CAPÍTULO 183- Diferentes eventos.

Humanos contra demonios.

CAPÍTULO 183

(Mundo 50.)

Dreimo está en la cueva, recibiendo golpes de Kiasan.

Ella lo está golpeando en el rostro usando sus puños.

Él está recibiendo una brutal paliza por culpa de su falta de agilidad.

—¡Vamos, inútil! ¡Esquiva los golpes!

—¿Inútil?

Esa simple palabra le trae malos recuerdos a Dreimo.

Él recuerda las palabras que su madre le dijo una vez.

(—¡Eres un inútil! ¡¿Por qué invitaste a ese niño a la casa?!

—Q-quería enseñarle mi colección de muñecos.

—¡Tuve que matarlo! ¡No debes traer a personas aquí, inútil!)

Dreimo esquiva un golpe de Kiasan e intenta golpearla.

Ella atrapa el puño de Dreimo.

—No seguiré siendo el mismo chico inútil.

Kiasan sonríe.

—Fufu. Me gusta esa mirada. ¡Sigamos!

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(Mundo 63.)

Izuke y los demás están sentados en la mesa.

Él les contó sobre lo que era un cuento, e incluso les contó cuentos.

—Eres muy inteligente, Izuke. Yo no sabía nada sobre eso.- Dijo Número 2.

—Este mundo es moderno, pero ustedes son ignorantes… Supongo que en un mundo en donde existen seres alienígenas que intentan conquistar el mundo, no hay tiempo para ir a la escuela.

—No son alienígenas, ellos vivían en el centro de la Tierra, estaban dormidos, y hace 100 años, despertaron.- Dijo la pequeña cabeza de niña.

—Ya veo… Bueno, me retiro. Tengo cosas por hacer.

—Dices que eres de otro mundo, ¿no? ¿Sabes regresar a tu mundo?- Dijo Número 2.

—Bueno… Hanako, sal.

Hanako sale de la camisa de Izuke.

—¿Sí?

—¿Sabes hechizos para viajar a otro mundo?

—No… Pero podríamos regresar al reino hada y preguntarle a Seimo si puede enviarnos al mundo 43.

—¿Seimo sigue trabajando? Vaya, vaya.

Izuke se levanta de la mesa.

—Gracias por todo. Fue un gusto…

Una enorme explosión se escucha detrás de Izuke, afuera de la base.

—¡¿Qué fue eso?!

Todos se levantan de la mesa.

—¡Nos atacan!- Dijo el chico raro.

—¡Hanako!

Hanako vuelve a su forma como espada e Izuke la toma con su mano derecha.

—¡Les ayudaré!

Izuke se dirige corriendo hacia la ventana.

Salta y se protege con sus brazos. Rompe la ventana y se transforma en hada.

—Por aquí se escuchó.

Está lloviendo demasiado… Es realmente molesto pelear así.

—¿En dónde están?

Del suelo sale un enorme gusano hecho de metal. Es gigantesco, mide aproximadamente 150 o 200 metros.

Intenta comerse a Izuke, pero él se aleja volando rápidamente y evita ser comida de gusano. El gusano tiene cientos de afilados dientes.

Una de sus mordidas es suficiente para matar sin problemas a una persona.

Pero, en lugar de preocuparse, Izuke se emociona.

—¿Es un robot? ¡Genial!

Izuke toma su espada con ambas manos.

—¡Vamos!

Se dirige volando rápidamente hacia el gusano.

—¡Fortalece mis brazos, Hanako!

El gusano le lanza un ácido que sale por su boca, pero Izuke desciende rápidamente y lo esquiva.

Izuke comienza a atacar al gusano.

—La desventaja que tienen los enemigos gigantes, es que son más fáciles de atacar.- Dijo sonriendo.

Izuke comienza a dar vueltas y ataca al gusano mientras da vueltas.

Lo está destrozando rápidamente.

—¡¡Llegaron los refuerzos!!

Varios misiles impactan sobre el gusano.

—¡¡Nosotros te ayudaremos, Izuke!!- Gritó Número 2 desde su robot.

—Este lugar es interesante… Me quedaré un tiempo aquí.- Dijo Izuke, mientras observa a los robots, que se acercan rápidamente a él.

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(Mundo 1.)

Diego está corriendo mientras tiene a Nelfrar en la espalda.

Dax está flotando a su lado en su forma como espada y Cristhela está volando al lado de Diego.

Diego está demasiado cansado, pero está dando su máximo esfuerzo para seguir adelante.

—Llevas dos horas corriendo, debes descansar.

—A-aún no… ¡Dax, usa tu magia curativa otra vez!

—Lo siento, Diego, ya la usé dos veces hoy contigo, debes esperar. Sabes que no lo puedo usar tan seguido.- Dijo Dax.

—M-mierda…

Diego cae al suelo… Realmente está agotado.

A diferencia de Daniel, él no tiene magia.

Daniel puede usar magia curativa para no estar tan cansado y entrenar más, pero Diego no tiene esa ventaja que Daniel tiene.

Pero, considerando que es un simple humano, lo está haciendo bastante bien... Y en cuanto a esfuerzo, él supera por completo a Daniel.

Nelfrar se levanta y ayuda a Diego a levantarse.

—Mereces un descanso, Diego.- Dijo Nelfrar.

Diego sonríe y cierra los ojos.

—Sí… Supongo que sí.

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(Ciudad Celstia.)

La ciudad Celstia se encuentra en el país Mismar. Mismar es un país en donde siempre hay nieve.

Nadia y Sinfer están caminando por la ciudad. Las personas parecen no importarles que estén ahí... Después de todo, nadie los conoce.

—No pudimos pelear con Daniel, pero logramos conseguir millones de demonios.- Dijo Sinfer.

—Es una pena... Aún no puedo creer que Cristi haya derrotado a Sufuco.

—Bueno, después de todo, era la abuela de Daniel… Tu familia es muy rara, pero increíble, Nadia.

—Sí…

Nadia recuerda al padre de Daniel y sonríe.

Él era considerado un chico raro que nunca sonreía.

Después de la muerte de su hermana, él se volvió un chico más serio y callado.

Y él solo sonreía cuando estaba con su familia.

—Realmente lo es.

—Sufuco despertó.- Dijo la voz de Solmar dentro de sus mentes.

—Bueno… Esto se pondrá feo.- Dijo Sinfer preocupado y sudando.

—¡¡¿Qué?!!

Un gran grito se escucha en el cielo.

—¡¡¿Escapó!!

Es la voz de Sufuco, y parece realmente enojado.

—¡¡Son unos inútiles!!

Nadia y Sinfer levantan las miradas, mientras que las personas observan a su alrededor asustadas y confundidas.

—¿Qué fue eso?

—¿Quién gritó?

Sinfer traga saliva.

—Nadia, ¿sabes que pasa cuando Sufuco se enoja?

—No lo sé.

—Se vuelve loco y destruye todo a su alrededor…

Solmar está cayendo del cielo. Está completamente herido, tiene heridas profundas por todo su cuerpo, y sus dos ojos fueron arrancados.

—Y ataca a todos, incluso a sus compañeros.

Solmar cae sobre unos barriles y los destruye.

—Lo mejor sería escapar.- Dijo Nadia asustada.

Hasta ella le tiene miedo a Sufuco.

La reputación que se ha ganado con los demonios es de temer.

Solo un idiota lo retaría.

—Sí… Es lo mejor.

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(Mundo 15.)

El cazador de demonios que conoció Izuke hace tiempo, está parado frente a una mujer, que está sentada en un escritorio. Están en una oficina, que se encuentra en el último piso de un enorme edificio.

La mujer tiene el cabello negro y largo, usa una falda negra corta, una blusa blanca y un chaleco negro. Usa lentes negros y está algo plana.

—Muy bien, Yuno, haz hecho un buen trabajo. Eliminaste a 236 demonios esta semana.

—Gracias.

—Últimamente más demonios han aparecido… Está aumentando el número de demonios... Debemos descubrir de dónde vienen… Para eso, necesito que captures a un demonio con vida.

—Cuente con eso.

—Puedes retirarte.

Yuno se da la vuelta y se dirige a la puerta.

—Por cierto, Yuno…

Yuno se detiene y voltea a verla.

—Te conseguimos un nuevo compañero. Irá a tu casa en la noche. Es un novato, pero tiene un gran potencial. Es como tú.

—Ya veo… ¿Le hicieron lo mismo?

—Sí.

—Está bien… Le enseñaré a trabajar.

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(Mundo 1.)

En el pueblo de los Elfos, Nirfa abre los ojos poco a poco. Está acostada en una cama, en una pequeña habitación.

—¿Eh? ¿En dónde estoy?

"Cuando despiertes, intenta olvidarme… Vive tu vida… Sé feliz."

Nirfa recuerda las palabras que Daniel le dijo.

—¿Daniel? ¡¿Daniel, estás aquí?!

Nirfa se levanta de la cama, está descalza, pero no le importa.

Sale de la habitación, está en una pequeña casa de madera.

—¿Despertaste, Nirfa? Ven, estoy en el comedor.- Dijo la anciana.

Nirfa se dirige al comedor.

—¿En dónde estoy?

Entra al comedor y observa a la anciana, sentada en una mesa comiendo un plato de sopa.

—Sé que tienes muchas preguntas… Toma asiento.

—... Está bien…

Nirfa se sienta en la mesa y la anciana la observa a los ojos.

—Escucha, Daniel me dijo que te dijera lo siguiente: "lo siento mucho, pero es lo mejor… Yo soy peligroso, no quiero que mueras por mi culpa."

—¿M-me dejó?

—Sí… Lo siento.

Lágrimas salen de los ojos de Nirfa y se levanta de la mesa.

—¡Regresaré con él!

—No sabes en dónde está. Y los humanos siempre intentan matarnos… No debes irte… ¿Tú lo amas?

—Sí… ¡Lo amo!

—Si él te ama también, regresará por ti… Solo espera… Si te vas, morirás.

—Pero…

—Solo espera… Si te ama, regresará por ti.

La anciana se levanta y se acerca a ella.

—Yo también estuve enamorada una vez… Sé lo que sientes, Nirfa… Te recomiendo que esperes… Si te ama, vendrá por ti.

Nirfa reflexiona por unos segundos y baja la mirada.

—Supongo que tienes razón… Si Daniel quiere que esté aquí, es por alguna razón… Seré paciente.

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(Mundo 63.)

Izuke está sentado sobre los restos del gusano.

—¡Genial! Este lugar es realmente interesante.

Número 2 y los demás se acercan a él.

—Buen trabajo, Izuke.- Dijo Número 2.

—Gracias… Bueno… Decidí quedarme un tiempo en este lugar… Mis amigos están muertos, y no tengo familia… Creo que debo comenzar de cero... Mi nombre es Izuke, es un gusto conocerlos.

—Mi nombre es Número 2.

—Mi nombre es Número 1- Dijo el chico raro.

—¡Yo soy Tania!- Dijo la pequeña cabeza de chica.

—Yo soy Kenmia.- Dijo la chica humana, que parece que tiene 20 años.

—Yo soy Akaine.- Dijo la chica con el cabello azul.

—Yo soy Yoske.- Dijo el hombre moreno.

—Yo soy Mei.- Dijo la chica que es bastante hermosa y ardiente. Le guiña el ojo izquierdo cuando lo dice.

Hanako vuelve a su forma humana.

—Mi nombre es Hanako.

Izuke se levanta y sonríe.

—Bueno, tengo hambre… ¿En dónde puedo conseguir comida?

—Vamos a nuestra casa, te daremos comida.- Dijo Mei sonriendo.

—Gracias.