Entrando en la Tumba

Había cuatro puertas en la Cripta de Bronce y tres de ellas tenían tenues impresiones de palmas.

La cuestión era que estas tres impresiones de palmas eran las mismas que las de Bobby, Amelia y el Profesor KO.

Al entrar, sólo estos tres habían tocado el letrero de piedra.

—La disposición de la Gran Cueva Secreta de la Luna es realmente ingeniosa —dijo Bobby.

—Él fue el primero en darse cuenta del secreto y el primero en reaccionar.

—¡Shua!

Bobby se convirtió en una figura borrosa mientras se lanzaba hacia la puerta que tenía su impresión de palma.

Sus acciones claramente atrajeron la atención de ambos bandos.

—¡Deténganlo!

—¡Córtale la palma!

Los ojos de los Piratas del Agua Carmesí y el viejo Miller brillaron mientras se lanzaban hacia Bobby.

La puerta hacia la que se dirigía Bobby estaba en el centro de ambos grupos.

—No podemos dejar que esta llave caiga en manos de los piratas —pensó el viejo Miller.