Escena 2 ¿Por qué de vecina?

Bostezo – no pude dormir… Mmmm, pase toda la noche estudiando y haciendo tareas. –(Bostezo) - …Mejor iré a darme un baño.

- Aun no puedo creer que viva yo solo en esta casa, - que café tan delicioso – iba caminando hacia mi cuarto cuando… - ¿una maleta? ¿de quién será?

Escuché una puerta abrir volteé a ver y para mi sorpresa era una chica, estaba envuelta en una toalla ella me miro ambos nos sorprendimos.

- ¡perdón! – quise darle la espalda, pero mi curiosidad me podía, no mejor dejo de ver.

- ¡Un pervertido! ¡Ha! – levanto sus manos y dejo caer la toalla, esto es malo muy malo le di la espalda

- ¡ha! Recoge tu toalla rápido

- ¿no quieres seguir viendo Aki-kun? – he ¿Dónde escuche esa vos antes?, ¿acaso es…?

No, no puede ser Kobayashi-san. Efectivamente al voltear de nuevo vi su cabello inconfundible.

- ¡no te di permiso que voltearas.! – qué es esto es la gloria estoy en el cielo, pero no era así Kobayashi-san me desmayo con una patada en el abdomen.

Que cómodo esto si es el paraíso, estar arrecostado aquí es un deleite no quiero levantarme es tan suavecito, ¿y esto? Es una sensación que me parece conocida (aprieta, aprieta).

- Aki-kun… - o son las voces de ángeles y susurran mi nombre - Aki-kun… ¡Aki- kun! ¡Despierta! - hug acabo de recibir otro golpe en mi abdomen, mi cabeza cayó al suelo ¿estaba arrecostado en el regazo de ella?, ¿entonces? Estaba agarrando su… ¡noooo! Qué vergüenza.

Rápido me arrodillé y le pedí perdón no me hablo durante todo el día y al llegar en la noche a casa seguía sin hablarme entonces.

Grrbrr, ¿ese fue su estómago? – ¿te parece si preparo la comida para disculparme?

- no quiero que tú me cocines entiendes – Grrbrr, su cara cambio de expresión.

- anda tu estomago piensa lo contrario, vamos yo cocinaré.

- Mmmm, está bien.

Varios minutos después.

- buen provechó.

- buen provechó, Mmmm esta delicioso… - come demasiado parece qué la comida se fuera a un pozo sin fondo. – estas perdonado siempre que cocines así de rico no has de tener malo sentimientos.

Esa noche nos fuimos a dormir, no podía creer que la tendría de vecina, aunque no sé si será algo bueno o malo tendría que esperar a ver que dicta el futuro