Capítulo 5: La reunión del fragmentado.

Silencio es lo que guardé mientras Natalia y Lorena hablaban yo solo mantenía el silencio ya que quería ahogar las preguntas que se venían en mí cabeza no quería pensar, ahora entiendo por qué un día mí abuela entre dicho y dicho dijo "El ignorante es la persona más feliz". La vuelta a mí casa fue silenciosa Lorena apenas me veía de reojo al parecer me estaba dando espacio cosa que agradecía, pero mi mente no me daba respiro cada vez aquel muro mental se empezaba a agrietar las preguntas trataban de entrar en mí, querían hacerme sufrir, pero yo no quiero, no me importa si la verdad es mejor que la mentira, prefiero vivir en una mentira antes de vivir una cruda realidad, no me aterra la verdad, me aterra que haré con ella.

–Lorena frenó en seco el auto sacándome de mis minuciosos pensamientos– llegamos...Noah...emm... –esta me miró a los ojos para luego parecía tragar lo que iba a decir – hasta mañana... –ella fingió una sonrisa para luego quitar el seguro a las puertas esperando que baje.

–Ella realmente se estaba esforzando por lo que me acerque a ella y choque suavemente nuestras mejillas en señal de un saludo de despedida y leve afecto, tras eso salí del auto e hice también una sonrisa falsa– Hasta mañana...

Lorena esta vez sonrió de forma sincera, se alegró por el poco afecto que le ofrecí, no entiendo por qué se alegra por algo tan tonto. Lorena arranco el auto yéndose del lugar dejándome a mí solo, no me quedo otra más que entrar al edificio e ir hacia mí apartamento ya no aguantaba más los pensamientos, mi cabeza me dolía por tanta negación y ni siquiera quería comer solo quería dormir. Apenas llegar a mí puerta la abrí para luego cerrarla con llave, estaba cansado por lo que solo me desprendí de mí mochila mire la hora y eran las 8:30 PM, era temprano, sin embargo, el cansancio mental era mucho así que fui derecho a mí habitación, me saque mí calzado y me tiré a la cama cerré mis ojos con fuerza queriendo viajar a aquel lugar feliz solo quería dormir y así pude...

Una leve voz susurro en mí oído derecho. "Ya puedo verte" aquella frase me levantó sin embargo no estaba en mí cama, estaba en el suelo mirando al techo en el cuál había una luz roja que me daba a mí, el lugar era cálido, sin razón alguna me sentía con libertad, el dolor de cabeza que me agobiaba antes de dormir había desaparecido como una moneda en el basto mar.

–¿Dónde mierda estoy...? –Me pregunté a mí mismo mientras miraba aquel foco rojo que daba su luz sobre mí. Levanté mí cuerpo, este se sentía liviano sin embargo apenas pude mirar hacia adelante los vi, eran tres personas trajeadas cada una con una máscara, uno estaba sentado a mí derecha lo apuntaba una luz blanca, su traje al igual que su careta eran negros y de forma curiosa está era la de un lobo por otro lado a mí izquierda había un hombre de traje blanco al igual que su careta está de forma curiosa era la de un león y una luz negra lo alumbraba de forma tenue. el último estaba frente a mí de misma forma que los otros tenían un traje sin embargo este era gris y llevaba una máscara de paloma que se dividía en dos, una mitad negra y la otra blanca. Yo estaba confundido hasta que una voz suave pero madura vino de la paloma.

–Confundido cómo siempre Joven amo... pero ¿no te sientes diferente?  Antes de que preguntes estás en tu mente tú estás dentro de ti es algo confuso pero estos dos –extendió sus brazos hacia ambos lados apuntando a los otros sujetos – fueron creados hace mucho y tienen mucho para decir más que para escuchar.

–¡Si! Estoy harto de tu puta cobardía todo el día pensando si podes o no, ¡así perdiste a la musa!  –dijo el lobo con Palabras cubiertas de furia y molestia mientras se exaltaba queriendo levantarse de su asiento sin embargo este parecía retenerle– Si vas andar de puta mejor! –el lobo metió su mano derecha en la parte izquierda del interior de su saco sacando una navaja suiza luego la tiro y dijo– Acaba con tu "sufrimiento" y déjame en paz!

–Discrepo –dijo el león girando levemente su cabeza hacia mí para luego decir muchísimo más calmado que el lobo – Tu vida aún tiene valor por lo que mejor no sigas los pasos del lobo, sería mejor que te alejes un poco de los demás, ¿qué tal si no vuelves a aquella escuela tan espantosa?

–Cierra la boca lame culo de mierda! –El lobo arremetió con furia frente a las palabras del león – si el no sale nunca va a cumplir lo que quiere hacer! ¡Deja de hacerlo un puto ratón asustado!

–Tu furia no es más que contra ti, tu solo das respuestas inaceptables, tu mera existencia provoca la mayoría de los problemas en el amo, tu no deberías de existir –El león respondió con seriedad y a la vez calma, sus palabras parecían tener sabiduría, pero si se escrudiñaban mostraría que son ataques no muy diferentes a los que lanza el lobo.

–¿¡Y TU!? SOLO LLENAS DE MIEDO AL AMO TU EXISTENCIA HACE SU VIDA MISERABLE, SI TU NO EXISTIERAS EL ESTARIA MEJOR. –El lobo lanzaba un ataque igual al del León parecían odiarse con todo su ser, no podía asimilarlo con claridad mi mente parecía estar en otro lugar para poder resolver lo que estaba mirando–

Paren. –Dijo la paloma deteniendo la  discusión que pudieron haber tenido aquellos dos – Es turno del amo, puedes hacer solo tres preguntas para luego yo terminar con este encuentro.

–Tremendamente confundido Me levante del suelo tratando de asimilar todo lo que estaba pasando – Quienes…son?

–la paloma sin dejarme hacer otra pregunta dijo – Somos tú.

–Si son parte de mí por qué mierda me molestan? –pregunte mirándolos a los tres, esto era una pesadilla más que seguro por lo que ya no me lo estaba tomando enserio. Solté una leve carcajada la cuál culminó al escuchar la respuesta de aquella maldita paloma –

–Estas triturado y no haces nada, necesitamos sanar.

–Frente sus palabras guardé silencio "triturado" así me llamo Natalia mí mente realmente me estaba hablando? – Esto es mentira...

–No lo es, tus tres preguntas concluyeron así que haré las mías ... –cuando quise hablar mí voz no se escuchó, yo no había hecho una pregunta que mierda con este tipo– ¿Quién es tu padre? ¿Cambiarás en nuestro próximo encuentro? Y... ¿Sabes quién sos realmente? Sin más dilación...

La paloma y  el lobo me apuntaron como si sus manos tuvieran un arma mientras que el león solo apartaba su mirada, estos "dispararon" su "arma" y fue cuando desperté mí cuerpo sudando mí corazón palpitando con fuerza era una taquicardia mientras que sentía como las paredes me observaban trate de levantarme de la cama pero las piernas no me respondían a causa del miedo solo me quedaba ponerme en posición fetal y esperar a que todo pase, ya conocía está sensación, es un ataque de pánico enseguida pude saberlo ya que el miedo intenso con las fuertes pulsaciones solo aparecieron en el principio de mí nueva vida cuando estaba solo y las sombras solo eran testigos de mí pesar, mis lágrimas brotaron de mis ojos mientras trataba de tranquilizarme pero la ansiedad del momento era intensa solo me quedaba eso llorar y tratar de no morir como el inservible que me volví ¿Quién soy? Esa pregunta retumba en mi mente mientras mis piernas temblaban y mi pecho se movía de forma frenética el aire parecía cortarse mientras cambiaba levemente de posición colocándome boca arriba ¿El aire se cortaba por mí euforia? O ¿Por la cantidad de cosas de las que me arrepiento? Mil pensamientos pasan por mí mente, pero estos iban en caída hasta que uno frenó esa tortura en mí triturada mente "Debes vivir" aquellas palabras se repetían en mi mente poco a poco el aire comenzaba a ser menos denso mí corazón iba tomando su ritmo con calma y yo cerraba mis ojos cargados de lágrimas.

_Viviré.

Dije tratando de responderle a mis pensamientos, mis dudas estaban resultas con una palabra y no podía dar vuelta atrás, soy insuficiente, pero lo haré fue lo último que pude recordar que dije para después quedar profundamente dormido, al otro día no fui a la escuela y también le avisé a Lorena que avise que no iré en una semana, necesitaba pensar necesitaba soledad.