Capítulo 3. Nacimiento.

Ji Ning abrió los ojos y vio que estaba siendo retenido por un gigante que llevaba un conjunto de ropa de piel blanca. Ji Ning comprendió instantáneamente que esa persona era un 'gigante' solo porque, en este momento, él era un bebé siendo sostenido por ese hombre.

—Pueden irse ahora —dijo el hombre.

—Sí—respondieron con respeto las tres criadas.

El hombre que sostenía a Ji Ning en sus brazos debía ser su padre. A pesar de que acababa de tener un hijo, todavía parecía un pedazo de hielo glacial, muy difícil de acercársele. Llevaba un conjunto de hermosa ropa de piel, mientras que esas tres criadas también estaban vestidas de piel de animales. Claramente, eran de peor calidad.

La habitación estaba vacía. La pared, el vestidor, los asientos, la cama, todos estaban tallados en mármol. Las tallas eran bastante exquisitas y le daban al lugar una antigua y hermosa nobleza. Encima de la cama, había una enorme piel de una bestia de seis o siete metros de largo que colgaba hacia el suelo. De un vistazo, se podía decir que esta piel era sin duda muy cara. Encima de esa cama, había una joven de cara roja.

«Incluso las sillas y los vestidores están tallados en mármol. La habitación misma debería estar hecha de mármol también. Padre, y esas tres mujeres están vestidas con piel de animal. Parece que este mundo no tiene un alto nivel de civilización», se dijo Ji Ning a sí mismo en secreto.

—Hijo…—A pesar de tener a su hijo pequeño en brazos, ese hombre todavía parecía muy frío, sin una pequeña mueca de sonrisa en su rostro. Solo sus ojos traicionaron su emoción.

De repente, Ji Ning tuvo la sensación de que una misteriosa y fría energía entró en su cuerpo. Era muy acogedora y, de repente, ya no estaba más.

—Yichuan, ¿cómo está mi hijo? —preguntó apresuradamente la mujer en la cama.

—Como se esperaba, la calidad de su cuerpo es ordinaria —dijo Ji Yichuan en voz baja.

La mujer de la cama tenía lágrimas en los ojos.

—Déjame sostenerlo. —El hombre llevó al niño en sus brazos.

—Sé bueno. —La joven miró al niño, con los ojos llenos de amor.— Yichuan, nuestro hijo fue herido en el vientre. A pesar de haber comido esos tesoros naturales, solo reparó parte del daño. No hemos hecho lo correcto por nuestro hijo.

¿Había sido herido en el vientre? ¿Tesoros naturales?

Parecía como si sus padres en este mundo no fueran gente común.

...

A pesar de haber dado a luz a un niño, su madre había sido capaz de levantarse fácilmente de la cama. Ella también estaba vestida con pieles blancas, y estaba en los brazos de su marido cuando salieron de la habitación.

—Pueden limpiar aquí—les dijo el padre, Ji Yichuan, a esas tres criadas.

—Sí—respondieron con respeto las tres criadas.

Fuera de la puerta, en el pasillo, había un gran perro tan blanco como la nieve. Su pelaje era largo y suave como algodón y él parecía muy dócil. Cuando su mirada se posó en Ji Ning, se llenó de emoción y cariño.

En el amplio patio fuera de la habitación, había una pitón gigante enroscada de tono negro que combinaba con el exterior del patio. Había dado vueltas alrededor en varios lazos y su cabeza se levantó a una altura de metros y metros. Su cuerpo estaba cubierto con escamas oscuras que detenían el corazón. La pitón gigante bajó lentamente su cabeza y se acercó.

—¡Dios mío! —Ji Ning estaba aterrado. Ese perro blanco como la nieve estaba bien. Había visto muchos perros en el pasado. Ese animal tan blanco como la nieve solo era un poco más grande.

¿Pero esa enorme monstruosidad enroscada? ¿Era siquiera una serpiente?

Enrollada en círculos interminables y con su sola cabeza sobresaliendo, ya tenía metros y metros de altura. La cosa entera tenía que ser de doscientos o trescientos metros de largo. ¿Una bestia tan imponente estaba en realidad frente a la casa de su propia familia? Esto... esto simplemente era…

—Hijo…—Ji Yichuan no prestó atención a los sentimientos de su hijo o tal vez en este mundo, la gente ya estaba acostumbrada a estas cosas y no sentía que fueran extrañas. Ji Yichuan señaló al gran perro tan blanco como la nieve en frente de ellos.— Este es tu Tío Blanco. Es amigo de toda la vida de tu padre y te ha salvado la vida. Debes tratarlo como me tratarías a mí.

El sabueso tan blanco como la nieve miró con cariño a Ji Ning. Ji Ning podía sentir casi físicamente el profundo amor que el perro blanco como la nieve le transmitía.

Sin embargo…¿Tenía que llamar a un perro "Tío Blanco"?

—Yichuan, el niño acaba de nacer y todavía no entiende nada. ¿Hay algún motivo para decirle estas cosas? —dijo la joven mientras sostenía al niño.

—Incluso si él no entiende, esta es su primera reunión con el Pequeño Blanco. —Ji Yichuan levantó la cabeza para mirar a la inmensa pitón.—¡Hermano Negro!

La serpiente siseó.

Esta enorme pitón negra, que definitivamente habría hecho que un sinnúmero de naciones se volvieran locas, de repente se transformó en una niebla negra, y luego tomó la forma de un hombre de mediana edad de pelo negro. El hombre de pelo negro sonrió al niño.

—Yichuan, todavía recuerdo cómo, cuando la primera vez que mostraste tus talentos, aún estaban en desarrollo, entonces accedí a seguirte. No esperaba que en un abrir y cerrar de ojos, tuvieras un hijo. Niño, no tengas miedo. Soy tu Tío Negro.

—Vamos afuera —dijo Ji Yichuan—. El abuelo y los otros también están afuera esperando. Hermano Negro, es mejor que vuelvas a tu forma habitual. Sé que es muy incómodo para ti estar en forma humana.

La serpiente siseó.

El hombre de cabello negro asintió con la cabeza y, luego, una vez más, se transformó en una niebla negra y rápidamente regresó a la forma de esa enorme y enroscada pitón negra. La enorme pitón negra se deslizó de inmediato hacia el exterior. Su enorme cuerpo se movía a gran velocidad. Deslizándose, deslizándose, deslizándose. Pasó fácilmente por las paredes y desapareció.

Ji Ning sintió que aún estaba en estado de shock.

Aunque esto podría ser normal para la gente de este mundo, para Ji Ning, un hombre de la Tierra, esto era simplemente demasiado impresionante ¿Una pitón negra de 200 o 300 metros de largo se había transformado de repente en un hombre de pelo negro y había dicho que era su "Tío Negro"?

¡Monstruo!

«¿Puede ser que el sabueso blanco como la nieve también sea un monstruo?» Ji Ning tenía la sensación de que este mundo era más sorprendente de lo que podía imaginar.

El esposo y la esposa sostuvieron al niño mientras caminaban hacia el pasillo, mientras que a su lado estaba el perro blanco como la nieve. Una vez que llegaron al final del pasillo, caminaron sobre un sendero pavimentado con piedra que conducía a un jardín. El jardín estaba cubierto por una gruesa capa de nieve. Muchos guardias con armaduras negras permanecían allí sin moverse, mientras que, en el centro, había varias docenas de personas de pie. Estas varias docenas de personas poseían toda clase de milagrosas y extrañas bestias venenosas y bestias voladoras.

Ji Ning entendió de inmediato. No era que su padre fuera especial. Era que todas las personas de este mundo criaban bestias extrañas. Domesticarlos era un hábito común.

«Parece que, en el futuro, tendré que acostumbrarme a hacerme amigo de los monstruos». Ji Ning se adaptó rápidamente a esta nueva realidad y comenzó a observar a esas varias docenas de personas. Estas varias docenas de personas lucían feroces como tigres o panteras. Prácticamente todos ellos estaban vestidos con hermosos cortes de pieles de animales. Sólo las tres mujeres estaban vestidas con prendas de seda o tela.

Esto sorprendió a Ji Ning en secreto.

Parecía que no todos en este mundo llevaban pieles de animales. La seda y la tela ya existían aquí. Juzgando por el lugar donde las tres mujeres estaban paradas, eran de rango bastante común dentro de esas docenas de personas. Claramente, la calidad de esas ropas de seda o tela no eran más altas que los lujosos y exquisitos cortes de pieles de animales.

El viejo de pelo plateado que estaba de pie justo delante, se acercó.

—Ven, Yichuan. Déjame sostener al niño.

—Abuelo. —Ji Yichuan asintió, luego tomó al niño de los brazos de su esposa y lo entregó al anciano.

—Este niño es verdaderamente hermoso. —La cara del anciano de cabello plateado estaba llena de alegría. Dijo en alabanza—: Yichuan, ahora que tienes un hijo, ya no me preocuparé tanto. He sido el Señor de nuestra prefectura[i] por más de ochenta años. Según las reglas de nuestro clan, una persona solo puede ser un Señor de la Prefectura durante no más de un siglo. Solo me quedan veinte años como Señor de la Prefectura. Anteriormente, quería que tú me relevaras en la posición de Señor de la Prefectura del Oeste, de nuestro clan Ji. Pero, en vez de eso, insististe en seguir el camino de los Inmortales. Ahora que tienes un hijo, tal y como lo veo, en el futuro, él puede ser el próximo Señor de la Prefectura.

«¿El próximo Señor de la Prefectura?»

Ji Ning se sorprendió. Parecía que su estatus era bastante alto y este clan debía ser uno especial también. Esas sirvientas extremadamente obedientes y esos guardias inmóviles de armaduras negras, eran toda una muestra del poder de su clan.

—¡Gran hermano! —Se escuchó un grito de enfado repentino.

¿Quién se atrevería a ser tan irrespetuoso con el Señor de la Prefectura?

Ji Ning miró en la dirección del ruido. Vio a un anciano pelirrojo que emanaba calor mientras caminaba. El hombre tenía un llamativo aro rojo en su oreja derecha. No, no era un pendiente rojo. Era una pequeña serpiente roja del tamaño de un dedo. ¿De verdad llevaba una serpiente en la oreja?

El anciano con la serpiente en la oreja caminó hacia adelante, gruñendo.

—El asunto de la sucesión a la posición de Señor de la Prefectura no puede ser tan casual como esto. Además, ¿quién sabe qué clase de habilidad tendrá este pequeño?

—La habilidad del hijo de Yichuan sería naturalmente... —El anciano de cabello plateado estaba extremadamente confiado. Al mismo tiempo, una súbita oleada de calor entró en el cuerpo de Ji Ning, luego, rápidamente se disipó.

—¡Yichuan! —El anciano de cabello plateado miraba asombrado al nieto del que estaba tan orgulloso.

¿Cómo podría no estar conmocionado?

Este era el hijo de Ji Yichuan, la renombrada "Espada de las Gotas de Lluvia". La majestuosa Espada de las Gotas de Lluvia, completamente por su cuenta, había exterminado innumerables monstruos escondidos en lagos profundos y altas montañas. Las innumerables tribus bajo el control de la Prefectura del Oeste del clan Ji conocían la Espada de las Gotas de Lluvia. De hecho, eran más las personas que sabían quién era él, que los que sabían quién era el Señor de la Prefectura.

Mientras que su hijo comiera algunos tesoros preciosos mientras estuviese en el vientre, el infante tendría, naturalmente, las mejores condiciones de crecimiento posibles.

—Hermano mayor —La serpiente se rio—, parece que el hijo de Yichuan es bastante común. ¿Cómo puede la Prefectura del Oeste de nuestro clan Ji, que comanda a tantas tribus, dejar que un débil compañero asuma la importante posición de Señor de la Prefectura? ¿Cómo es posible que la gente del clan Ji se someta a él? ¿Cómo pueden las innumerables tribus estar dispuestas a someterse a él?

—Señor de la Prefectura, parece que este pequeño no está a la altura de ser el próximo Señor de la Prefectura.

—La importante posición del Señor de la Prefectura no puede asignarse de manera tan casual.

Esas pocas docenas de personas presentes eran todos miembros de alto nivel de la Prefectura del Oeste del clan Ji. Muchos comenzaron a hablar.

—Cierren la boca. —Ji Yichuan frunció el ceño. Mientras recorría la zona con su mirada helada, al instante, muchos de los miembros del clan callaron.

Pero el anciano serpiente dijo enojado: —Qué gran carácter. ¡Esta es la Prefectura Oeste del clan Ji! ¿Que ni siquiera podemos hablar aquí? Su hijo como el Señor de la Prefectura... ¡Si su hijo estuviera calificado, entonces dados los grandes méritos que tú mismo has rendido a la Prefectura del Oeste del clan Ji, definitivamente no diríamos nada! Pero tu hijo es muy común. ¿Aún deseas que sea el Señor de la Prefectura? Todas las tribus bajo la bandera de la Prefectura del Oeste del clan Ji deben luchar juntos en batallas territoriales y también deben luchar contra los Monstruos Malignos en las profundas montañas y lagos. ¿Cómo puede un débil Señor de la Prefectura hacer que los miembros del clan se sometan voluntariamente? ¿Cómo puede hacer que esas tribus se sometan? Si la Prefectura del Oeste no impone respeto, entonces ¿Cómo vamos a luchar por el poder contra las organizaciones de los alrededores? ¿Y cómo vamos a ir a las montañas y lagos para matar a los Monstruos Malignos?

—¡Naturalmente, seré yo quien mate a los Monstruos Malignos de los lagos y las montañas! —La voz de Ji Yichuan era fría como el hielo.

—Sin duda eres rudo. Estás a la altura de tu reputación, Ji Yichuan. ¿Así que vas a matar a todos los Monstruos Malignos escondidos en todas las montañas y todos los lagos tú solo? Entonces yo, Ji Lee, te diré esto. Si puedes matar a cientos de Monstruos Malignos, entonces no voy a discutir más contigo sobre quién se convertirá en el próximo Señor de la Prefectura del clan Ji de la Prefectura Oeste. Dejaré que tu hijo se haga cargo —se burló el anciano de la serpiente.

Ji Yichuan le miró fijamente.

Cada Monstruo Maligno era extremadamente astuto y poderoso. ¿Cómo podrían ser tan fácilmente asesinados? Incluso matar a diez de ellos sería un milagro, sin mencionar un centenar.

—Suficiente. El niño acaba de nacer y no puede soportar todo este estrés —El anciano de cabello plateado les miró fijamente, y luego les ordenó—: Esta noche, vamos a tener un banquete de celebración en el Salón de las Nevadas. Por ahora, todos pueden irse.

—Entendido.

[i] N.T – Prefectura: Órgano de gobierno de un área territorial.