Caminos Infinitos: El Fénix Furioso

Al principio, se sintió cálido y un poco húmedo, y luego, despacio, se despertó... parecía como si hubiera tenido el sueño más largo de toda su vida. Cuando abrió los ojos, todo seguía oscuro, sin embargo.

—¿Qué pasó... dónde estoy?

Recuerdos del sueño comenzaron a fluir en su mente. En sus últimos momentos, su mente reprodujo las escenas de su vida, una serie de elecciones y arrepentimientos. Se vio a sí mismo como un joven, lleno de sueños y ambición por convertirse en un boxeador profesional, pero escuchó a otros que le aconsejaron de otra manera. Terminó atrapado en un trabajo corporativo, perdiendo contacto con su verdadera pasión.

El recuerdo que más lo atormentaba era cuando el dinero desapareció de la cuenta de su compañía. De repente, lo culparon del robo, y todo se desmoronó. Su trabajo desapareció, amigos le dieron la espalda, e incluso su familia dudó de él. Sin ningún lugar a donde ir, se encontró en un oscuro callejón, intentando proteger a una mujer sin hogar de un atacante.

En esos momentos finales, sintió el peso de su existencia mediocre y el remordimiento que venía con ella. Deseó haber seguido sus sueños y no haberse conformado con una vida de conformidad. El dolor de la traición y el aislamiento desgarraron su corazón. Pero en medio de la oscuridad, también vio destellos de compasión y coraje dentro de sí mismo.

—Oh sí... Morí... Morí, ¿no es cierto?

Los recuerdos eran algo borrosos, pero podía decir que había vivido una vida completa así; el arrepentimiento que sintió, el arrepentimiento que estaba sintiendo, no podían ser solo partes de un sueño. También se vio a sí mismo sangrando mucho... las posibilidades de sobrevivir eran nulas.

—Al menos no me traicioné a mí mismo, esa era la parte importante, y eso es lo único de lo que nunca me arrepentiré, no es como si tuviera la oportunidad de hacerlo.

Decidió esperar su juicio; solo podía imaginar que estaba a punto de entrar en la vida después de la muerte... era la única explicación de por qué aún estaba... ¿pensando? Definitivamente, no estaba vivo. Ahora que lo pensaba, se sentía cálido y húmedo; ¿las almas sienten eso?

A pesar de la incertidumbre que le esperaba, encontró consuelo en la realización de que al final no se había traicionado a sí mismo. Acostado allí, reflexionó sobre las decisiones que había tomado a lo largo de su vida. Aunque reconoció la mediocridad que había marcado su existencia y el remordimiento que había teñido su corazón, también encontró consuelo en el conocimiento de que se había mantenido fiel a sus principios básicos.

—Supongo que mi opinión sesgada no importa si soy bueno o malo. De todos modos, la fila de espera debe ser muy larga.

Antes de mucho, pudo ver la luz adelante... parecía que la fila avanzaba sin que él caminara sobre ella. Eso era conveniente... era hora de saber si la vida era realmente justa en el más allá. Eventualmente, la luz lo envolvió y lo cegó por un momento, y luego una voz que resonaba en su mente lo despertó.

(El Camino Humano fue desbloqueado)

```

(Has obtenido la habilidad de Idioma.)

—¿Eh?

Se preguntó si había algo malo con él... la voz parecía bastante mecánica; era casi como si estuviera en un aeropuerto. Tal vez usaban ese tipo de sistema también.

De cualquier manera, la luz finalmente desapareció, y luego se encontró viendo la cabeza masiva de una abuela. La mujer tenía más cabello gris que negro, así que era preciso llamarla abuela. La mujer lo estudió por un rato, y mientras él quería devolverle la mirada, no podía. Su cabeza y cuerpo se sentían extrañamente rígidos. Ahora que lo pensaba, podía sentirse sostenido por las grandes manos de la gigantesca abuela.

—£¢€¥^°={}\∆×.

La gigantesca abuela dijo algo, pero él no entendió ni una palabra. Quizás dijo que no tenía suficiente carne en él; los gigantes que él conocía tenían interés en comer humanos, aunque no podían digerirlos. Sin embargo, a diferencia de ellos, la abuela no mostraba ninguna sonrisa perturbadora… parecía seria como un bloque de hielo.

Antes de mucho, lo trasladaron a una cama y luego notó su entorno. Todo estaba hecho de madera y parecía un poco arcaico. No quería pensarlo... Parecía demasiado ingenuo, pero empezaba a pensar que no iba a ser juzgado. Después de parpadear unas cuantas veces, comenzó a pensar que realmente no lo sería cuando vio algo más.

Nombre: Rainendall

Nivel: 01

Sendero Actual: Humano (Nv 01)

Salud: 10/10

Mana: 10/10

Aguante: 10/10

Fortaleza: 01

```

Destreza: 01

Inteligencia: 01

Vitalidad: 01

Sabiduría: 01

Resistencia: 01

Suerte: 01

Habilidades Principales:

[Idioma Nv 01]

[Ranura 2]

[Ranura 3]

[Ranura 4]

[Ranura 5]

Habilidades de Soporte:

[Ranura 1]

[Ranura 2]

[Ranura 3]

[Ranura 4]

[Ranura 5]

—Una interfaz parecida a la de un juego... ¿Qué diablos está pasando? Además, ¿quién es Rainendall? No puedo llamarme así... Me llamaré Rain. Mojado y frío. No me queda bien en absoluto.

Rain encontró difícil de creer, pero parecía que había sido reencarnado. ¿Ese era su premio por intentar ayudar a una mujer que nadie quería ayudar porque era una persona sin hogar? De cualquier manera, era demasiado conveniente para ser verdad. ¿Reencarnación manteniendo los recuerdos? Demasiado conveniente... debe haber algún truco en esa situación.

Mientras Rain pensaba en eso, de repente sintió el tacto de alguien cercano; poco después, su cuerpo fue volteado, y luego vio a otra mujer grande. Una que era mucho más joven que la abuela.

Sus radiantes rasgos eran una sinfonía de elegancia y atractivo. Con su lujoso cabello rojo cayendo sobre sus hombros, enmarcando un rostro adornado con chispeantes ojos azules y una nariz perfectamente esculpida, encarnaba el epítome de la gracia y el encanto. Su sonrisa era como nada que hubiera visto antes.

Rain se encontró asombrado al contemplar sus propias manos diminutas. Eran diminutas, inocentes y llenas de la inocencia de la infancia. Sus regordetes dedos agarraban el aire, explorando el mundo a su alrededor con un sentido de maravilla.

—Parece que es verdad... He sido reencarnado —pensó Rain—. Esta mujer debe ser mi madre, y aunque me dio un nombre terrible para pronunciar, es bastante guapa... ¿pensar eso objetivamente hace que mis puntos de karma bajen?

De cualquier manera, la nueva madre de Rain pronto se durmió y la abuela dejó la habitación. La verdad era que Rain no sabía qué sentir sobre ella, los recuerdos de su vida pasada y el hecho de que su familia no le creyera al final, a pesar de que nunca tuvieron ninguna razón para dudar de él en primer lugar... era una difícil situación.

La cámara medieval penumbrosa emanaba una atmósfera de antigüedad, adornada con velas parpadeantes proyectando sombras danzantes en las viejas paredes de piedra. Tapices desgastados colgaban al azar alrededor, mostrando escenas de valor y batallas antiguas.

Muebles rústicos de madera, desgastados por años de uso, se mantenían estoicos en la habitación, mientras una robusta mesa de roble soportaba el peso de tomos encuadernados en cuero y plumas de escribir. El olor persistente de pergaminos envejecidos y libros mohosos se mezclaba con el sutil aroma de la cera de abejas, evocando una nostálgica atmósfera de una era pasada.

—De cualquier manera... en mi segunda vida, me mantendré fiel a mis sueños y metas, y nadie me hará desviarme de mi verdadero camino —pensó Rain mientras juraba en su corazón.