Agradeciendo al pequeño

En el asentamiento, las oleadas de bestias finalmente habían llegado a su fin. Los líderes se mantuvieron en su puesto un poco más para asegurarse de que no hubiera sorpresas inesperadas atravesando sus muros, y poco después, recibieron una ligera actualización por parte de Edvard, quien les informó que las cosas deberían estar bien para ellos por el momento.

Edvard no entró en los detalles principales del evento, pero como la oleada de bestias había terminado y no había movimiento enemigo, estaban inclinados a creerle. Los líderes comenzaron a concentrarse en el control de daños, revisando si todo estaba bien en el asentamiento y demás. Los líderes sabían que la recuperación podría tomar cierto tiempo, ya que se trataba del primer ataque que el asentamiento había experimentado en su nueva forma.