No puede acobardarse

Al final, Mo Ruyue fue escoltada fuera del palacio por la niñera de la Concubina Imperial Li. Esta escena sorprendió a todos en el palacio.

Sin embargo, durante estos siete días, la gente en el palacio había escuchado mucho sobre Mo Ruyue. No solo era esta persona hábil en medicina, sino que también era consentida por el Emperador y la Concubina Imperial.

En el camino hacia la salida del palacio, las damas de palacio y eunucos que conocían a Mo Ruyue la saludaron al verla.

La niñera quería enviar a Mo Ruyue fuera de la puerta del palacio, pero Mo Ruyue le dijo que se apresurara a volver y cuidara de la Concubina Imperial.

La pequeña dama de palacio la sacó del palacio.

Mo Ruyue vio una figura familiar en cuanto llegó a la puerta del palacio.

Gu Ying había estado esperando en la puerta del palacio desde la mañana, temiendo que si Mo Ruyue no salía hoy, habría más cambios.