—También lo creo —sonrió Jeslyn.—
Los labios de la Señora Caroline se curvaron en una mueca burlona cuando escuchó eso. Sus pensamientos eran desconocidos. —Querida Piper, no me dijiste–—
—Kim, acércate, deberíamos tomar una foto juntas —Piper interrumpió a su madre y arrastró a Kimberly y Jeslyn para tomar una foto grupal.
—Señora Lu, usted y sus cuñadas lucen hermosas —un reportero con estilo apartó a la Señora Caroline para llegar frente a Jeslyn y compañía.—
La Señora Caroline podía sentir sus uñas clavándose en su palma mientras se esforzaba por contenerse. Ver la gran sonrisa inocente en la cara de Jeslyn le daba ganas de borrarla, pero no puede hacer nada en público. Además, Jeslyn debería reírse ahora, su perdición está más cerca de lo que imagina. En cuanto a los reporteros, pronto lamentarán la humillación que le causaron.
Con eso en mente, la Señora Caroline se alejó enfadada y entró al hotel.
Apoie seus autores e tradutores favoritos em webnovel.com