recomendara un lugar donde pueda pasar la noche—
Dando un suspiro, el vendedor frunció su rostro al escuchar las preguntas, ninguna era de mucha dificultad, si Jin continuaba caminando por la calle en poco tiempo encontraría las tiendas mencionadas.
—Cerca de la entrada del asentamiento esta la herrería Feng, unos metros más adelante se encuentra la casa de carpintería Yu. Si busca un lugar donde dormir por un buen precio le recomiendo la posada de las hermanas Xue que esta en el centro de la calle principal— tosiendo el vendedor agrego —en total fueron 3 preguntas sencillas, así que me debe 3 monedas de cobre—
Extendiendo la mano con una sonrisa, el vendedor espero que Jin le entregara las monedas, en el momento que Jin se acerco al vendedor, además de las 3 monedas de cobre, Jin dejo una moneda grande de hierro y le hablo en voz baja —Soy nuevo en el asentamiento, espero que esos hombres no tengan que ver nada con usted, de ser así me veré obligado a silenciarlo si encuentro alguna conexión—
Abrumado por la presencia de Jin, el vendedor negó fuertemente con la cabeza al ver la mirada afilada de Jin sobre él. En el momento que el vendedor había visto la bolsa de monedas por un momento se sintió tentado, pero aun no había echo ningún movimiento contra Jin.
—Eso es bueno…es cierto, no me ha dicho el nombre de esta fruta tan especial—
Liberando un pequeño suspiro, el vendedor volvió a su actitud habitual y respondió —Por supuesto, debe saber que estas frutas fueron encontradas mientras un grupo de sobrevivientes huía de cientos de lobos feroces, es por eso que la fruta se llama lagrima de lobo, después que el asentamiento supiera de su existencia envió a un grupo bien armado y eliminaron a todos los lobos que vivían allí—
Al ver llegar a otro cliente, Jin dejo en paz al hombre, si decía la verdad él no iría por su vida, era solo que las miradas sobre su cuerpo no se detuvieron aun cuando se mezcló entre la multitud.
—Creo que es mejor buscar las cosas que me encargaron, solo espero que esos tipos se aburran—
Al extender la lista, Jin se sintió asombrado por la cantidad de cosas escritas en él, desde cosas sencillas como jabón, pasta de dientes, champú, hasta cosas exageradas como secadoras de pelo, algunos perfumes y nombres de maquinas que Jin no reconoció.
Descartando todo lo que era imposible encontrar en el asentamiento, Jin reviso cada una de las tiendas mientras se dirigía a la casa de carpintería Yu.
Dos horas después, Jin había conseguido la mitad de la lista que ellas le entregaron, él se encontró sorprendido por la facilidad de las personas para fabricar las necesidades básicas del antiguo mundo.
Al llegar a su destino, un letrero bien acabado con la palabra Yu recibió a Jin.
Llamando al interior, luego de unos minutos un hombre con el cabello gris y las manos callosas lo atendió.
—Así que, dime joven, que necesitas que fabriquemos, mientras puedas pagar el precio podemos crear lo que quieras—
—Me gustaría amueblar una casa bien grande, así que necesitaría unas 30 camas, 20 estanterías, 10 mesas grandes y 10 pequeñas, 20 veladores, 10 sofás, 50 sillas…—
—Detente por favor, acaso me quieres dar un infarto, tienes que comprender que aun si me veo joven ya estoy en la mitad de mis 60 años— tomando un poco de aire pregunto —Espero que no sea una broma, acaso sabes cuanto te puede costar fabricar todo eso, además necesitare conseguir mas materia prima para poder terminarlos en caso de que no bromees—
—No sé el valor del dinero, dígame cuanto puede hacer con esto— dejando su bolsa de monedas sobre la mesa, Jin espero que el hombre la revisara sin temor a que le robara, su mirada estaba tranquila vigilando cada movimiento de las personas en el techo del lugar.
Luego de contar todas las monedas, el carpintero dio un suspiro de alivio y continuo —Aunque eso es bastante dinero, solo te alcanzara para hacer las 30 camas y las 20 estanterías, si necesitas que fabriquemos todo lo demás te faltaran otras 300 monedas de hierro—
Revisando las facciones del carpintero, Jin sintió que el no le estaba mintiendo —Esta bien, considera eso un adelanto, ¿en cuanto puedo regresar para que tengas todo listo?—
"Este tipo esta loco, si trabajo todos los días me tomara al menos un mes completar su pedido" —Estimado cliente, solo tengo la ayuda de mi hijo para fabricar los muebles, si trabajamos todos los días me tomara al menos 2 meses hacer todo, ¿le parece bien ese tiempo?—
Limpiándose la frente, el hombre se sintió un poco débil al pensar lo que tendría hacer a partir de ese día —Puede contratar a mas personas, no se preocupe por el dinero, pagare su precio siempre que no me este engañando— al sentir que las miradas sobre el habían desaparecido, Jin decidió actuar después que dejara al carpintero.
—Me deja en un problema…pero no se preocupe, en el nombre de la familia Yu completaremos su pedido en solo un mes—
—Una semana, ni un día más…le pagare el triple si completa mi pedido en ese tiempo— Jin no podía esperar tanto tiempo para conseguir algo tan básico, si solo era dinero lo que el hombre necesitaba, Jin no tenía problema en entregárselo.
Arrodillado en el suelo, el hombre sintió que se volvía mas anciano en solo un segundo —Esta bien, una semana, pero necesito que triplique el adelanto, si no este hombre no se moverá ni una pulgada— dijo firmemente.
—No hay problema, regresare mas tarde con el dinero—
Dejando al hombre desconsolado, Jin desapareció por la calle principal.
—Ese tipo ya se fue, aprovechemos que el anciano se quedó solo—
Del techo de la carpintería, cinco hombres salieron de su escondite preparados para atacar al anciano, habían visto como Jin dejo la bolsa en la tienda, sin nadie que lo protegiera estaban seguros de robarla.
Antes que los hombres pusieran un pie en la tienda, el filo de una espada atravesó sus gargantas sin poder hacer ruido, guardando sus cuerpos dentro de su inventario, Jin descubrió que ellos tenían algunas monedas de cobre.
—Si no fueran codiciosos les hubiera permitido mantener sus vidas— Jin no se contuvo con los hombres, ellos emitían un fuerte aura asesina a su alrededor, estaba seguro de que no era la primera vez que asesinaban a las personas para conseguir dinero.
Dejando atrás la carpintería, Jin ingreso a la herrería Feng y encargo utensilios de metal, así como algunos juegos de ollas, aunque el estaba acostumbrado a usar palillos para comer, ese no era el caso de sus compañeras, pensando en ellas Jin decidió conseguir un poco de ropa.
Regresando al ayuntamiento, Jin intercambio mas de 10000 libras de carne dejando sin palabras a las encargadas, aunque ellas se sintieron felices al conseguir mas dinero para ellas, no entendían como un hombre tan joven podía llevar eso en su espalda, ellas habían escuchado de los hombres con habilidades que estaban al servicio del líder Ma Teng y ellas creyeron que Jin era uno de ellos.
Dejando el adelanto de dinero al carpintero, Jin decidió visitar la posada que le recomendó el vendedor.
La posada tenia dos pisos de alto, en su interior tenia algunas habitaciones pequeñas y un pequeño comedor dirigido por una mujer en sus 30 años.
—Bienvenido a nuestra posada, mi nombre es Xue Ming y mi hermana, Xue Ling es la cocinera de la posada. Si desea pasar una noche, eso tendrá un costo de 8 monedas de cobre, si desea tener una comida el precio será de 1 moneda de hierro y 2 de cobre—
Ambas hermanas vestían un quipao negro con un bordado de flores blancas y rojas, su cabello negro tomado con una cinta evitaba que este cayera por su espalda.
Guiado por sus palabras, Jin saco una pequeña bolsa con mas de 60 monedas de hierro en el y se las entrego —Me quedare dos meses, eso debería ser suficiente por ahora—
Ellas contaron las monedas con cuidado, Jin era el primer cliente que se quedo mas de una noche en su posada, por lo general todos los supervivientes después de un día decidían vivir en la casa de ayuda que implemento Ma Teng para aquellos que no podían costear su propia vida.
Cuando ellas se aseguraron de que todo estaba bien, Xue Ming saco una libreta y le pido a Jin que firmara su nombre con una pluma bien diseñada.
—Me gustaría saber algo, desde que llegue al asentamiento no encontré papel o tinta como la que tienen ustedes, ¿hay algún lugar donde la pueda conseguir?—
—Eso es fácil, para obtenerlas debes ir directo al ayuntamiento y pedir que una de las encargadas te enseñe el inventario disponible, ese tipo de productos solo los puedes encontrar ahí ya que se consiguen de otro asentamiento—
—Debes estar cansado, sígueme, te enseñare cual será tu habitación—
Después que Xue Ling dejara solo a Jin, el bloqueo la entrada de la habitación y se camuflo en la oscuridad, la investigación durante el día tuvo sus frutos, con la llegada de la noche Jin quiso conocer la otra cara del asentamiento.