Sé Que Aún Está Vivo (5)

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—Abuelo, estoy algo hambriento...

—Quédate con hambre.

—Abuelo, tengo sed...

—Quédate sediento.

—Abuelo, ¿por qué eres tan desalmado? ¿No soy tu nieto? —Su Yu miró a su abuelo con una mirada triste.

—Si no fueras mi nieto, te habría arrojado al océano y habría alimentado a los tiburones contigo. Deberías estar feliz de ser mi único nieto. De otra forma, ¿crees que te perdonaría? —el anciano claramente seguía furioso.

—Abuelo... —Su Yu activó el modo cachorrito tierno. Sabía que su abuelo lo quería más que a nada en el mundo. Siempre y cuando mantuviera la piel gruesa y las palabras dulces con su mirada de cachorrito, su abuelo seguramente cedería.

De repente, antes de que Su Yu pudiera decir algo más, el abuelo Su dijo: —la chica que me pediste que rescatara... está embarazada.

—¿Qué? —Su Yu estaba demasiado confundido.