Capítulo 6 – Crítico

Los ataques de las serpientes de viento disminuyeron lentamente. El caos, la furia y los gritos dieron paso al silencio. Todos miraban en dirección a Rhode, atónitos.

Por un momento, casi todos creyeron que Rhode estaba muerto. Nunca habían imaginado que alguien pudiese escapar del rodeo de las serpientes de viento. Por supuesto, caballeros o mercenarios de nivel alto cubiertos de armadura podrían soportarlo, pero Rhode no parecía un veterano en absoluto. Además de su espada blanca, no tenía protección alguna.

«Lo hizo».

Lize, Carter y el resto de la tripulación no pudieron hacer más que mirar al joven con incredulidad.

«¿Quién es?»

Nadie sabía si había sido por el ataque de Rhode o por otros motivos pero las serpientes de viento que aún intentaban atacar el barco flotante comenzaron a dispersarse y a retroceder. Por un tiempo, toda la cubierta quedó en silencio. Solo podía escucharse el sonido de la brisa. Los mercenarios quedaron impactados por la actuación de Rhode, pero no parecía interesado en lo que pensaran de él. Al contrario, cuando vio esas pilas de cadáveres, en lo profundo de su corazón, se sintió bastante bien.

Las serpientes de viento eran unos de los tantos monstruos de nivel bajo. Su poder individual no era particularmente alto ya que se valían de su gran superioridad numérica para ganar. La clase de Rhode, el Espadachín Espiritual, era una clase orientada al estilo de juego «solo», pero tenía un bajo poder de ataque. La razón por la que todo resultó tan bien fue por la Marca de la Estrella que le dio 3 puntos adicionales a todas sus estadísticas. Así que, cuando blandió su espada, el nivel de peligro del monstruo bajó de rojo a verde. De este modo, eliminar al grupo de serpientes por completo no fue un logro tan grande.

¿Tal vez sus estadísticas de humano no estaban bien calculadas?

Con eso en mente, Rhode abrió su ventana de estado de personaje inconscientemente. No sabía dónde buscar porque su raza aún era desconocida, por lo tanto, sus estadísticas también estaban escondidas. Pero, por fortuna, había ganado 1900 EXP en la batalla.

«¿Puedo ganar EXP? ¡Vaya, es sorprendente!»

Mientras comprobaba sus aumentos, los demás pensaban que estaba viendo la pila de cadáveres.

De pronto, Rhode sintió una extraña presencia. No era una persona, sino algo más peligroso.

«¿Dónde están las serpientes de viento?»

Ese pensamiento cruzó por la mente de Rhode. Pareció pensar en algo y luego volvió su cabeza con rapidez y gritó:

─¡Tengan cuidado!

En ese momento, el barco flotante se sacudió.

La violenta sacudida hizo caer al suelo a muchos. Incluso hubo dos personas que por desgracia no tuvieron tiempo de hacer equilibrio y se cayeron del barco.

Entonces, la cubierta frontal se abrió, seguida de la enorme cabeza de una serpiente de viento que apareció de repente.

─¡Cuidado, es el Señor de las Serpientes de Viento!

En ese instante, finalmente apareció Carter. Gritó y corrió hacia la enorme serpiente. Los otros mercenarios también se pusieron de pie con rapidez. Aunque estaban heridos, apretaron sus dientes y siguieron a su líder para atacar al monstruo.

Sin embargo, los movimientos de Rhode fueron más rápidos…

Bajó su cuerpo, unos avisos del sistema aparecieron de inmediato frente a él.

[EXP 1900/200, ¡Subida de Nivel! 1 Punto de Habilidad Recibidos, Nivel 2]

[EXP 1700/400, ¡Subida de Nivel! 2 Puntos de Habilidad Recibidos, Nivel 3]

[EXP 1300/600, 3 Puntos de Habilidad Recibidos, Nivel 4]

[EXP 700/1000, 4 Puntos de Habilidad Recibidos, Nivel 5]

[1 Punto de Habilidad Usado para aumentar Esgrima Sombra de Luna 1/3, Rango E]

[1 Punto de Habilidad Usado para aumentar Esgrima Sombra de Luna 2/3, Rango E]

[1 Punto de Habilidad Usado para aumentar Esgrima Sombra de Luna 3/3, Rango E]

[1 Punto de Habilidad Usado para aumentar Esgrima Sombra de Luna 1/4, Rango D. Destello de Sombras ha sido desbloqueado]

«Activar»

Rhode saltó hacia el cielo.

Todos pensaron que estaban alucinando. Vieron al joven que antes estaba parado en el suelo convertirse de repente en una sombra negra. Como un cuchillo afilado, se lanzó hacia adelante, e incluso el enorme Señor de las Serpientes no pudo reaccionar.

Rhode levantó su espada y dio una estocada hacia el ojo cobrizo y acampanado de la serpiente.

─¡Hoja Destructora!

Al ver la inminente estocada, la primera reacción de la serpiente fue evadirla, pero luego de haber incrementado el nivel del Esgrima Sombra de Luna al Rango D, el poder de la Hoja Destructora había aumentado a otro nivel. Una miríada de destellos blancos se juntó en la punta de la espada.

«Uno, dos, tres…»

Al principio, las duras escamas del Señor de las Serpientes de Viento pudieron soportar los ataques, pero, incluso con su defensa magistral, cayó cerca del vigésimo corte. Entonces, la espada de Rhode penetró en su cuerpo, desgarrando sus escamas, carne y sangre con facilidad. Aunque el cuerpo de la serpiente era gigantesco, Rhode sabía dónde encontrar su punto débil. Con un exquisito control, su corte no se extendió como antes, sino que se enfocó en su cuello.

El Señor de las Serpientes de Viento dejó escapar un grito agudo y cayó a la cubierta. Pero aun así, no había terminado de atacar. Aunque la parte izquierda de su cuerpo se había convertido en carne y sangre, la serpiente levantó la cabeza y miró a Rhode. Entonces, súbitamente, abrió su boca.

Rhode la esquivó, convirtiéndose en una sombra otra vez y retrocedió. Sin embargo, una vil bala venenosa se disparó hacia él, casi rozándolo. Cuando Rhode la esquivó, el veneno aterrizó en la parte posterior del mástil. En un instante, corroyó a través del grueso mástil y lo derritió en segundos.

Como era de esperarse de un jefe.

Según la experiencia de Rhode en el juego, una serpiente de viento promedio era nivel 3 y el Señor era nivel 10. Viendo al jefe delante de él, juzgó que su nivel no era mayor a 10. Con su nivel actual, y con Carter y los mercenarios llamando un poco su atención, derrotar a ese jefe no sería muy difícil.

Pero a juzgar por el último ataque, había descubierto que no era un monstruo de clase Señor normal, sino un jefe de élite. Si fuese un jefe de clase Señor normal, se suponía que el ataque que le realizó hacía un momento le hubiese cortado las alas. Pero aunque él intentaba con todo lo que tenía, solo podía dejarle cicatrices profundas.

─¡Ataquen sus alas, recuerden apartarse de su boca y atacar por los costados! ─instruyó Rhode a Carter y a los demás mercenarios mientras peleaba con el Señor de las Serpientes de Viento. Aunque él era un Espadachín Espiritual y no el tanque, en vista de su situación actual, parecía que no había nadie más con la experiencia necesaria para enfrentarse a la serpiente.

En el juego, si un grupo moría peleando con las serpientes de viento, era posible intentarlo otra vez. Pero aquí, Rhode no podía correr ese riesgo. La herida que había comenzado a sanar empezó a dolerle otra vez; lo partía en dos. Si moría ahí, ya no sabría si reír o llorar.

Aunque todavía estaba en nivel 5, mientras su oponente no estuviera por encima del nivel 15, Rhode tenía la confianza de que ganaría. Después de todo, en Dragon Soul Continent, había tres clases que subían de nivel principalmente matando monstruos: magos, montaraces, y por último, espadachines espirituales.

Los magos eran conocidos por sus magias impredecibles, los montaraces por su capacidad para ser señuelos y atacar desde distancias ultra largas, y los espadachines espirituales usaban una gran armada para derrotar a sus enemigos. Para estas tres clases, aunque hubiese una diferencia de más de 5 niveles, o incluso si el oponente un jefe de élite con una diferencia de 10 niveles, era un asunto fácil.

Aun así, las tres clases tenían sus defectos. Los magos sin magia eran objetivos fáciles, hasta un grupo de monstruos de nivel bajo podía vencerlos. Los montaraces eran terribles en el combate cuerpo a cuerpo. Los espadachines espirituales tenían patrones de ataque demasiado aleatorios y sus movimientos eran demasiado complejos y difíciles de seguir. Esas eran las razones por las que estas tres clases en realidad no podían andar solos por el mapa como si nada. Esa mecánica del juego fue diseñada para hacer que Dragon Soul Continent fuese más realista. Arriesgarlo todo e ir por un camino inusual, o dar un paso hacia adelante por el camino seguro… Los jugadores eran capaces de decidir su propio destino.

El jefe de élite nivel 10 frente a él, el Señor de las Serpientes de Viento estaba herido por la Marca de la Estrella. La defensa de la serpiente era cercana al nivel 6 o 7, así que Rhode no dudaba en ser más agresivo. Sin embargo, el poder ofensivo de la serpiente…

Un fuerte viento movió el suelo.

Rhode estaba perplejo; rápidamente esquivó hacia atrás, apenas a tiempo. Las alas del Señor de las Serpientes de Viento fallaron en impactar con su objetivo y golpearon la cubierta, creando un gran agujero.

Como cabía esperar del ataque de un jefe de élite nivel 10.

Rhode secó el frío sudor de su frente. Ahora era nivel 5 y no tenía más equipo que su espada. Si ese ataque lo golpeaba, definitivamente no sobreviviría. También estaba preocupado por Carter y los demás.

La buena noticia era que él era quien le había hecho más daño al jefe, así que este se enfocaba mayormente en él. La mala noticia era que al estar en el punto de mira de esta clase de jefe de nivel alto, para una clase como la suya, que no era un tanque, la presión era increíblemente inmensa…

Le quedaba un 30 % de su Poder del Alma. Comenzaba a sentirse un poco débil. Incluso si esperaba que la batalla fuese difícil, el poder la serpiente era demasiado abrumador. Necesitaba que alguien lo ayudara a llamar su atención para que pudiese atacarlo por detrás. Con sus estadísticas actuales, esquivar el ataque del Señor de las Serpientes de Viento era simplemente imposible. Por otro lado, necesitaba usar la habilidad Hoja Destructora para dañarlo y matarlo en el menor tiempo posible.

Pero ahora, parecía que no sería fácil.

El barco flotante aterrizaba lentamente, pero bajo el asedio del Señor de las Serpientes de Viento, se sacudía como si estuviese en una gran tormenta. Dos mercenarios se habían caído del barco y era casi imposible que estuvieran vivos. Carter aún intentaba ahuyentar a la serpiente. Blandía su espada atacándola con flexibilidad desde diferentes ángulos, pero era inútil. Si no fuese por Lize que lanzaba hechizos de curación desde atrás, los mercenarios no hubiesen sido capaces de sobrevivir hasta ese entonces.

«Debo pensar en una solución. De otro modo, antes de aterrizar, ya todos habremos sido asesinados por esta maldita serpiente».

Con eso en mente, Rhode mordió sus labios.

El Señor de las Serpientes de Viento no paraba de atacar; sus alas seguían aleteando en la cubierta. Sus dos garras sujetaban ligeramente el borde del barco. Aunque el ataque de Rhode le había causado un daño considerable, al ser un monstruo clase Señor, era seguro que no sucumbiría por una herida menor como esa. Por el contrario, la astuta serpiente parecía ser consciente de las debilidades de sus oponentes. Sus dos afilados colmillos apretaron fuerte el casco del barco flotante y lo agitaron intensamente.

Aunque el casco del barco flotante era fuerte, debido a la batalla anterior con las serpientes de viento, había sufrido un gran daño. Ahora, sumado a los fuertes vientos alrededor del barco, se había empezado a deformar. Aparecieron muchas grietas en la cubierta, seguidas por el crujido de la madera astillándose.

─¡Oh, Santa Alma, sálvame!

Acurrucado en un rincón de la habitación del capitán, el gordo comerciante miraba al terrible Señor de las Serpientes de Viento afuera. Pero por los nervios y el miedo, su voz se había distorsionado.

─¡Ese maldito Richard! ¡No dejes que te vea o te mataré! ¡Mostrarme esta ruta fue prácticamente homicidio! ─exclamó el gordo comerciante. De repente, sintió escalofríos y miro al capitán a su lado.

─¡Y tú! ¿Por qué no me recordaste una cosa tan terrible?

El capitán no respondió. En ese momento, sujetaba el timón, poniendo su atención al frente. Pero dentro de su corazón, maldecía a ese gordinflón. Antes de despegar, le había recordado claramente que al tomar esta ruta podían provocar a las serpientes de viento, pero el gordinflón lo minimizó como si no fuese nada.

«¡Qué bien! ¡Cuando pasa algo me culpas a mí! ¡Si lo hubiese sabido, no habría tomado este trabajo aunque me mataras!