En la Unidad nro. 7 sobre la Calle Pinster, Leonard, quien había regresado especialmente a su casa para participar de la Asamblea del Tarot, estaba a punto de dirigirse al sótano de la Catedral de San Samuel para leer dossieres como preparación para su jornada nocturna de aplacamiento de almas; cuando su visión tornó borrosa repentinamente, para luego ver a la mensajera con oscuro vestido largo, sosteniendo cuatro cabezas rubias de ojos rojos.
Como Asegurador de Almas, podía ver criaturas similares con Cuerpos Espirituales.
Después de recibir la carta de Klein, Leonard ni siquiera tuvo la oportunidad de decir gracias antes de que Reinette Tinekerr se diera la vuelta y volviera al vacío del que apareció. Ni siquiera se quedó un minuto en el lugar.
—...Viejo, ¿Por qué Klein tiene un mensajero de ese nivel? ¿Es esa una ventaja de ser un Bendito?
Leonard no pudo evitar preguntarle a Pallez Zoroast con voz contenida.
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