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Capítulo 93: Mientras tanto el consejo estudiantil…

Mientras Satou estaba volviendo a caer en una crisis existencial dentro de la prisión, las mujeres relacionadas con el hombre gordo estaban haciendo el mejor esfuerzo para que Satou encontrara una agradable sorpresa al volver.

En la academia el consejo estudiantil estaba ocupado lidiando con diferentes problemas que iban desde discusiones entre estudiantes, quejas por algunos pervertidos que no tenían autocontrol, profesores que no tenían interés en la salud emocional de los estudiantes y otros diversos problemas que influyen negativamente en el entorno escolar.

Ya que la academia era demasiado grande para ser supervisada por un solo consejo estudiantil, se habían formado 5 ramas encargadas de diferentes salones de clases y clubes.

Debido a que la academia mezclaba a estudiantes de diversos estatus sociales y económicos, era normal que a veces surgieran conflictos por las diferentes ideologías sociales y múltiples perspectivas sobre los méritos.

Así como algunos estudiantes con dinero se veían a sí mismos como personas superiores debido al prestigio de sus familias, también había casos donde estudiantes talentosos de familias humildes actuaban como personas engreídas al pensar que la gente rica eran idiotas que solo podían triunfar por el dinero de sus padres y no por esfuerzo propio.

Sin importar el estatus, había personas desagradables en cualquier grupo, pero de igual forma, había personas que realmente querían hacer un mejor entorno para sus compañeros independientemente de los privilegios personales.

Kaguya Shimoniya era un ejemplo de esto.

La joven señorita de una familia prestigiosa, su belleza era paralelo a su intelecto y debido a su frialdad y profesionalismo, ella era la mujer ideal de muchos estudiantes masculinos.

Algunos de los estudiantes que buscaban la atención Kaguya provenían de familias importantes los cuales buscaban establecer conexiones con la familia Shinomiya o incluso había quienes deseaban a Kaguya para tenerla como un trofeo ya que ser la pareja de la señorita Shinomiya podría ser una señal de prestigio.

Si bien Kaguya tenía muchas características de una niña rica, lo que más la hacía atractiva era el hecho de que a pesar de su actitud fría y distante, ella nunca despreciaba a las personas de bajo estatus lo que era una mejor muestra de modales a comparación de otros adolescentes adinerados que miraban con desprecio a los estudiantes con menos dinero.

Debido a todas estas características, no era extraño que algunos estudiantes intentaran cortejar a Kaguya a pesar de los rumores sobre la supuesta relación entre Kaguya Shinomiya y el presidente del consejo estudiantil, Miyuki Shirogane.

Ahora Kaguya estaba en la sala de la rama del consejo estudiantil donde ella ejercía sus deberes.

Ella permanencia de pie junto a Miyuki actuando como una secretaria pues su cargo tenía menor autoridad que el chico rubio.

Miyuki estaba sentado tranquilamente mientras miraba unos documentos que le fueron entregados por un chico de cabello anaranjado.

Frente a Miyuki estaba un chico de cabello naranja que sonreía amablemente mientras esperaba a que Miyuki revisara los documentos.

La mirada del chico se dirigió a Kaguya mientras su rostro era una perfecta expresión de amabilidad. – "Shinomiya-san, ¿Por qué no toma asiento? Es una grosería hacer que una dama espere de pie"

"Agradezco la preocupación de Asano-san, pero estoy bien así" – Kaguya respondió con frialdad sin mostrar el verdadero disgusto que ella estaba sintiendo.

El chico era Gakushu Asano, el hijo del subdirector que continuamente buscaba tomar el control de la academia.

Gakushu Asano era uno de los chicos más populares en todo el colegio ya que era un prodigio en deportes, sus calificaciones siempre estaban entre los 3 mejores estudiantes, físicamente era muy atractivo y su actitud era digna de un amable caballero de cuento de hadas.

A pesar de su imagen perfecta, Kaguya era consciente de la verdadera naturaleza de Gakushu, un narcisista autoritario que mira con desprecio a las personas menos inteligentes que él mismo.

El elitismo de Gakushu se basaba en el intelecto de las personas donde cada persona ligeramente menos inteligente que él era un animal analfabeto que no valía la pena mirar.

Desde que Satou fue enviado a prisión, Gakushu ha estado haciendo planes para acercarse a Kaguya y hacerla su propiedad, no en un sentido romántico, sino como un trofeo.

Para Gakushu nadie era digno de ser su igual y Kaguya era mínimamente decente de ser mostrada como un trofeo que demostraba su propia superioridad.

A comparación de otros adolescentes y la mayoría de los adultos, Kaguya era más inteligente en aspectos teóricos, pero en temas humanos ella podía ser bastante ingenua pues su conocimiento del comportamiento humano se basaba en libros.

Afortunadamente para ella, su nueva familia la apoyaba constantemente haciendo que Kaguya dejara de ser un inocente conejo para convertirse en un zorro astuto.

Kaguya mantuvo la calma mientras ignoraba los sutiles y profesionales intentos de seducción por parte de Gakushu mientras Miyuki seguía comprobando los documentos.

"No creo que esto se pueda aprobar" – Miyuki dejó de leer y respondió con calma. – "La creación de grupos aislados para los estudiantes con menor desempeño solo creará división entre los estudiantes, además, el presupuesto necesario para crear salones de marginados solo creará perdidas para la academia"

El documento era un plan de acción para crear aulas de clases separadas del resto de edificios escolares.

Estas aulas tendrían las mínimas necesidades para los estudiantes en entornos aislados y serían usadas por los estudiantes con peores calificaciones de cada grado escolar.

La idea era convertir a los estudiantes menos destacados en animales de circo que serían el objetivo de las burlas y desprecio de los demás estudiantes lo que motivaría a los estudiantes a esforzarse con tal de no ser convertidos en el siguiente objeto de burlas.

En la academia ya había conflictos de bullying debido a las diferencias económicas e intelectuales, pero este proyecto hacía que ese problema se convirtiera en una competencia donde los perdedores serían sometidos a humillación pública.

El documento estaba respaldado por artículos científicos e investigaciones de instituciones de prestigio que hablaban sobre el enfoque de la motivación por medio de la exclusión de un grupo marginado y el fortalecimiento de los grupos elitistas.

A pesar del respaldo teórico que mostraba esta idea como un proyecto viable, atacar continuamente el autoestima de los adolescentes solo aumentaba los riesgos de suicidios entre estudiantes, pero parecía que para algunas personas eso era un problema insignificante.

"No hay preocupaciones sobre el presupuesto" – Gakushu mantuvo una sonrisa amable. – "Al recortar el presupuesto de cada club con actividades meramente recreativas podemos usar los fondos en actividades más productivas, cosas como el club de manga, club de juegos y otros grupos sin aportaciones académicas son solo una pérdida de tiempo"

"Eso no será posible" – Miyuki siguió respondiendo con calma lo que hizo enojar a Gakushu. – "Según el reglamento cada estudiante tiene el derecho de formar un club siempre que dicho club tenga un profesor como supervisor, un mínimo de 3 integrantes y hagan un informe mensual sobre sus actividades que justifiquen los fondos recibidos, cualquier cambio en las reglas de la academia debe ser discutida con el director de la academia ya que es la persona con la última palabra"

Esta fue una regla establecida por el anterior director pedófilo, de esa forma el director tendría la autoridad suficiente para modificar los uniformes femeninos o tener mayores oportunidades de acostarse con chicas que tuvieran malas calificaciones y buscaran la salida fácil.

Satou no cambió esa regla ya que el poder de cada rama del consejo estudiantil se había salido de control y solo esta regla aseguraba que él seguía siendo el dueño de la academia, aunque por el tema de la prisión, la actual directora era Anida.

Gakushu mantuvo su sonrisa. – "Tienes razón, sin embargo, si todas las ramas de consejo estudiantil hablamos con la directora temporal entonces ella no podrá ignorar nuestra voz pues es el deber de un director mirar por el bienestar de los estudiantes…"

El Club de Caballeros no esperaban que Satou dejara todas sus pertenencias a su maid personal pero tampoco le dieron mucha importancia.

Anida había sido un regalo de ellos por lo que conocían los antecedentes de la mujer.

Ella no completó la escuela primaria, llegó de un país sin desarrollo, fue huérfana, se embarazó al llegar a corea y posteriormente fue prostituida hasta llegar a Japón.

Sin importar como se viera, Anida era solo un juguete por lo que tenían la confianza de ella colapsaría ante el estrés.

Incluso si los aliados comerciales de Satou apoyaban a Anida, nadie tomó enserio a la maid cuyo único talento era complacer a los hombres, incluso tenían la teoría de que Anida era la mascota que Satou compartía con otros hombres por lo que prepararon planes para seducir a la mujer.

Gakushu sacó otro documento y se puso de pie para poner el documento frente a Miyuki.

El documento era una solicitud para aprobar el proyecto de grupos marginados.

En la parte inferior del documento estaban cinco espacios para las firmas de cada presidente de las cinco ramas del consejo.

Lo que llamó la atención de Kaguya fue que ya había tres firmas de aprobación, su único consuelo fue que no estaba la firma de Mari, la hija de Satou.

Por otro lado, Kaguya había estado vigilando a los otros consejos estudiantiles con ayuda del sistema de vigilancia actualizado por Lala y ya que ella no había visto ninguna reunión entre Gakushu y los otros presidentes escolares esto solo podía significar que Gakushu había estado negociando con las otras ramas del consejo fuera de la academia lo que no era una buena señal.

Miyuki miró el documento y negó con la cabeza. – "Simplemente no puedo aceptar esto, crear un entorno donde los estudiantes uses a sus compañeros como escalones va en contra de lo que significa un sano entorno escolar por lo que no pienso firmar este acuerdo"

La mente de Kaguya se movió rápidamente y ella dio una ligera mirada de desdén a Miyuki lo que fue notado por Gakushu.

"Ya veo" – Gakushu suspiró y guardó los documentos. – "Es una pena que no podamos coincidir en nuestras ideas"

"Pienso igual" – Miyuki asintió con calma.

"Entonces me retiro" – Gakushu hizo una reverencia, pero antes de salir dio una última sonrisa a Kaguya. – "Si la señorita Shinomiya esta de acuerdo, me gustaría ofrecer una transferencia a la rama central del consejo estudiantil… Claro, no es necesaria una respuesta inmediata"

Gakushu finalmente salió de la habitación haciendo que Kaguya suspirara.

"Los niños deberían actuar como niños, siento que estoy viendo un drama de política y eso me aburre… Sería más emocionante una discusión con insultos, actitudes arrogantes y estupideces aleatorias… Oh, la juventud se está marchitando…"

La boca de Kaguya tembló al escuchar la voz que apareció detrás de ella.

"Lamento no ser capaz de ofrecer un mayor entretenimiento" – El cuerpo se Kaguya se puso ligeramente rígido al sentir una suave mano acariciando su cabello.

"Esta bien, nunca tuve expectativas de un grupo de niños, solo estoy matando el tiempo…" – Kiara comenzó a acariciar la cabeza de Kaguya tratándola como un perrito o una muñeca de trapo. – "Todo es tan aburrido… Me estoy aburriendo demasiado…"

Kaguya logró mantener la calma a pesar de que las acciones maternales de la mujer solo llenaban su corazón con ansiedad.

Desde el día en que Satou fue enviado a prisión todas las mujeres habían afrontado la soledad de diferentes maneras.

La mayoría de las mujeres se enfocaron en trabajar, estudiar y madurar para darle una grata sorpresa al hombre gordo.

Otras mujeres mantuvieron el mismo ritmo de vida sin cambios en sus actitudes.

Entre todas las mujeres, la más extraña fue Kiara.

Antes de ir a prisión, Satou había hablado en privado con Kiara.

Nadie sabía lo que ocurrió o lo que Satou dijo a Kiara, pero durante dos días la temible y cruel mujer se encerró en su habitación negándose a comer o hablar.

Cuando Kiara salió de su habitación, ella simplemente vagaba por la mansión y la academia mientras repetía que estaba aburrida.

Hasta ahora Kiara no había dañado a nadie, pero Enma había advertido que en este momento Kiara era totalmente impredecible y a pesar de haberla conocido durante un largo tiempo, la bruja no tenía idea de si Kiara estaba enojada, deprimida, aburrida o que era lo que realmente estaba en la mente de la peligrosa mujer.

Mientras Kiara bostezaba de aburrimiento, Miyuki mantuvo la mirada fija en el escritorio con mejillas levemente sonrojadas y expresión extraña.

Miyuki se volvió el ayudante del hombre gordo y eso le permitió saber algunos secretos sobre las mujeres alrededor de Satou.

Debido a los contratos mágicos puestos por Enma, el chico no podía revelar esta información, aunque lo cierto es que no planeaba traicionar al gordo pues haber visto a su propia hermana y a su mujer amada siendo fornicadas por el hombre gordo había dañado severamente la mente del chico.

Miyuki ahora se sentiría sexualmente excitado cada vez que estaba cerca de una de las mujeres de Satou, no porque ellas fueran mujeres excepcionalmente hermosas, sino porque eso le recordaba la humillante escena donde fue obligado a ver a las mujeres que mas amaba siendo penetradas por el trozo de carne del hombre gordo.

Cada noche el chico se masturbaría en su habitación mientras recordaba la sensación de humillación y desesperación lo que lo hacía sentir totalmente excitado.

Miyuki se había vuelto un total masoquista con fetiche de netorare, él ni siquiera se atrevía a mirar con Kaguya a los ojos y había adoptado una actitud totalmente sumisa similar a un esclavo sin voluntad.

Miyuki era capaz de mantener una actitud tranquila y profesional frente a otras personas, pero en privado, siempre miraba al suelo o a una esquina vacía mientras su mente se perdía en fantasías donde él era obligado a mirar a su propia hermana lamiendo el pilar de Satou.

Kaguya estaba un poco deprimida con esto ya que incluso si ella ya no estaba enamorada de Miyuki, ella aun tenía un profundo respeto por el chico inteligente y trabajador.

Tristemente ese respeto había muerto y fue enterrado en la misma tumba donde descansaban la esperanza y sueños de Satou.

"¿Puedo ayudarte en algo?" – Kaguya estaba cada vez mas incomoda con el silencio de Kiara por lo que intentó tener una conversación.

"No lo sé… ¿Puedes ayudarme?" – Kiara volvió a bostezar.

Kaguya ahora estaba asustada y preocupada.

Le asustaba imaginar lo que podría dañar tan severamente el estado de animo de un monstruo tan cruel.

Le preocupaba que Kiara estuviera pasando un mal momento ya que incluso si era criatura apocalíptica, ella seguía siendo una de las mujeres que Satou amaba.

"Olvídalo" – Kiara suspiró. – "Voy a dar un paseo… Oh, es cierto, encontré esto…"

Kiara movió la mano y de una grieta espacial cayó un chico sin extremidades ni ojos.

El chico se retorcía como un gusano cubierto en sal, pero por más que movía su cuerpo y boca, no era capaz de emitir cualquier sonido como si él fuera un video sin volumen.

"Esta cosa tiene una habilidad para manipular el cuerpo de las mujeres… Intentó usar es habilidad con Lala así que lo capturé antes de que esa chica torpe se diera cuenta de que algo ocurrió…" – Kiara habló con extremo aburrimiento lo que estaba preocupando a Kaguya ya que ella sabía que para Kiara lo mas divertido era el dolor humano por lo que ella debería estar riendo.

Kaguya respiró profundo para no vomitar. Ver a un humano mutilado como un pedazo de carne hizo que su estómago se revolviera.

"Ya veo" – Kaguya logró contener el vomito y habló con calma. – "Gracias por tu esfuerzo, me aseguraré de enviar un mensaje a Satou para que sepa lo mucho que te esfuerzas para protegernos, especialmente a Lala"

Kaguya esperó por una respuesta, pero después de un par de minutos ella se dio la vuelta notando que Kiara ya había desaparecido.

Las piernas de Kaguya temblaron por lo que cayó al suelo mientras jadeaba.

La actitud burlona y cruel de Kiara era intimidante, pero su nuevo extraño comportamiento era mucho mas aterrador por lo impredecible que era.

Kiara antes era un gato cruel que jugaba se divertía cortando la piel de un ratón asustado, pero ahora Kiara era un volcán aparentemente dormido que podía explotar en cualquier momento.

Kaguya decidió que tenía que hablar seriamente con las mujeres de la mansión sobre Kiara, pero antes que nada ella debía contactar a Asagi para ver que hacer con el chico sin extremidades.

Kaguya ignoró a Miyuki quien prácticamente jadeaba como un animal en celo y sacó su celular para marcar al número de Asagi, pero al no recibir respuesta despues de varios intentos, tuvo que llamar a Enma.

"¿Oh? ¿La academia fue invadida por enemigos? Porque estoy ocupada y si no es una emergencia voy a tener que darte un pequeño castigo~"– La voz burlona de Enma hizo que Kaguya hiciera una mueca de amargura.

Kaguya suspiró. – "Kiara capturó a un chico con habilidades para manipular cuerpos femeninos, el chico intentó usar esa habilidad con Lala"

"… ¡Maldita sea!" – El grito de Enma sorprendió a Kaguya. – "¡Es el cuarto idiota con habilidades sexuales que aparece esta semana! ¡Y hoy es martes!... ¡¿Acaso un imbécil esta otorgando habilidades sexuales a perdedores vírgenes que son víctimas de bullying?!... Espera, parece que eso es lo que está pasando… Voy para allá, no te muevas"

Kaguya se quedó atónita cuando la llamada fue cortada, ella no había escuchado sobre chicos con habilidades sexuales causando problemas.

Un portal se abrió junto a Kaguya haciendo que Enma entrara a la habitación.

"… Que desagradable" – Enma sonrió con asco al ver que Miyuki parecía estar perdido en fantasías masoquistas. – "Mi amado Maestro es realmente sorprendente por lograr convertir a esta basura en una basura mucho mas desagradable… Oh, Maestro~ Fufufu"

Kaguya decidió permanecer en silencio.

Enma se acercó al chico sin extremidades y frunció el ceño. – "Necesitaré analizar su alma, pero creo que el origen de su habilidad es el mismo que las otras basuras"

Nuevamente Kaguya decidió permanecer en silencio.

"Ah, tengo mucho trabajo" – Enma suspiró y luego sonrió. – "Bueno, el Maestro tendrá que recompensarme, fufufu~"

Cadenas mágicas envolvieron al chico y lo llevaron a uno de los lugares más horribles del mundo, el laboratorio de Enma.

"Bueno, nos vemos en la cena" – Enma palmeó el hombro de Kaguya y se acercó al portal para volver a su laboratorio, ella tenía demasiado trabajo por lo que no tenía tiempo para burlarse de la patética situación de Miyuki.

Antes de que Enma pudiera irse, Kaguya logró reunir el valor suficiente para hablar con la bruja psicópata.

"Quiero saber algo…" – Kaguya no se atrevió a ver los ojos de Enma por lo que miró al suelo. – "¿Qué ocurre con Kiara?... No sé porque, pero recientemente siento al estar cerca de ella mi vida está en peligro…"

"¿Oh?" – Enma miró a la chica con curiosidad. – "Tienes buenos instintos… Efectivamente, esa anciana no esta muy estable, pero no te preocupes, mi Maestro le dio la orden de no dañar a personas inocentes ni a los miembros de la mansión así que estarás bien~"

Kaguya suspiró con alivio, aunque luego frunció el ceño. – "¿Y qué pasa si busca dañar a grandes grupos de personas malvadas? ¿Eso no llamaría la atención de grupos peligrosos?"

"Mmmm…" – Enma lo pensó por un momento. – "No lo creo, ella es una anciana y no es una idiota así que no hará algo estúpido, a lo mucho irá a mi laboratorio para maltratar algunas ratas de laboratorio~"

Aunque Kaguya odiaba a las personas que lastimaban a los inocentes solo por placer, la sola idea de que esas supuestas ratas de laboratorio en realidad fueran humanos le causaba un inmenso malestar pues aun conservaba sus valores morales y amabilidad.

"En fin, no lo pienses demasiado" – Enma se encogió de hombros. – "Veré que la anciana no se vuelva loca, pero ella ha vivido un largo tiempo y puede aguantar toda clase de sufrimiento así que no habrá problemas~"

Kaguya suspiró y asintió, ella no tenía la capacidad de discutir con ninguna de las dos mujeres, solo podía intentar hablar con Asagi lo que era difícil ya que la mujer Taimanin pasaba la mayor parte de su tiempo en el laboratorio de Enma.

Kaguya solo podía rezar para que Satou volviera y ayudara a estabilizar la situación.

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Nota del Autor:

Lo siento mucho por la ausencia de esta novela, realmente me cuesta encontrar inspiración para esta novela a diferencia de mi otra novela la cual se alimente de mis divagaciones.

Para suerte de ustedes, y desgracia para mí, comencé mi periodo de servicio social por lo que estoy visitando una comunidad marginada para dar atención psicología.

Las cosas que escucho y veo sin duda serán inspiración para esta novela… La vida es deprimente.

En fin, un fuerte abrazo y gracias por seguir leyendo mi trabajo. Estoy sinceramente agradecido con ustedes por mostrar interés en lo que escribo.

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