-¿no es algo desmedido tu suspensión?- pregunto Kenji a Tadeo.
-que se yo, pero ya no importa ya, me chupa un huevo sobre eso y el otro maricon.- dijo Tadeo tomando mate.
-¿entonces que vas a hacer ahora?- pregunto de nuevo el japonés.
-bueno, vine acá a romper los huevos, cuando vuelva a casa voy a caminar por la cuadra para ver qué puedo hacer.- respondió Tadeo.
Al escuchar esto, Kenji lo miró de arriba abajo.
-¿Por qué no pruebas jugar hándbol? debido a tu constitución será fácil mover los cuerpos de los demás.- dijo Kenji mientras tomaba café amargo.
-puede ser, pero prefiero vóley o fútbol la verdad.- dijo Tadeo mientas comía un librito recién horneado.
-también puede ser, aunque no te veo haciendo básquet porque creo que no te da la altura suficiente.- dijo Kenji sonriendo.
-si si lo que vos digas.- dijo Tadeo haciendo una mueca de sarcasmo.
-una duda ¿Por qué te vistes así, como formal?- pregunto Kenji mientras veía a los clientes entrar e irse.
-no se, me gusta, así que lo voy a usar hasta que se desgaste, y cuando lo haga me compro el mismo conjunto.- dijo Tadeo palmeando la camisa naranja.
-no es que me disguste sino que te queda muy bien, si te pones ese cuello negro y unas gafas de sol, serás más llamativo.
Y por cierto, nunca te hagas restas te quedarán horrible y te arruinará el pelo.- dijo Kenji aconsejando sobre como vestirse.
-y hasta que no otra ropa no me llame la atención, este será mi conjunto predeterminado para todos los lados.- dijo Tadeo encogiéndose los hombros.
-o puedes hablar con una persona para que haga tu ropa a medida y diseño, con lo que vi en tu cuaderno de bocetos.
Podías fácilmente ser diseñador, dibujas muy bien las proporciones y movimientos en un dibujo.- dijo Kenji.
-también puede ser, pero me da alta pereza hacerlo, verlo equivocarse, hacer preguntas boludas, consultas, tarifas, tipos de tela.- dijo Tadeo y con solo pensarlo lo hizo suspirar de cansancio.
-en realidad estas desperdiciando una oportunidad de oro Tadeo, podrías hacer dinero con solo dibujar y hacer que personas las hagas.
Ya tienes un nombre como cantante y eso es promoción suficiente.- dijo Kenji aconsejando.
-puede ser ¿como debería empezar?- preguntó ahora curioso el niño.
-hazlo como el capitalismo de siempre pero también teniendo en cuanta la cultura del lugar.
Por ejemplo los pantalones de las mujeres tienen bolsillos chicos y por eso se compran bolsos, esto fue hecho a propósito.- dijo
Kenji y Tadeo solo levanto las cejas al escuchar esto.
-oh… entiendo, también podría hacer otras cosas como mochilas, cartucheras, remeras, pantalones y demás.- dijo Tadeo poniendo su mano en la boca y pensando.
Saco de su mochila su cuaderno, paso docenas y docenas de páginas y comenzó a dibujar.
En poco tiempo creo un boceto de una mochila negra como la que tenia en su vida anterior.
Tadeo le mostró a Kenji y él crítico.
-mmm… es simple, hace su función, tiene muchos bolsillos e incluso en la zona de la espalda tiene otro bolsillo.
Lo suficientemente alto como para guardar documentos. Esto le servirá a muchos universitarios o incluso para más jóvenes.- dijo Kenji aprobando el diseño.
Mientras Tadeo escuchaba esto, en su cabeza apareció un flashback de una campera que usaba el de chico.
Tadeo le arrebato el cuaderno y comenzó a dibujar, dibujo la forma de un hombre y arriba de esta comenzó a dibujar una especie de campera.
Después de agregar detalles y sombras y demás le mostró a Kenji.
-¿Qué se supone que es?- preguntó Kenji confundido por la vestimenta.
-lo llamo rompevientos, útil para en el sur de argentina, no sentirás el viento helado porque está hecha densamente y tampoco la lluvia te molestara, es como un impermeable.
Además de que tendrá una "remera" térmica dentro calentándote en poco tiempo.- dijo Tadeo resumiendo.
-eso si que es una buena idea, tengo amigos que trabajan con textiles por si quieres ayuda, y conmigo como mediador tal vez te cobren barato.- dijo el japonés.
Tadeo sonrió a esto y solo asintió.
Esta idea también se la dirá a sus
representantes u Nikolai para formalizar la idea.
Y como nunca le gusto la moda de ahora ya que no estaba acostumbrado a estos tiempos, siempre dibujó ropa moderna.
Kenji solo sonrió y fue a trabajar, Tadeo sigue dibujando ropa, desde remeras manga corta y larga, musculosa.
Pantalones de jogging, corto y largos, jean, de vestir, zapatillas y zapatos.
Ropa de mujer como faldas, vestidos, camisas floreadas, bolsos, tacones.
Incluso diseño gorras, gorros, cuellos, guantes, gafas de sol y demás.
Sin embargo solo después de cuatro horas se aburrió, y comenzó a bocetar a las personas del café.
Hombres trajeado con portafolios, mujeres vestidas para llamar la atención a los hombres.
Jóvenes vestidos con jeans y camisas de diferentes colores, mujeres con tops hechas a mano de remeras viejas.
Grandes aros en sus orejas, policías que pasaban a tomar un café para llevar.
También gente de diferentes países y razas, como chinos, indios, mexicanos e incluso vio a personas africanas.
El niño sentado en un sillón y cómodo dibuja todo lo que miraba, diferente expresiones, diferentes rasgos, diferentes ángulos.
Pero su mano se detuvo ya que su padre lo fue a buscar y tuvo que dejarlo en casa.
Al llegar le dijo a su padre que iba pasear por el barrio para ver si había algo interesante.
Marcelo solo dijo que tuviera cuidado y que se portara bien.
El niño salió de la casa y camino por la cuadra mirando a todos los lados, y como estaba cambiando saludo cok respeto a las personas en el camino.
Notó varios quioscos, dos almacenes, una ferretería, una gomería, y demás.
Pero incluso a lo lejos notó un gran edificio, de al menos dos pisos pero de era hace mucho tiempo debido a la arquitectura.
-predio ferial huergo…- dijo Tadeo en voz alta al ver nombre del edificio.
Subió las escaleras y paso por las puertas de vidrio gigantes, al entrar notó que el piso era de porcelanato de color gris oscuro como si fuera de grava.
Las ventanas eras enormes sean altas o anchas, incluso había una cantina con diversos productos.
E incluso funcionaba como cafetería y un mini negocio de vendedor de comidas caseras.
Vio muchos adultos en buen estado físico, sean las mujeres con sus bien entrenadas piernas o los musculosos brazos de los hombres.
Y Tadeo sin miedo preguntó que trataba el lugar a un hombre que vestía de gimnasia y un silbato de collar.
El hombre le dijo que este edificio es una institución de deportes varios, sea natación, básquet, hándbol, fútbol, vóleibol y demás.
Tadeo quedo sorprendido y le pregunto a donde podía anotarse y el hombre le indico el camino ya que tenía que trabajar.
Tadeo calculo las indicaciones y el lugar real, al quedar enfrente de una puerta de madera y un gran ventanal borroso.
Toco la puerta y poco después una mujer entre gigante y gorda pero que tenia estado físico, le pregunto que necesitaba.
Preguntó si podía anotarse a algún club ya que se aburría en casa, ella dijo que podía y le pregunto que quería hacer.
Tadeo le dijo sobre vóley y fútbol, ella le entrego los papeles para que lo llenen sus padres y después se lo entregará ella.
El niño se fue del edificio gigante y camino hasta su casa.
Tadeo vio a su papá sentado en el sillón y le entrego las hojas de cada club, el los leyó y vio que tenia que ir a las apuradas si quería llegar.
El niño le dijo que no había problema, Marcelo lleno los documentos, el niño después fue a entregarlo corriendo.
Y en menos de cinco minutos llego y se lo entrego a la señora gigante.
Reviso cuidadosamente las dos hojas, poco después le dijo que debería venir el lunes para saber si entro o no.
El niño asintió y se fue a casa.
Al llegar a casa e irse a su habitación a tocar un poco el piano, su padre le toco la puerta para avisarle que se iba.