Recompensa...

Al lado de Lu Qiang...

Cuando fue a la galería para atender la llamada, preguntó —¿Qué pasa Xiao Min?

—¡Jefe! Hay algo que me está molestando.

—¿Qué?

—Es acerca de la propuesta hecha por las industrias Ming por la cual perdimos hoy.

—¿Qué pasa con ella? —Lu Qiang preguntó con desinterés.

—Jefe, ¿no cree que aunque había una pequeña diferencia en las ideas, los números que ofrecieron eran similares a los nuestros y lo único que les hizo ganar fue el número que ofrecieron y esos números eran sólo uno o dos dígitos menores que los nuestros? Es como si supieran nuestra propuesta y solo ofrecieran un precio menor que el nuestro con una diferencia insignificante —Xiao Min dijo de un tirón. Sonaba inquieto.

—Cálmate, Xiao Min. Estás mirando las cosas demasiado detenidamente. No pienses demasiado y olvídate de lo que ya no está en tus manos.

—Sé que ahora no podemos hacer nada pero jefe, usted ya lo sabía, ¿verdad? —Xiao Min preguntó.