webnovel

El circo de Zomboso (3)

Las risas, el chico estaba cansado de ellas.

Este podía oír las almas gritando, así que tomó las palabras tanto de Kevin como del Abuelo Max y las hizo suyas por completo.

Dejó de estar de rodillas, una por una.

El chico respiró.

Moviendo lentamente su mano, el chico tocó un botón, el anillo de selección se presentó ante todos, su color verde característico, todo estaba allí, el joven entonces empezó a girarlo, Alien por Alien.

Y exhaló.

Mientras más Ben lo pensaba, más ira se llenaba en sí mismo.

El abuelo Max, quién se preocupó hasta el último segundo por los dos jóvenes.

«Debes rescatarla, Ben--»

Kevin quién se había sacrificado para darle tiempo a a Ben de ir a pelear contra Zomboso.

«¡Ve y salva a Gwen!»

Y la prima de Ben, quién había sido llevada en contra su voluntad para ser la comida de un intento de vampiro, todo por que él fue un cobarde, temeroso de lo que le pasaría sí se enfrentaba a Zomboso.

Ahora su prima estaba en peligro de muerte.

Ben, con un poco de la ira que sentía en su interior a Zomboso le dijo sin dilaciones..

— Voy a mostrarte el infierno por lo que le hiciste a mí familia.

Pero al oír al chico soltó una carcajada enorme.

—¿¡Y QUÉ CREES QUE HARÁS PARA DETENERME, MOCOS--!?

Ben Tennyson habría usado a Fantasmático, pero el joven Kirby renegó de dicha idea.

Eligiendo a uno de los aliens.

Y el vapor salió del cuerpo de dicho Alien.

El calor se sentía en el suelo, tan así que Zomboso tuvo que flotar ligeramente.

La mirada de Fuego fue la que se puso directamente a ver al payaso, quién ahora le quedaba chico por la diferencia de altura.

—¡ESTO!

Ben lanzó un derechazo directo a la cara del payaso malnacido.

El sonido del puñetazo rocoso y los gritos de Zomboso por las quemaduras fueron un placer para el oído de Fuego.

Ahora el payaso lloriqueaba enredado en su propio cable.

Ben vio el rostro del tipo al que tanto mal le hizo a su familia teniendo una gran marca de una quemadura roja.

Aún así, Tennyson lo único que pudo decir bajo los efectos de su propia ira, fue..

—Todavía no.. Todavía NO es suficiente.

Agarró el cable del Payaso y lo atrajo hacia él de un tirón.

Cara a cara, le hizo una pregunta elevando su voz mientras las llamas de su cabeza se incrementaban tal como una reacción química.

—Dime.. ¿PUEDO SER YO TÚ MAYOR PESADILLA?

El payaso negó con la cabeza ya que trataba de hablar pero palabras no le salieron, sólo sonidos dignos de un cobarde. En cambio, Fuego mostraba más expresión que nunca en su existencia.

—¿SÍ PUEDO? OH VAYA, entonces.. ¡EMPECEMOS!

Nuevamente Ben lanzó un gancho directo al estómago de Zomboso mandándolo a rodar contra el suelo.

Y el payaso desde su posición se sentía adolorido, normalmente trataría de engañar al niño para escapar, pero era incapaz, después de todo, esa cosa no podía ser un niño.

Dejando llamas detrás de cada pisada, la mirada intensa de Fuego a Zomboso hizo que este se riera un poco, quién soltó palabras bajo un claro nerviosismo.

—O-oye, todo esto puede arreglarse, yo le daré su alma a tú prima y listo, ¡Problema resuelto! ¿Te parece, amiguito?

El problema estaba resuelto según Zomboso, lo engañaría y podría huir con todas las almas, esto no podía ser tan difícil.

Pero lo único que recibió el payaso fue la intensa mirada de Fuego quién cada vez se acercaba más y más de una manera intimidante.

Paso tras paso.

Tap. Tap. Tap.

Los sonidos de la arena convertida en cristales por el calor inmenso que producían las pisadas de Fuego eran fuertes.

Crack. Crack. Crack.

Pero más lo eran los gritos de las almas en pena.

Al final, Fuego estaba finalmente cara a cara una vez más con el payaso.

—¡N-NO TE ME ACERQUES, MALDITO MONSTRUO!

Intentó gritar el payaso, lanzando una patada en un intento de alejarlo al alienígena, este sólo agarró su pierna con su mano de Pyronita.

Todo parecía normal, hasta que las almas callaron, y sólo se pudieron oír los gritos de dolor de un payaso que no sabía cuándo cerrar la boca.

Ahora la imagen era esta, la sangre fresca sobre el suelo, parte del cuerpo del payaso estaba empezando a quemarse y una de las piernas se encontraba totalmente hecha pulpa. Era correcto decir que lo único que quedaba de dicha pierna, era el hueso desnudo, manchado en sangre y restos de carne.

Soltandolo en el suelo, Zomboso se arrastró por el suelo mientras gritaba de dolor, sollozando justo como las almas a las que había torturado con su máquina.

—¿Puedes oírlas, Zomboso?

Eran las palabras del monstruo que el Omnitrix, no, que Zomboso había despertado.

—Son las voces de aquellos a los que mataste. Ellos no olvidan.. y yo les daré lo que quieren.

Zomboso ignoraba las palabras de Fuego, sólo quería huir, así que empezó a gritar por sus subordinados como un perro cuando está apunto de morir.

—¡NO HUYAS, ZOMBOSO! ¡AÚN NO TERMINO CONTIGO!

Fuego entonces dio un gran salto y cayó sobre la otra pierna del payaso, empezando a romperla con cada segunda que pasaba encima, aparte de freírla con el tiempo que allí pasaba.

—¡AHHHHH! ¡DETENTE POR FAVOR! ¡DETENTEEE!—Gritaba Zomboso, pero Fuego sólo decidió ponerse de cuclillas sobre la pierna que se fundía a fuego lento.

Los sonidos de la carne de Zomboso quemándose fueron música para los oídos de Fuego, tal como sus gritos.

—¿Qué pensabas cuando mataste a esas personas? ¿Lo disfrutaste? ¡Por que yo creo que me voy a DIVERRRRTIR MUCHO CONTIGO!

Había perdido la cabeza, Zomboso ya no tenía piernas, es más, moriría desangrado, ¿Por qué continuar con la tortura?

Fuego entonces puso su dedo índice en el pie de Zomboso empezando a hacerle un agujero en su carne, y muy pronto, en los huesos, causando gritos aún más horribles.

Consumido por el odio, una idea empezó a llenar la cabeza de Fuego, el odio, su miedo convertido en fascinación, todo eso se convirtió en una actitud de Juez sobre Zomboso.

Y su veredicto era más claro que su fuego, ese por supuesto era: La tortura por sus pecados.

Después de un rato, Zomboso seguía con vida, apenas, ya que Fuego se había dedicado a practicar sus habilidades de cocina con el payaso, pero cuando vio que era suficiente lo levantó del cabello pasando uno de sus dedos por su mejilla dejando una marca de por vida allí mismo.

—Bueno, eso fue muy divertido. . . ¡AHORA NO VUELVAS!

Fuego entonces lanzó a Zomboso contra su propia máquina al mismo tiempo que lo quemaba con sus grandes flamas haciendo que hasta sus últimos segundos de vida fueran una digna tortura.

Zomboso al golpear su máquina rompió el cristal y la máquina dejó de funcionar, dejando escapar cientas de almas que estaban atrapadas ahí mismo.

Justo ahí llegó Kevin quién vio como la máquina se prendía fuego y el escenario estaba lleno de sangre y carne.

—B-Ben.. ¿Qué fue lo que hiciste?

Fuego miró sus manos por un momento, viendo como la carne de Zomboso se derretía entre sus dedos.

—Y-yo.. T-tú sólo ver a Gwen. Yo.. me tengo que ir.

Fue lo único que pudo decir Fuego mientras agarraba su cabeza con sus propias manos y empezaba a correr.

—¡Ben. . .!

Kevin trató de hacer algo pero vio que Gwen se encontraba tirada en el suelo, lejos de todo, el híbrido Osmosiano aguantó sus ganas de vómitar y agarró a Gwen, poniéndola en su espalda como a un caballito, saliendo de ahí mientras podía.

×××××

¿Qué hice?

Mataste a Zomboso.

¿Eso fue lo que hice?

Sí.

Oh, ya veo.

¿Acaso no sientes culpa?

Lo único que siento es miedo.

¿De qué?

De mí mismo.

¿De no poder controlarte?

Sí.

Nunca tuve problemas con el miedo, pero.. esto me llevó a un límite.

No creí que matar a alguien me pondría tan mal.

Pero me dejé llevar por la ira y el poder.

Yo maté a Zomboso porque ni siquiera pude controlar el miedo a mis propios poderes.

¿Qué harás ahora?

No lo sé.. Maldición, ¿Por qué hablo conmigo mismo para empezar?

Por que eres el único que podría entenderte, nadie más puede, sólo tratarán, ya sea que funcione o fallen en el intento.

Veo. . . Eso es triste.

¿Acaso pensaste que la vida era fácil?

. . .No me lo recuerdes.

Soy tú, tú mismo te lo estás recordando.

Ni siquiera estamos teniendo esta conversación en primer lugar, es ridículo.

—Ben..

Sigo transformado en fuego, así que creo que maté al pasto debajo de mío, lo siento, pasto.

—Kevin me contó lo que pasó..

Oh, ya lo sabe.

Qué mal, bueno, no sabría que decir de todos modos.

—Hijo, a veces.. a veces nos dejamos llevar por nuestras emociones.

Sí, lo sé.

—Yo no sólo lo maté abuelo, me divertí torturandolo, creí que era una clase de justiciero, alguien que tenía el deber de llevar a cabo un juicio y de ejecutar el castigo.

Pasé mis manos por mí cabello, ya que me había destransformado voluntariamente, respecto a mí cabello, era simple quería arrancarmelo, porque los gritos de Zomboso no salían de mí cabeza, me perseguían.

—Escúchame, Ben.

Me agarró el abuelo de los hombros con sus manos, queriendo que lo mirara, pero, ¿Cómo podría? Yo casi pensé en matar a Kevin por verme.

—Cuando el poder nos consume, cuando nos dejamos llevar por todo lo negativo que nos pasa, hay que ser fuertes. Uno tiene que ser fuerte o hará cosas de las que puede arrepentirse. Hoy hiciste una, pero no puedes dejar que eso te supere, debes ser más, más de lo que eras y más de lo que serás.

Me quedé callado mientras lo oía.

—Cuando la ira y el poder nos motivan, sólo cosas malas quedan. Las cosas de las que sentimos asco, de las que nos arrepentimos. Hoy mataste a alguien, ¿Entonces mañana matarás a alguien más? No, debes ser fuerte, hijo.

¿Más fuerte?

—Debes tener más resistencia, por horrible que suene, en tú brazo se encuentra algo que Dios sabrá porque te lo dio, pero ahora es tú responsabilidad.

Me lo dio porque yo se lo pedí.

Yo mismo me llevé a esto.

Es mí culpa.

—Y eso significa que tienes que ser más fuerte que todos, incluso más fuerte que yo. Porque eso significa ser un héroe, Ben. Aprender de nuestros errores sin importar qué tan grandes sean. Uno siempre puede volver a intentarlo, eso nos hace humanos.

Yo..

—Seré más fuerte. Y-yo seré tan fuerte que así nadie más vuelva a sufrir. L-lo juro.

Estoy llorando, que vergonzoso.

—Por ahora, intentaré llevar la mitad de tú carga, así puede que en un futuro tanto Gwen como Kevin me ayudarán a dividir tú dolor. Juntos vamos a salir de esta, hijo.

Lloré por un rato abrazado al abuelo, después de eso, dejé su abrazo, y me sequé las lágrimas con los ojos.

Creo que necesitaba que alguien me apoyara de esa forma.

Puede que no me sienta más ligero ahora, pero sé que puedo confiar en ellos.

Son mí familia, al fin y al cabo.

××××

Camino junto al abuelo Max por el bosque, pronto llegamos y vemos como están las autoridades como también unas ambulancias, parece que la carpa se había quemado por completo, así que también estaban los bomberos.

Que raro, él no recordaba haber quemado la carpa ni mucho menos..

Miré a Kevin y este al notarme asintió levantando un pulgar.

Cuando me acerqué a ellos pude notar a Gwen sentada al lado de Kevin, ambos comiendo palomitas.

—¡Ben!—Exclamó Gwen dejando sus palomitas y corriendo hacia mí con preocupación en su cara—. ¡Oí lo que paso! ¿Estás bien?

Ella me abrazó, una parte de mí se sintió aliviado de que no me tuviera miedo, de que no se sintiera asqueada.

De que no me odiara.

Después de todo, ella era importante para mí.

—¿Ben? ¿Me estás escuchando?

Yo correspondí al abrazo, y dije mientras ponía mí cabeza sobre el hombro de mí prima.

—Sí, sólo que algo cansado. Y tú, ¿Te encuentras bien?

Gwen me miró entre aliviada y confundida, abandonando el abrazo, entonces la chica respondió sin reparos.

—No tengo ni un rasguño, el abuelo me dijo que venciste a ese payaso y fuiste a rescatarme junto a Kevin. Yo..—Gwen puso sus manos detrás de su espalda, está avergonzada, puedo notarlo—. Quería agradecertelo, sé que a veces no lo digo cuando nos salvas a mí y al abuelo, pero quiero que sepas que te aprecio, eres mí primo y por sobre todas las cosas, mí mejor amigo.

A estas palabras que me quitaban algo de peso de la espalda, extendí mí puño y puse sonrisa.

—No hay problema, tonta. Yo también te considero mí mejor amiga, así que sigamos lidiando con lo que el mundo nos tire, unidos.

Y en vez de chocar los puños, Gwen volvió a abrazarme, no tuve otra razón para no corresponder, así que abracé a mí prima pelirroja.

Después de esto fui con Kevin quién con un movimiento con su cabeza decía más que mil palabras.

—Gracias, socio. Y veo que pudiste regresar a la normalidad.

Pudo controlar la transformación aún mejor que su versión original, aunque este la había absorbido directamente del Omnitrix, mientras que yo le había permitido tomar una muestra del ADN lo suficiente como para que pudiera usarla como propia.

—Sí, no fue tan difícil como pensé, después de que Gwen me diera un par de consejos fue muy fácil. Ahora ambos podemos usar a Ultra T. Genial, ¿No?.

Asentí y tomé las palomitas de Gwen.

—¿Puedo?

La chica asintió luego de un suspiro, así que yo me puse a comer junto a Gwen y Kevin.

—Oye abuelo, ¿Cuando nos vamos?

Preguntó Kevin, quién ya parecía haberse adaptado a la forma de tratar al abuelo Max, y viceversa.

—No mucho, hijo. Sólo tengo que terminar de hablar con los oficiales aquí y luego podremos irnos.

El abuelo siguió hablando con un policía viejo que nos dejó ir luego de unos minutos, así que todos nos subimos al Camper y regresamos al camino.

—Hoy creo que fue suficiente aventura para todos, así que comeremos y a la cama, ¿Me escucharon?

Todos entendimos las palabras y respondimos de formas positivas pero variadas, así que al final terminamos comiendo hamburguesas cuando encontramos un puesto al lado de la carretera.

Y con todo eso hecho, observé mí Omnitrix en medio de la noche, cosa que nunca había hecho.

Habíamos parado para mañana poder seguir el viaje.

—¿Por qué me enojé tanto?

Le pregunté al Omnitrix mismo en mis pensamientos, pero por obvias razones no recibí respuestas.

Después de un rato regresé a mí posición para dormir, ignorando los pensamientos que entraban a mí cabeza para mantenerme despierto.

Al final, mañana sería otro día, uno en el que debía volverse más fuerte.

Me olvidé por completo que tenía como 7 caps enteros para publicar, al menos por ahora subiré este.

Bosterobasurerocreators' thoughts