¿Quieres entrar en el Elíseo?

—¿El Dios de los Juegos? —Lux miró al chico flotante frente a él confundido—. ¿Quién es Macuilxochitl? ¿Estás seguro de que no visitaste a la persona equivocada? ¿Quizás buscas a mi Abuela?

Eriol suspiró al ver a Lux, que no tenía ningún recuerdo del Dios de los Jugadores, del Dominio Celestial.

—Parece que el daño a tu alma es bastante grave —dijo Eriol—. No te reencarnaste adecuadamente. Por eso tu cuerpo actual y tu alma no están sincronizados y te sigues desmayando. No son compatibles.

Lux frunció el ceño al escuchar las palabras de Eriol.

—¿Eh? ¿De qué estás hablando? ¿Estás seguro de que no te estás dirigiendo a la persona equivocada?

—¿Te suena el nombre Lucien?

—¿Lucien? ¿Quién es ese? Mi nombre es Lux.

Eriol sonrió amargamente cuando se dio cuenta de que Lux no tenía recuerdo alguno de su vida anterior. Era como una pizarra que se había limpiado.

«Parece que tengo que empezar desde el principio», pensó Eriol. Luego miró al chico pelirrojo frente a él con el que su mejor amigo había decidido tomar un riesgo.

—Neh~ Lux. ¿Quieres entrar en el Elíseo? —preguntó Eriol.

—... Sí quiero —respondió Lux—. Pero no tengo las calificaciones para sobrevivir en ese mundo.

Eriol asintió.

—Es cierto. El tú actual simplemente moriría una muerte miserable y patética si entraras en el Elíseo ahora. Sin embargo, ¿y si te dijera que puedo ayudarte a cumplir con los requisitos para pisar ese mundo del que siempre has soñado?

Lux entrecerró los ojos mientras concentraba su atención en Eriol, quien lo miraba con una expresión triste.

—¿Qué tengo que hacer a cambio? —preguntó Lux.

Él sabía que no hay almuerzo gratis en el mundo. A pesar de que no sentía ningún tipo de malicia proviniendo de Eriol, aún era alguien a quien Lux había conocido por primera vez. No podía confiar en un extraño tan fácilmente, ¿verdad?

—Lo que quiero que hagas es luchar —respondió Eriol—. Luchar hasta el amargo final. Independientemente de si te conviertes en un Héroe o un Señor Demonio, lo único que pido es que hagas todo lo que esté en tu poder para vivir. ¿Puedes prometerme eso?

—¿Eso es todo?

—Sí.

—¿No me vas a pedir que te dé mi alma cuando muera?

Fue en ese momento cuando apareció una sonrisa en la cara de Eriol.

—Bueno, si quieres darme tu alma también puedo aceptar eso —dijo Eriol en tono de broma—. ¿Quieres?

—De ninguna manera —Lux sacudió la cabeza firmemente—. He escuchado que aquellos que vendieron sus almas al diablo tuvieron finales prematuros. No quiero sufrir el mismo destino.

Eriol sonrió de medio lado mientras movía su mano.

De repente, Lux se encontró de pie sobre un mar azul claro que reflejaba el cielo azul de arriba.

Antes de que Lux pudiera hacer algo, escuchó la voz de Eriol detrás de él.

—Este es un dominio especial que he creado —dijo Eriol—. Aquí, nadie podrá escuchar nuestra conversación. No tenemos que preocuparnos por los dioses entrometidos que tienen demasiado tiempo libre. Estoy seguro de que tienes muchas preguntas, pero lamentablemente no puedo responderlas todas. Mi tiempo en este mundo es limitado, así que por ahora por favor escucha mi explicación. ¿De acuerdo?

Lux asintió con la cabeza. No estaba seguro de dónde estaba, pero tenía la sensación de que si no obedecía las palabras de Eriol, estaría atrapado en este lugar extraño durante mucho tiempo.

—Primero, déjame ayudarte a recuperar tu memoria —dijo Eriol mientras presionaba su mano sobre la cabeza de Lux.

Unos segundos más tarde, los gritos de dolor de Lux se expandieron a lo largo del hermoso mundo azul que Eriol había creado.

Eriol no parpadeó mientras continuaba vertiendo su divinidad a través de su mano para reparar los recuerdos que Lux había olvidado.

Varios minutos más tarde el chico pelirrojo jadeaba sobre el mar azul, mirando su propio reflejo.

—¿Recuerdas ahora? —preguntó Eriol mientras se agachaba junto a Lux.

—Recuerdo —respondió Lux mientras buscaba aire—. El Proyecto de la Puerta del Cielo… Max y Himea.

Eriol asintió. —Debido a la falla del cañón, tu alma sufrió daños irreparables. ¿Recuerdas algo después de que te dispararon del cañón?

—No.

—Ya veo...

Eriol se tocó la barbilla mientras reflexionaba sobre su siguiente movimiento. Después de que Lux recuperó la compostura, el Dios de los Juegos lo miró con una expresión seria.

—Bueno, antes de nada, déjame decirte cómo naciste en este mundo —dijo Eriol—. Después de que tu alma sobrevivió a su largo viaje, no tenía la capacidad de renacer de la manera natural. Por eso la divinidad que te dio Max decidió buscar el mejor sustituto siguiente para cumplir con las configuraciones de tu personaje.

—Dado que un renacimiento normal era imposible, tu alma se fusionó con el cuerpo de un recién nacido… quiero decir, un bebé medio elfo recién muerto. Ese es el actual recipiente que estás poseyendo ahora mismo.

Eriol palmeó el hombro de Lux, haciendo que el chico pelirrojo lo mirara con incredulidad al dios de los juegos.

—Ya sé, es difícil de creer, pero es la verdad y nada más que la verdad —afirmó Eriol—. Esta también es la razón por la que a veces te sientes desconectado de tu cuerpo. Cada vez que ejerces tu voluntad, tu cuerpo te rechaza.

—La razón de esto es porque tu cuerpo y alma no están sincronizados correctamente. No te preocupes. Yo solucionaré ese problema. Aquí mismo, ahora mismo.

Eriol tocó con el dedo la frente de Lux y el cuerpo del chico se tensó. Fue en ese momento cuando una serie de palabras apareció en su cabeza, sorprendiendo a Lux.

—Iniciando sincronización de cuerpo y alma

—Tasa de incompatibilidad es del 78%

—Buscando solución…

—¡Solución encontrada!

—Buscando fisionomía corporal compatible…

—¡Fisionomía corporal compatible encontrada!

—Legado del Conquistador Inmortal

—Sincronizando con fisionomía corporal especial

—Tasa de sincronización: 1%

—Tasa de sincronización: 18%

—Tasa de sincronización: 39%

—Tasa de sincronización: 78%

—Tasa de sincronización: 100%

—¡Ding!

—¡Felicidades! ¡El Legado del Conquistador Inmortal ha sido configurado para convertirse en tu constitución corporal primaria!

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Un fuego abrasador envolvió el cuerpo de Lux e incineró instantáneamente su ropa hasta no dejar nada.

El chico pelirrojo comenzó a entrar en pánico porque pensó que iba a ser quemado vivo. Sin embargo, después de agitar las manos por medio minuto, se dio cuenta de que no sentía ningún tipo de dolor ardiente.

En cambio, sintió un placer calmante que lo envolvía.

Era una sensación muy surrealista que no podía poner en palabras. Todo lo que sabía era que cada fibra de su ser se regocijaba al renacer, dejando atrás sus débiles y patéticos yo anteriores.

Cuando la llama desapareció, el cuerpo de Lux apareció sentado con las piernas cruzadas en el aire con los ojos cerrados. Estaba disfrutando del resplandor de su renacimiento y tratando de comprender los cambios que habían ocurrido dentro de su cuerpo.

En el pasado, cada vez que intentaba hacer algo, su cuerpo se sentía pesado como si estuviera lastrado con piedras. También había pequeños retrasos cuando ejecutaba acciones. Creciendo, pensó que era algo normal.

Pero ahora las cosas han cambiado. Ya no se sentía agobiado, las cadenas invisibles que lo retenían habían desaparecido. Sentía que si retomaba la prueba ahora tendría un 80% de posibilidades de éxito.

Cuando Lux abrió los ojos, la felicidad que sentía era evidente en su rostro.

Eriol sonrió satisfecho después de ver que el renacimiento de Lux había tenido éxito.

—Ahora, saca tu Libro del Alma y observa los cambios que se han realizado en tu cuerpo —Eriol lo alentó.

Lux asintió y convocó su Libro del Alma. Cada persona en el mundo de Solais podía convocar su Libro del Alma para verificar su progreso. Solo el propietario del Libro del Alma podría ver sus estadísticas.

Por supuesto, otros también podrían verlas si el propietario les daba permiso.

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Nombre: Lux Von Kaizer

Edad: 16

Raza: Medio Elfo

Rango: (Ninguno)

Fuerza: 4

Inteligencia: 5

Vitalidad: 4

Agilidad: 5

Destreza: 4

Habilidades Especiales: Evolución de Habilidad [EX]

Constitución Corporal Especial: Legado del Conquistador Inmortal

Título: Ninguno

Nota: Aún eres un personaje secundario. ¡No te creas tan importante, débil!

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—Evolución de Habilidad [EX]

– Esta habilidad te permitirá evolucionar tus habilidades una vez.

– Ciertos requisitos deben cumplirse para evolucionar la habilidad de tu elección.

—Legado del Conquistador Inmortal

Clasificación: F

Progreso: 1/100

La conquista no solo consiste en reclamar tierras y expandir tu dominio. La verdadera conquista es conquistar los corazones de las personas. Una vez que ganes su lealtad, el camino a la dominación abrirá sus puertas para ti.

Habilidades: (Ninguna)

Nota: Mejorar tu constitución especial te permitirá desbloquear sus habilidades.