Capítulo 15: Revelaciones y Conspiraciones
Tras el enfrentamiento con Seraph, el grupo se recuperaba, asimilando las recientes revelaciones sobre el verdadero propósito de la secta. Los documentos antiguos hallados en la base del enemigo habían arrojado luz sobre un secreto que cambiaba toda su perspectiva sobre los Jokai y los portadores.
El misterio del "Eterno"
Kael reunió al grupo en un lugar seguro para analizar los documentos en profundidad. Aqua, leyendo en voz alta, explicó: —Parece que los Jokai son fragmentos de un poder mucho más antiguo y poderoso, al que llaman "Eterno." La secta está obsesionada con reunir todos estos fragmentos.
Ren frunció el ceño. —¿Qué clase de poder es este "Eterno"? ¿Y por qué la secta está tan desesperada por obtenerlo?
Alaric, que hasta ese momento había guardado silencio, respondió: —El Eterno es una entidad antigua, una fuerza que, según las leyendas, otorga al portador control absoluto sobre la oscuridad y la luz. La secta planea despertar este poder para controlar el destino de todos.
El temor de Last
Last miraba los documentos con el ceño fruncido, sintiendo una creciente incomodidad. La conexión entre los Jokai y el Eterno hacía eco en su interior, como si Destro intentara advertirle de algo importante.
—¿Esto significa que cada uno de nosotros porta un fragmento de esa entidad? —preguntó en voz baja.
Aqua asintió, su mirada seria. —Eso parece. Pero al unir estos fragmentos, alguien podría desatar un poder inimaginable… o ser consumido por él.
Un pasado compartido
Kira, intrigada, comenzó a revisar más documentos, buscando pistas sobre cómo detener el ritual de la secta. Encontró algo que la dejó sin aliento: el nombre de Alaric aparecía entre los registros antiguos, como un defensor que alguna vez protegió los secretos de los Jokai.
—¿Alaric? ¿Estuviste relacionado con los Jokai en el pasado? —preguntó Kira, sorprendida.
Alaric asintió, y con una mirada llena de nostalgia, explicó: —Antes de que todo esto comenzara, yo era guardián de uno de los templos donde se custodiaban los secretos del Eterno. Cuando la secta descubrió la existencia de los Jokai, fui traicionado y tuve que huir. Ahora entiendo que el destino me ha llevado a ustedes.
Una decisión crítica
Kael se puso de pie, decidido. —Si realmente somos piezas de este rompecabezas, no podemos dejar que la secta complete su ritual. Debemos adelantarnos y encontrar a los otros portadores antes de que ellos lo hagan.
Ren asintió con entusiasmo. —Podríamos formar una resistencia, reunir a otros portadores que quieran luchar. ¡Juntos podríamos ser imparables!
El inicio de una nueva misión
Aqua sugirió que el grupo se dirigiera a otra ciudad donde, según rumores, aún quedaban portadores escondidos, reacios a unirse a cualquier causa. Alaric también mencionó que había escuchado sobre un santuario oculto donde se protegía un antiguo Jokai de gran poder.
—Ese santuario es nuestra próxima parada. Si los rumores son ciertos, puede que encontremos un aliado… o un enemigo —dijo Alaric con voz firme.
Últimos preparativos
Antes de partir, el grupo decidió fortalecer sus habilidades y aprender a sincronizarse mejor con sus Jokai. Last, sintiendo el poder oscuro de Destro crecer dentro de él, buscó consejo en Alaric, quien le advirtió sobre los riesgos de usar el poder sin control.
—La oscuridad es poderosa, Last, pero solo debe usarse cuando es realmente necesario. Si dejas que te consuma, te volverás igual que la secta —le advirtió Alaric.
Last asintió, aceptando el desafío de equilibrar la luz y la oscuridad en su interior.
Cierre del capítulo
Con renovado propósito, el grupo se dispuso a partir hacia el próximo destino, conscientes de los peligros que les aguardaban. Sabían que su misión no solo era detener a la secta, sino también descubrir sus propias fortalezas y aprender a controlar los Jokai sin perderse en ellos. La batalla no era solo contra la secta, sino también contra los demonios internos que cada uno de ellos albergaba.