webnovel

CAPÍTULO 182- Kei vs Akane. Parte 1.

CAPÍTULO 182- Kei vs Akane. Parte 1.

(Pov- Zei.)

—Z-Zei… Zei… No mueras, por favor. ¡No quiero perderte!

—… ¿No estás exagerando?

Esa chica me dejó el cuerpo adolorido, pero no es para tanto. Estaré bien en un par de minutos.

—Estoy bien, Dianka. Gracias por preocuparte por mí.

—P-pero… F-Fetoca me dijo que estabas agonizando, por eso vine rápido a tu casa.

—… Fetoca, ¿por qué mentiste?

—Fufu. Solo quería saber si es capaz de llorar por ti. Y sí, está llorando. Conseguiste una buena chica, Zei.

—Ah… Disculpa, Dianka, Fetoca exageró. Estoy bien.

Me levanté de mi cama y estiré los brazos.

—Por primera vez en mucho tiempo, me derrotaron.

—¿H-hay alguien más fuerte que tú?

—En términos de poder mágico y fuerza, soy muy superior… Pero esa chica… Esa chica es más débil que yo, pero es muy rápida. No podía esquivar sus ataques y tampoco podía golpearla… Es increíble.

Me dan escalofríos con solo recordarla.

Recordé cuando yo era un chico débil y todos me golpeaban.

Nem… Vaya… Realmente eres increíble.

Quiero volver a verte y ayudarte. Kei te está manipulando con su habilidad. Yo te salvaré. Tú eres una persona buena, de eso estoy seguro. Te salvaré y serás libre.

Aparte, si consigo tu amistad, podrías entrenarme y así me volveré más poderoso.

Debo derrotar a Patle... Debo ser más poderoso.

Nem, con tu ayuda, lo lograré... Pero debo derrotar a Kei para liberarte.

Me tomará tiempo, pero estoy seguro de que podré.

—Dianka, ¿quieres ir al cine conmigo? Necesito relajarme.

—¡Por supuesto!

Ella me abrazó y me dio un beso en los labios.

—¡Me alegro tanto que estés bien!

—Gracias... Muchas gracias.

Le acaricié la mejilla y le di un beso en los labios.

—Gracias por preocuparte por mí.

Nem estaba comiendo un pedazo de carne, mientras bebía jugo de naranja.

Estaba muy tranquila y feliz, pues tenía mucha comida para ella sola.

Ella sintió un escalofrío y levantó la mirada.

El cielo se estaba nublando muy rápidamente.

Nubes negras comenzaron a cubrir el cielo y se dio cuenta de que eso no era para nada normal.

Se dirigió a la playa corriendo y encontró a sus amigas observando el cielo.

—Drin...

—Sí, lo sé, coneja de mierda... Este es el poder de Akane.

—Sí, lo es... Espera... ¡¿A quién llamas coneja de mierda, idiota?!

—K-Kei sigue sin responder.- Dijo Terkiana.

—La comunicación de pensamientos está fallando... Kei está en peligro.- Dijo Mio.

—Drin, ¿conoces alguna manera de bajar al fondo del mar?- Dijo Eris.

—No... Las Sirenas son las únicas que tienen la magia adecuada para bajar... Con magia, podemos proteger nuestro cuerpo de la presión, pero si queremos llegar hasta el fondo del mar, necesitaremos de mucho, mucho... Mucho poder mágico... Y no lo tenemos.

—Kei... Kei está en peligro y no podemos hacer nada.

—Cariño...

Drin juntó sus manos y cerró los ojos.

—Por favor, no mueras.

(Pov- Kei.)

(20 minutos antes.)

¡Delicioso! ¡Los pasteles de este lugar son tan deliciosos!

—¡Me llevaré todos, ponga la cuenta en nombre de la Reina!

—Kei...

Oh, ya llegó.

Volteé a ver a la Reina y me acerqué a ella.

—Hola de nuevo.

Levanté la mirada... Wow... Sus pechos son realmente grandes.. Ah, estar en la pubertad me está poniendo caliente.

—Quiero disculparme por...

—Bla, bla, bla. Ya las perdoné, lo demás no me interesa. Cuénteme sobre el demonio. ¿Qué trato tenían los demonios con ustedes?

—Hace poco tiempo, un demonio muy poderoso encontró nuestro Reino... Y nos conquistó... No somos fuertes, así que nos rendimos cuando demostró su gran poder... A cambio de perdonar nuestras vidas, debíamos ayudarle a recolectar rocas mágicas del fondo del mar... Cada día, nos turnamos para excavar y buscar rocas... Estábamos haciendo un buen trabajo, no hubo ningún problema... Pero un día, nos pidió 5 pequeñas niñas Sirenas... Cada semana, regresaba por más niñas... No teníamos otra opción, debíamos obedecer... No sabemos qué hace con las niñas, pero... estoy segura de que no es nada bonito.

Una Sirena comenzó a llorar detrás de mí y volteé a verla... Una empleada de este restaurante está llorando.

—Su hija fue secuestrada por ese demonio hace dos semanas.

... Perdió a su hija... Verla llorar me rompe el corazón.

—Secuestra... adorables niñas Sirenas... P-por favor, dime que el demonio no se llama Akane o Grifio.

—S-se llama... Akane.

—... N-no...

No pude evitar llorar y me dieron ganas de vomitar.

—N-no...

Varias niñas Sirenas me están viendo... Niñas inocentes... N-no.

—¿P-por qué...? ¡Maldita sea!

—¿K-Kei?

—¡Kei, tranquilo!

Nirfei creció de tamaño y me abrazó por la espalda.

—¡Si tan solo hubiera llegado antes! ¡¡Maldita sea!!

—¡No es tu culpa! ¡No puedes culparte! ¡No tienes nada que ver!

—¡Pero yo...!

Nirfei me dio la vuelta y puso sus manos sobre mis mejillas.

—¡Kei!

Ella acercó demasiado su rostro al mío.

—Tú no lo sabes todo. Tú no sabías que ellas estaban en peligro. Tú no puedes resolver los problemas de todos.

—P-pero...

—Todos los días, en todo el mundo, hay asesinatos, robos, violaciones, y un largo etcétera. Kei, eres un chico bueno, pero debes ser realista. Tú no puedes resolver todos los problemas. Sí, secuestraron a niñas pequeñas, pero no puedes culparte por no salvarlas, porque no es tu culpa, no es tu responsabilidad salvarlas, y tú no sabías que ellas estaban en peligro.

—... Sí... Lo siento... Perdí el control.

—A mí también me pone triste lo que les pasó, pero ya no hay nada que podamos hacer por esas niñas.

—Sí... Lo sé.

Ella me limpió las lágrimas y sonrió.

—Verte llorar es algo lindo de ver. Realmente eres un chico amable.

—... Gracias.

—Disculpa...

La Reina se acercó a nosotros.

—Kei... ¿Qué sabes sobre ese demonio?

—Akane... Ella es actualmente la comandante más débil de la Reina Demonio... Es una científica... Ella investiga cuerpos y experimenta con ellos...

La empleada que perdió a su hija comenzó a llorar más.

—Lo siento... Es muy probable que estén muertas.

No pude controlar más mi furia y golpeé la pared, destruyendo una gran parte de la pared.

—Akane está loca... Maldita sea.

—¿E-ella es la más débil?- Dijo Ram.

—Sí.

—E-eso significa que existen demonios más poderosos... Es imposible ganar... Debemos aceptar la derrota...

Le acaricié la cabeza a Ram.

—No pierdas la esperanza. Confía en las héroes... Confía en mí, el héroe Kei.

Puedo revelar mi identidad, puedo confiar en ellas.

—Nirfei, debemos reunirnos con las demás.

—Sí, vamos.

Salimos del restaurante.

—Debemos prepararnos para el ataque de Akane... Oh, es cierto.

La Reina salió del restaurante y me acerqué a ella.

—¿Cuándo vendrá Akane otra vez?

—H-hoy.

—... ¿Eh?

¡Maldición!

["Comunicación de pensamiento", activada. ¡Drin, Terkiana, chicas, ¿me escuchan?! ¡Deben esconderse!]

—¡¿En cuánto tiempo?!

—N-no estoy segura...

—M-madre...

—Sí... El agua se está moviendo de manera rara... Ella se acerca.

¿Pueden sentir el movimiento del agua desde aquí...? ¡Genial!

E-espera... ¡¿Ella se está acercando?!

Piensa, piensa, piensa... ¡Piensa en algo, Kei!

Las chicas no contestan... Ni siquiera Drin... Mi habilidad está fallando...

Si me voy, Akane se dará cuenta de que las Sirenas fallaron y matará a más Sirenas.

Pero no puedo quedarme, soy débil, no seré capaz de derrotar a Akane... Espera...

Drin me dijo que Akane sería 3 veces más fuerte que yo... Pero, si uso mi [Espada Dragón], ella será solo dos veces más fuerte que yo.

["Teletransportación" imposible de usar.]

No puedo escapar... Debo hacerlo.

—¡No podemos quedarnos aquí! ¡No ayudaré a alguien que intentó matarme!

Cargué en mis brazos a Nirfei y me alejé corriendo.

—¡No las salvaré!

—¿Kei?

Lo siento, Ram... Lo siento, Reina... Esto es necesario.

5 minutos después de que Kei se fuera, Akane llegó a la ciudad y las Sirenas se arrodillaron ante ella.

—¿Y el héroe Kei? ¿Consiguieron su alma?

—P-pues... L-lo que pasa es que...

Akane puso su pie sobre la cabeza de la Reina.

—¿Por qué la Mazmorra falsa está destruida? ¿Kei escapó?

—... S-sí...

Ella pateó la cara de la Reina y ella cayó al suelo.

—Inútiles.

Comenzó a patear a la Reina en el suelo.

—¡¿No pudieron seguir un sencillo plan, idiotas?!

—¡Madre!

—¡Cállate! ¡¿No ves que trato de matar a tu madre?!

Akane intentó golpear a Ram, pero una Sirena se interpuso en su camino y detuvo el puño de Akane con su mano derecha.

—Oye, oye, oye. ¿Estás enojada con la Reina? Ella no pudo matar a Kei, pero tú tampoco lo has logrado. ¿No estás siendo un poco hipócrita, idiota?

Ram, la Reina y las Sirenas observaron sorprendidas lo que está pasando. Una Sirena se atrevió a detener el puño de Akane y a llamarla idiota.

—¿Crees que tú puedes derrotar a Kei?

—Fufu. Por supuesto que puedo... ¡Es obvio que tú eres el héroe Kei!

Akane la golpeó en la cara y le destruyó la cabeza a la Sirena, pero...

—Fufu. Fallaste.

La cabeza de la Sirena se volvió fuego.

—No soy Kei.

Una Sirena saltó sobre Akane y la golpeó en la cara.

Akane salió volando y un vapor rojo rodeó a la Sirena.

—Yo soy el verdadero.

El vapor desapareció, revelando al verdadero Kei.

—Yo soy el héroe Kei.

Akane se levantó del suelo y observó con furia a Kei.

Él simplemente sonrió y le guiñó un ojo.

—Es un placer volver a verte, idiota.

La otra Sirena se volvió fuego y se convirtió en una espada de fuego.

Kei la tomó con su mano derecha y se acercó hacia Akane caminando tranquilamente.

—En nuestra primera pelea, escapaste. Esta será nuestra segunda pelea. ¿Escaparás también?

—Haha... Hahaha... ¡Hahahahahaha!

Akane chasqueó los dedos.

—Ya estaba preparada para esto.

Pasaron varios segundos y nada pasaba.

—¿Eh? Esos idiotas, les dije que aparecieran cuando...

Kei no la dejó terminar de hablar y activó su modo rojo.

—¿Comenzamos?

—¿Eh?

Kei la atacó con su espada, pero solo le hizo una pequeña herida en su abdomen.

—Vaya, vaya. Eres más resistente de lo que imaginaba.

Akane se alejó inmediatamente de él y chasqueó los dedos.

—¡Idiotas, vengan!

—¿Estás llamando a tus refuerzos? Qué cobarde.

—Tsk. ¿En dónde estarán?

En ese mismo momento, los demonios de Akane estaban muertos y Nem se estaba comiendo uno.

Se quedó sin refuerzos.

Próximo capítulo