—Aún mirando la pintura, el Viejo Maestro Cheng solo dijo —Ah.
—Cheng Juan se acercó, observó la pintura y dijo débilmente —Es auténtica. Papá, rápida ponla en tu biblioteca privada—. Él alzó calmadamente su mano y miró la hora en su reloj —Tenemos prisa y vamos a regresar primero.
—El Viejo Maestro Cheng parecía estar en un trance y simplemente asintió.
—Cheng Juan le echó un vistazo antes de llevarse a Qin Ran.
—Cheng Mu también saludó cortésmente al Viejo Maestro Cheng y a Cheng Wenru, pero ambos lo ignoraron.
—Cheng Juan y los demás se fueron.
—En unos dos minutos, el Viejo Maestro Cheng fue el primero en reaccionar.
—Miró dubitativamente a Cheng Wenru —Tu hermano dijo que es auténtica, pero recuerdo... ¿no se registró en la subasta y se incluyó como una pintura en el museo histórico del Continente M?.
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