Cocos

** Harper **

Los cuatro se dirigieron hacia el pueblo del Luau. La caminata era tan hermosa como todo lo demás alrededor del resort, llevándolos a través del jardín exuberante a lo largo de corredores y senderos empedrados bordeados con árboles de hibisco y plumeria, cuyas ramas estaban cargadas de flores. Después de agacharse bajo palmeras desenfrenadas y hojas que se mecían en la brisa del mar, emergieron frente a un gran arco que servía como la entrada a los terrenos del festival, adornado con antorchas que esperaban ser encendidas por la hoguera.

Un plano de asientos estaba colocado en la entrada. Resultó que Wallace tenía razón —las mesas estaban mezcladas de hecho, e irónicamente, cuando Harper encontró su asiento, se vio rodeada completamente de nombres desconocidos... excepto el de Wallace, que estaba asignado directamente a su izquierda.

Ella logró una sonrisa que para nada era incómoda, mirando con anhelo en la dirección donde Lindsey y Naomi se habían ido.