Lo conseguí

—El cuerpo de Ye Chen se movía al unísono con el tajo del sable. Era como si se hubiera convertido en uno con el sable y los cortes que estaba desatando su mano. ¡Siguió el impulso del sable y presionó hacia adelante!

Fue impresionante. A la edad de Ye Chen, este ataque era algo de lo que sentirse orgulloso.

Todos los expertos en el cielo provenían de poderosas facciones. Estas personas habían visto incontables genios talentosos en su vida, pero eran muy pocos los que podían cultivar la esencia de una técnica a tal nivel a la edad de Ye Chen.

La anterior técnica del sable de Ye Chen era extremadamente aguda, pero no los había sorprendido porque aún era bastante tosca, pero ahora que había sido pulida, ¡era equivalente al nivel de técnica que podría usar un experto del reino de la Creación a medio paso!

Si no lo hubieran visto con sus propios ojos, definitivamente no lo habrían creído. Este tipo de mejora era impresionante, especialmente en esta situación y marco de tiempo.