Pokemon en el apocalysis

"Como paso esto"

Mirando alrededor, todo estaba destruido, había muere y destrucción por todo el lugar, el hermoso mundo colorido y lleno de vida ahora estaba completamente destruido, ahora nada era igual que antes, todo lo hermoso del mundo había acabado, en este horrible lugar había una chica siendo cargada por un chico, ella tenía una herida en el estómago que estaba causando que esta se desangrara, ella apenas podía estar conciente.

"Gren, creo que no aguantare más.." dice la chica que estaba a su lado, la chica en cuestión tenia la misma edad que él que era aproximadamente de 17 años, ambos eran jóvenes y estaban viviendo el peor momento de su vida.

"aguanta un poco más Elesa, tienes que soportar solo un poco más, se que el dolor que sientes es horrible pero tienes que soportar mas, te lo pido no me dejes.."

*por que mierda me ocurre esto a mi*

Gren estaba furioso Pensando en lo oscuro y sombrio que se habia vuelto el mundo, toda la felicidad se fue en un instante, antes estaba por experimentar una de las mejores experiencias en su vida pero todo se fue a la mierda cuando ocurrio el apocalypsis que estaba acabando con el mundo.

*espero que sea un simpe sueño, despierta, despierta..*

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Antes de que Gren experimentara esta horrible experiencia, en este mundo había mucho color y felicidad, el mundo estabas habitado por humanos y Pokemones, unas criaturas poderosas que eran los pricipales compañeros de los humanos que habitaban la tierra, al inicio fue algo duro acostumbrarse a este tipo de criaturas pero conforme paso el tiempo fueron uniéndose causando uan socidead como la de ahora

Los humanos y pokemones se ayudaban entre sí, con los pokemones el trabajo y la vida se hicieron más fáciles para los humanos, poco después los humanos fueron utilizando de ciertas formas a los pokemones, y así comenzaron a pelear entre ellos, los pokemones peleaban con sus entrenadores y así se dejó como un medio de entretenimiento.

El mundo era hermosos, los humanos a menudo tenían diversas profesiones, desde agricultura hasta ser empresarios, todos hacían algo e incluso si no tenias nada en mente en lo que trabajar habían muchas otras en las cual podías adaptarte

Pero sin lugar a duda la profesión más solicitada era la de maestro Pokémon, los maestros Pokemones era lo que un entrenador Pokémon deseaba ser, era el mayor logro qué se podía conseguir, a menudo las personas se hacian entrenadores pokemon para ganarse la vida, era una opcion sencilla y facil para ganar dinero, solo tenias que luchar y ganabas dinero de las personas que derrotabas, por supuesto tambien habia muchos riesgos en esta profesion pero era una muy divertida y grandiosa experiencia.

Los entrenadores podían aspirar a convertirse en líderes de gimnasio, los altos mando y por último el campeón o maestro pokemon.

Todos los niño a menudo veían a las personas que eran entrenadoras por la televisión, a menudo salían los poderosos entrenadores Pokemon que eran los ídolos de los niños, muchos soñaban en convertirse en algo parecido a ellos y así también era Gren.

Gren era un niño muy animado, su vida era bastante plena, vivía en una ciudad enorme donde la tecnología era bastante buena, no tenia que preocuparse por nada ya que sus padres eran una familia con enorme cantidad de dinero, además Gren veía el amor que sus padres le daban.

El ha menudo decía que quería convertirse en un maestro Pokémon, siempre quiso ser un maestro pokemon, pero sus padres siempre lo retenían para que el pudiera viajar en su viaje Pokémon, pero no se quejaba ya que sus padres le prometieron un Pokémon de categoría si esperaba un poco mas asi que él no se quejaba ya que tenia la esperanza de que así fuera.

sus padres eran unos grandes científicos, ellos hacían la labor de investigar sobre los asuntos de los Pokemones y como funcionaban en el mundo, no eran los mas conocidos pero para Gren eran personas increíbles.

A menudo su padre le contaba lo que se descubría de los pokemones, por supuesto a Gren le parecía maravilloso las historias que le contaba a su padre, su padre a menudo le decía que tuviera paciencia qué el regalaría un pokemon espectacular, por lo que Gren siempre esperaba con ansias a que llegara el día en que su padre le regalaría un Pokemon.

Gren a menudo jugaba con su amiga de la infancia, Elesa, ella era una niña bastante linda que en cuanto Gren la vio sintió una conexión con ella, al inicio le costo lograr hacerse amigo de ella pero como los padres de Elesa y Gren a menudo se juntaban fue fácil que los dos se hicieran amigos.

Con el tiempo los dos de hicieron inseparables, Elesa a menudo le decía que ella se convertirá en una estrella famosa y hermosa, ella a menudo le presumía su Elekid, por supuesto esto ponía celoso a Gren pero aún así siempre se divertían juntos.

Pasaron los años y Gren comenzó a crecer, Gren y Elesa se hicieron grandes amigos, su amistad crecía con el tiempo y cada día que pasaba era feliz para ellos, los padres de ambos eran muy buenos amigos así que a menudo los dejaban juntos, además que les prohibirán ir a la escuela, ya que eran además de caras e inútiles, por eso Gren y Elesa estudiaban juntos en casa, sus padres le regalaban libros y con el Internet tenían un gran margen de aprendizaje, durante estos años de estudiar en casa Gren y Elesa hicieron una amistad de almas gemelas, ellos pasaban mucho tiempo juntos qué naturalmente se hicieron inseparables, además los sentimientos de ambos se iban transformando en algo más que amistad.

Aun así con lo feliz que Gren era al lado de Elesa algo dentro de el no estaba satisfecho, Gren tenía ya 16 años y le daba envida como es que los demás niños ya estaban viajando por el mundo a los 12 años, que era la edad en la que normalmente salian de viaje los niños, sus padres le dijeron que se quedara en casa, que aguantara un poco mas, algo que le constaba hacer pero tuvo que soportar, además el ni siquiera tenía a un Pokemon, algo que lo ponía triste de vez en cuando.

Sin embargo en su cumpleaños número 17 ocurrió algo que nunca olvidara, sus padres le dijeron que seria un año especial y que ese día lo recordaría como ni un otro, la fiesta fue una sencilla, no tenia muchos amigos por lo que solo invitaba a Elesa y a sus padres que rara vez estaban en casa, la fiesta fue mas como un convivio familiar, todos disfrutaban y estaban felices, incluidos Gren, el estaba feliz de tener un ambiente tan pacifico, la fiesta continuo un poco mas y Elesa junto a sus padres se marcharon, dejando a Gren y sus padres solos, entonces fue cuando su madre saco un regalo, era ropa y algunas que otras cosas, era lo normal, sin embargo en el turno de su padre le otorgo un regalo, sin embargo era pequeño y en forma de esfera, esto hizo que los ojos de Gren se iluminaran.

"toma hijo, aquí esta mi regalo, espero te guste ya que me esforcé en esto.."

"esto..."

Con los ojos brillando casi con lágrimas, Grey se apresuro a abrazar a su padre.

"gracias padre, gracias"

Lo que le dio era una Pokeball, era evidente que dentro había un pokemon.

"pero aún no lo has abierto qué tal si no te gusta lo que hay"

"no importa lo que haya será perfecto para mi"

"hijo"

El padre de Gren tenía lagrimas en los ojos, las palabras de Gren lo habían hecho llorar.

"ay cariño, no digas esas cosas, harás llorar a tu padre"

"la madre de Gren con una sonrisa dice"

"basta"

El padre de Gren estaba avergonzado de que su hijo lo viera en ese estado.

"olvidalo, qué tal si lo abres, es una sorpresa de los dos"

"la madre de Grey le dijo que lo abriera"

"ok"

Aunque dijo eso, Gren esperaba algo maravilloso, el quería un pokemon qué le agradará.

Con miedo presiona la pokebola.

"pamm"

Un sonido sale y aparece una criatura hermosa, esta criatura era un tanto pequeño, tenía un pelaje azul en sus piernas y en su cabeza tenía un pelaje negro que tapaba sus ojos, tenía un copete qué se asomaba de su cabeza.

"e-es un d-deino"

Con emoción grita Gren, Gren estaba demasiado feliz, este Pokemon lo conocía muy bien, era un poderoso dragon qué no mucho se atrevían a entrenar, su poder era algo que muy pocos podían controlar.

"hijo este pokemon acaba de nacer no hace mucho por lo que es posible que no sepa que hacer, así te encargo que lo cuides mucho"

"además si te ve a ti primero, el inmediatamente se encariñara contigo"

"así que por que no te acercas a él"

"entiendo"

"dei" deino comenzó a mirar alrededor, el estaba confundido mirando alrededor, como el es un recién nacido no sabe que hacer.

De pronto ve un joven en el suelo, estaba sentado mirándolo fijamente, Deino no sabia que o que era este joven.

"mira soy Gren tu nuevo amigo, serás mi compañero"

Gren le dice con cariño a Deino, por otro lado este no entendía nada, no sabía que hacer solo sabía que el una persona agradable, su instinto le decía que el era buena persona.

Rápidamente Deino se acerca a Gren, al ver que se acerca, Gren se emociona Deino, ya que pensó que sería su primer piso hacia la amistad enterna.

Deino se acerca lo suficiente para que Gren pudiera tocarlo.

"puedo tocarte"

"dei"

Como parece que el le dio permiso, Gren comienza a tocar su cabeza con cuidado.

El acaricias su cabeza, podía sentir que su pelaje era algo suave, deino no le hizo nada así qué pensó que le agradaba.

"mira padre creo que le agrado"

"me alegro hijo"

Luego de jugar por unos minutos, Deino y Gren se hicieron amigos, Deino parecía contento con la atención que Gren le daba, Gren lo llevo a dormir a su cama y el acepto durmiendo con el.

Así pasaron los meses, a menudo se veía con Elesa, Elesa conoció a deino, al inicio le tenía miedo ya qué a menudo veia como este era de los pokemones más poderosos.

Pero con el tiempo jugaban con Elekid y deino qué parecían llevarse bien.

Paso hasta un día antes del cumpleaños de Gren, el como de costumbre se durmió, pero esta vez estaba más emocionado ya qué mañana se iría de viaje para ser un maestro pokemon.

"qué emoción, deino mañana por fin sea el inicio de nuestra leyenda"

"Dei, dei"

Este estaba emocionado como el.

"me iré a dormir"

.

.

Hoy en el sueño de Gren estaba siendo extraño, algo le hablaba a Gren en el sueño, también había recuerdos extraños, era casi como si todavía estuviera despierto, ademas en su sueño habia gritos de lamentos, habia personass que no conocia y que a la vez sentia que estaban tan cerca.

"no....no los dejare....perdóneme fue mi culpa....."

Unas lagrimas salían de los ojos de Gren, además el estaba sonámbulo, estaba soñando en algo extraño, sin embargo todo era un sueño y nadie sabia que era lo que soñaba.

Pero algo que ni Gren ni Deino ni nadie noto fue la sombra que estaba cerca de su cuerpo, este estaba mirándolo profundamente, tenia una mirada de lastima en sus ojos.

"Gren..."

"siento pena por ti, este maldito inferno te arrastro a eso, pero lo que vivimos ahora es diferente, ahora podemos cambiar el destino de esas personas"

"Gren..., eres la esperanza del mundo, ni yo, ni siquiera mi padre pudo con esta tarea, tu...eres quien debe acabar de una vez por todas con ese maldito infierno"

"te ayudare y hare que tu acabes con todo esto de una vez por todas, ganaremos contra ese maldito, esta vez no permitiré que mueras de nuevo, te salvare cueste lo que cueste"

Después de hablar, la misteriosa sombra se metió en el cuerpo de Gren sin dejar rastro , solamente quedaron las lagrimas y el extraño sueño de Gren, pero no quedo nada mas que eso.