Capítulo 37: Este sería yo si hubiera reencarnado como un pokémon

Tras hacer el desayuno y hablar un poco de sí se podía retrasar el aventón que le pedí, me despido del señor Arenque, por el momento, y me dirijo al Bosque Petalia.

El Bosque Petalia es una zona llena de vegetación muy frondosa, en ella se encuentran algunas especies de pokémon únicas que no se pueden encontrar en ninguna otra parte de la región de Hoenn.

Mi intención es buscar esos pokémon para aumentar más la pokédex, además, es posible que alguno de ellos me ayuden en algunos de los gimnasios.

"Looow"

"Wuuuuu"

"AUUUUU"

Al adentrarme más y más dentro del bosque, se podían escuchar las 'voces' de los diferentes pokémon que viven ahí. Incluso podía sentir que algunos pokémon salvajes me estaban observando atentamente.

Quizá me estaban vigilando, me estaban acechando o quizá me estaban evaluando.

Los pokémon salvajes no atacaban activamente a los humanos, a menos que fueran provocados, estos pusieran en peligro mortal su hogar o compañeros, cuando ya no quedara ninguna otra forma de alimento o cuando sientan interés en este humano.

No, no ese tipo de interés. Si no uno donde el pokémon vea el potencial de un entrenador, y su capacidad para hacer que un pokémon logre nuevas alturas.

Obviamente, si esta última era la razón, el ataque inicial era para medir los reflejos del entrenador y luego los pokémon salvajes esperarían para que el humano saque un pokémon y ver si es digno de que lo capture o no.

En cuanto a los otros tipos de 'ataque', eran a matar.

"Sal"

Saco a mi zigzagoon de su pokeball y le instruyó que me acompañe.

Él no es mi pokémon más poderoso, pero tampoco es débil. Además, su habilidad requiere que esté al aire libre.

"Zigzagoon, mantente alerta. Puede que hayan pokémon igual de fuertes que los mightyenas de la última vez"

"Zig"

Zigzagoon asiente a mis palabras y camina a mi lado con el oído alerta.

Como es un pokémon muy pacifico, zigzagoon sabe cuando hay peligro y debe escapar. Este dato lo descubrí hablando con los aprendices del gimnasio de mi padre, y la verdad, lo agradezco.

-

El recorrido fue sin problemas. Aunque no paramos para almorzar, le di a zigzagoon unas bayas y deje a mudkip y ralts en el minimundo para que se sirvieran comida pokémon junto con los demás.

En todo el camino, combatimos con algunos pokémon y zigzagoon encontró 2 objetos.

Lo único de lo que me podría quejar, es el hecho de que de todos los pokémon salvajes a los que nos enfrentamos, todos ya los tenía registrados/capturados.

Como ahora está empezando a anochecer, preparo mi tienda, las luces, suelto a mis pokémon y comienzo a preparar la cena.

Esta mañana note que mi cocina era buena, no era igual a la de mi madre ni a lo que hacían en el gimnasio ni de cerca, pero era aceptable. También ayudó que el viejo solo comiera alimentos que venían del mar, por lo que un cambio de ritmo le sentó bien.

"Mudkip, ralts. Salgan"

Deje que mis otros dos pokémon salieran y les sirvo la comida pokémon que preparé. Aunque solo hubiera sido una vez, pude aprender la receta y los pasos para hacerlo.

Pero no estoy seguro de su sabor.

Bueno, por el momento es bueno si no sabe mal y sea comestible, ¿no?

"Ahh~, ¿que tal esta la comida chicos?"

"Maaaa"

"Goooo"

"Ra"

Diablos, al menos parece que sí pueden comerlo.

"Si que son crueles chicos. No se preocupen, aprenderé a hacer mejores platos"

Tras decir eso, empiezo a servirme mi comida...

"No, tengo que aprender si o si"

Aunque era comestible, no me encantaba. Al menos era mejor que la comida en conserva que compraba para el viaje.

"Maaaa"

"Goooo"

"Ra"

"..."

No hablo 'pokémon', pero estoy seguro que estas pequeñas pestes estaban cruelmente de acuerdo conmigo y verlos a sentir tampoco ayudó a disipar esa impresión.

"Bien, terminemos y vamos a dormir"

Y tras eso, terminamos de comer, limpiar y entramos a la carpa para dormir.

El clima de esta noche, era extrañamente frío.

-

"~Oooth"

"Mmmmm"

"Laaaaa~"

"¿Eh?"

Me despierto a sentir un peso sobre mi. Y no solo un peso, sino que también por el ruido.

"¡AH!"

Al abrir los ojos y echar un vistazo, pude ver la fuente del ruido y ¡ACEUS SANTO! Una bola de pelos estaba sobre mi.

Incluso, cuando traté de separarme de él, no pude. La bola de pelos estaba muy aferrada a mi.

Y, a pesar de levantarme, moverme y más, este pokémon no se inmutaba y seguía durmiendo apegado a mi.

Me acerque a mi mochila y saque una pokeball, con la cual toque la cabeza del pokémon.

1...2...3...*tin*

"..."

No podía decir nada, esta era la primera vez que capturo un pokémon de esta manera y me senti raro.

"Muy bien, sal"

"Laaaa~"

Al salir, el pokémon seguía durmiendo.

Según mis recuerdos, este era un slakoth el pokémon perezoso.

"Laaa~"

Ahora que lo veo, es muy tierno mientras duerme. ¿Quién diría que esta cosita podría convertirse en una bestia que solo podría ser detenida por su habilidad?

"Laaa~"

"..."

Si, sigue durmiendo. Ahora que lo pienso, ¿cómo y por qué está aquí?

Los slakoth son conocidos por su poca movilidad y alimentación, así que...Ahhh, anoche fue una noche extremadamente fría,

Supongo que la calidez de la carpa fue lo suficientemente tentadora para que uno de los pokémon más vagos y que menos se movían en su vida, decidiera abandonar el lugar donde reside e ingresara a una carpa humana.

Decidí dejar al pokémon sobre mi cama y comencé a prepararme para empezar el día.

Mientras la comida estaba en el fuego, empecé a guardar las demás cosas en mi mochila. Desarme la carpa, guarde mi 'cama' y el resto de los objetos.

Y tras eso, vi que el slakoth seguía durmiendo.

Mudkip, zigzagoon y ralts estaban jugando o ayudando, no importa que estaban haciendo, pero mi punto es que no lo hacían en silencio. Intencional o no, todos hacían ruido, y el bosque tampoco era muy silencioso. Pero tras todo eso, mi slakoth seguía dormido.

"Que buena vida la de este chico, ni siquiera se inmuta por el ruido..."

Pero, ahora que lo pienso, ¿acaso sabrá que fue capturado?

"Laaa~"

"..."

No, parece que no lo sabe, o quizás no le importa. Bueno, no importa, ahora es parte de mi equipo. Tampoco es que lo trate mal en un futuro.

"Pero ahora que lo veo... Envidio su vida despreocupada...Ahhh~ Algunos tienen suerte y otros no"

Tras decir eso, sirvo la comida a los pokémon que me acompañan y reviso a los que están en el minimundo.

Viendo que todo está bien, decido empezar a comer.

"Laaa~"

Ahora que lo pienso, los slakoth no comen mucho por día. Una baya les puede durar dos días, o una semana si comen poco.

"Laaa~"

"..."

Aunque su segunda y última etapa tienen un poder demencial, no creo que deba entrenar a este pequeño. Quiero que sea el vago que yo no puedo ser.