Volumen 5: Capitulo 108
· "las comillas indican los diálogos"
· ~Estas líneas en movimiento indican los pensamientos~
· Los nombres en color rojo indican quien esta hablando
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"¿Qué haces aquí, Bil?" Había dicho muy asustada y molesta.
"Ah, nada, solo caminaba por la ciudad y me encontré con mi esclava y decidí acercarme para saludar" Había dicho con una sonrisa repugnante, mientras que tres guardia con armaduras de color platino lo protegían desde detrás.
Felida tras ver que Bil llevaba a tres soldados detrás de él, decide dar un salto hacía atrás y extender sus dos brazos hacía los costados, para demostrar que iba a proteger a los niños, tambien le dice a los niños en un tono muy, pero muy bajo "Si algo me sucede, vayan para el gremio y encuéntrense con Zero, tiene un pelo y cejas blancas, su piel es morocha, va a ser muy fácil que ustedes lo distingan, después de todo es la única persona que conozco que tiene esos rasgos"
Todos los niños asintieron con la cabeza, luego de haberles dicho esto a los niños ella con un tono de enojo y un rostro enojado que hacía que su lindo rostro se arrugara dijo "Que quieres conmigo, acaso no te enteras de que no quiero saber nada de ti"
"Oh, en serio me preguntas eso mi querida Felida, todavía no he logrado probado tu hermoso y pequeño cuerpo, si vuelves conmigo a por las buenas juro que vas a pasar buenos momentos y quien sabe que más, capaz puedas tener varios niños de mi parte" Había dicho el tipo mientras se lamia los dedos de lo excitado que estaba por probar el cuerpo de Felida.
Al ver esto Felida con un rostro de asco dijo fuerte y claro "Jamas tendría algún tipo de relación con humanos que se comportan de esa manera repugnante y asquerosa" Bil al escuchar esto cambia su rostro a uno serio y con un tono de enojo grita "Como te atreves a gritarme en ese tono siendo que soy el único hijo heredero de una de las tres casas más nobles del imperio, los Akados, además soy uno de los mejores amigos de su majestad"
Cuando Felida escucho esto se quedo perpleja como una roca, no podia creer que se había involucrado con una de las casas más nobles del imperio y además estaba a punto de enfrentarse a uno de los herederos de una de esas casas.
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Cada personas que pasaba cerca de la pelea se alejaba, otros desde lo lejos miraban y observaban como se desarrollaría esta pelea entre un noble de gran rango contra una esclava Demi-Humana.
Esta pelea se extendería como un gran chisme por toda la ciudad, posteriormente se escucharía por las calles del imperio que Bil el hijo heredero de los Akados se la pasaba tonteando y bordeando por las calles con Demi-Humanos, otros decían que hacía de excelente manera reprender a los Demi-Humanos para que sepan que las tres casas nobles y la familia imperial son la autoridad máxima y única en el imperio.
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"Maldición, pensé que vendrías conmigo por las buenas, pero por lo que veo no me queda otra opción que hacerlo por las malas" Dijo Bil con una sonrisa malévola mientras algunas babas salían de su boca, esto le había parecido asqueroso hasta a sus mismos guardias, pero no tenían otra opción más que aceptar la orden repugnante que su maestro les iba a dar posteriormente. "Vayan y traigan a esos niños y cuiden bien de las dos chicas que parecen bastante mayores, porque hoy parece que me voy a divertir con una elfa y dos preciosas y tiernas niñas" Había dicho con un rostro repugnante y mientras seguía baboseando, esto no les gusto para nada a sus soldados, pero no tuvieron otra opción más que aceptar la demanda de su joven amo.
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Estos soldados llevaban el emblema de la familia Akados en sus armaduras de platino relucientes, los soldados de la casa Akados estaban divididos en dos, los caballeros que son los que siempre andan con Bil y los asesinos que se encuentran al mando de su padre, es decir, Frederick Akados tiene el total control de los asesinos especializados que se encargan de hacer cualquier cosa sucia que su majestad les pidiera, aunque esto no era un gran secreto para nadie en la capital.
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Felida al escuchar lo que Bil le había pedido a sus soldados se quedo dura y dudo por unos segundo, pero reacciono rápidamente y les dijo a los niños "Váyanse de acá, vayan con Zero, él los protegerá, huyan" Con muchas lagrimas llenas de recuerdos los niños salieron corriendo por detrás de ella, pero la que tambien lloraba y sentía esos sentimientos era Felida, ya que si la atrapaban no volvería a ver a sus niños y mucho menos a su hermano, pero había algo, un sentimiento de madre que la impulsaba a seguir parada en donde estaba, ese sentimiento era el amor que tenía por esos niños, un único y especial sentimiento que solo los verdaderos padres sienten por sus hijos.
"Ven y diviérteme Felida" Dijo con babas y con un tono excitado.
Felida de manera inmediata junto sus brazos y formo un triangulo con ellos y dijo mientras hacía esto "Espíritu Klifo, ven a mi y cumple con tu contrato como amo tuyo que soy" Después de decir esto el triangulo que había formado con su mano empezó a brillar, sus ojos habían cambiado a un color dorado, esto demostraba que el llamado del espíritu se había hecho de la manera correcta, las personas normales no podían verlas y los elfos tampoco podían ver un espíritu, sino tenía un contrato con algún espíritu que les permitiera tener los ojos espirituales.
Felida probo primero usar [Dormir] esta era la habilidad que todo espíritu tiene normalmente, es decir, era la habilidad básica de todo espíritu y como habilidades especiales podia tener algunos elementos mágicos para usar, en esto tambien dependía el tipo de espíritu que era.
Cuando uso la habilidad [Dormir] no funciono en Bil, esto dejo muy sorprendida a Felida, pero no por esto ella se rindió y decidió utilizar garras de lava y el espíritu que parecía una roca de lava lanzo unas ondas que como decía su nombre, eran unas ondas de jarras de lava que fueron repelidas muy fácilmente por Bil sin siquiera haber movido un dedo.
Luego casi se cae de lo sorprendida que estaba y decidió lanzar cinco bolas de rocas envueltas en lava que tambien fueron muy fácilmente repelidas por Bil.
Tras estos tres fracasos en sus ataques, ella se tiro al piso y desistió de cualquier contrataque. Bil se le acerco y cuando trato de agarrarla, ella trato de no ser atrapada, pero con mucha fuerza y velocidad Bil le pego en la boca del estomago haciéndola escupir y perder el conocimiento, luego Bil la agarro y subió al hombro, mientras que decía unas palabras "Parece que hoy lo voy a disfrutar como nunca, ya que la ultima elfa con la que estuve no duro nada, ah, ahora que me doy cuenta era tu amiga" él no recibió respuesta de parte de Felida debido a que no estaba consiente por el golpe que había recibido en la boca del estomago.
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Luego de esperar un minuto, sus guardias llegaron y en sus brazos traían a todos los niños que parecían encontrarse en un estado inconsciente.
Cuando Bil vio esto dijo con un tono feliz a los guardias "Excelente trabajo, chicos, ahora volvamos a la mansión" los soldados le responden con unos rostros decaídos "Parece que se nos escapo la niña que era la mayor"
Al escuchar esto Bil se enoja por un momento y dice "Esta bien, esta bien, no se preocupen, después de todo luego se las arreglaran con mi padre y con más trabajo" los soldados apenados respondieron "Esta bien, joven amo"
Después de todo esto partieron hacía la villa de los Akados.
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Lo que Auri les había contado a Zero y Diana era desde que salieron de casa hasta que ella había llegado con ellos.
Cuando Zero termino de escuchar lo que había sucedido por parte de Auri dijo con un tono enojado y furioso "Maldición, Felida se topo con gente muy importante del imperio, no puedo intervenir y causar problemas en la capital sin haber recopilado algún tipo de información" Por lo que en realidad Zero estaba preocupado era por no poder ser un aventurero si él intervenía en este problema, ya que sabrían quien es y no podría inscribirse en el gremio y no solo eso, sino que tambien le causaría problemas a León y su esposa que ya se encontraban en una situación difícil.
Pero luego de unos segundos de estar pensado una gran idea surgió por parte de Zero e hizo una gran sonrisa de felicidad y satisfacción por lo que iba a suceder.
-Continuara-