Hora de reemplazar a la compañera de Nieve

—Siento que estoy soñando —Curtis abrazó a Bai Qingqing y apoyó su frente contra la de ella, mirándola profundamente a los ojos.

Al verlo tan de cerca, Bai Qingqing no pudo evitar parpadear. Con el rostro sonrojado, sus labios se separaron, pero no salieron palabras. Sin embargo, había mucho pasando por su corazón y mente en este momento.

—Bai Qingqing suspiró con emoción. ¡Los machos aquí son tan fáciles de convencer! Ya estaban oficialmente casados y habían sido mucho más íntimos que esto. Sin embargo, ella solo tomó la iniciativa una vez, y el macho se emocionó tanto. Además, estamos hablando del iceberg Curtis aquí. Si fuera Parker, ¿no volaría a la luna o algo así?

Cuando vio que la respiración de Bai Qingqing se había estabilizado, Curtis levantó su mandíbula y la besó nuevamente en esos labios suyos que se habían hinchado ligeramente de ser besados.