CAPÍTULO 20- La furia de Kei.
Mei está completamente herida y una mujer la toma del cuello. La mujer le cortó los brazos y piernas. Tiene heridas por todo su rostro y cuerpo. Hay sangre por todas partes.
Están en la habitación de Mei.
La mujer usa una vestimenta negra y una máscara blanca.
—No eres tan poderosa… Qué desperdicio de tiempo.
—M-mi hermano… Mi hermano te matará.
—¿Te refieres a ese inferior? ¿Él me matará? Qué graciosa eres.
—T-te arrepentirás.- Dijo Mei sonriendo.
—¿Estás sonriendo? Te volviste loca.
Kei, en su forma normal, derriba la puerta y entra a la habitación.
—¡Hermano!
Él está furioso. Sus lágrimas son de frustración y tristeza. " Maldita sea. ¡¿Por qué no llegué a tiempo?! Soy un inútil, un inútil." Pensó eso mientras observaba a Mei.
Se siente culpable por esto.
—¡Deja a mi hermana!
El tiempo se vuelve más lento y Kei se dirige a ella corriendo.
Su espada de fuego aparece en su mano derecha.
—¡¿Por qué mis Golems tardaron tanto en detectarte?! ¡Maldita sea!
Salta, le corta el brazo derecho a la mujer y patea su cabeza.
Ella sale volando y choca contra la pared.
—¡Magia curativa!
Un brillo rojo rodea a Mei y sus heridas se regeneran rápidamente.
En menos de 5 segundos, se recuperó por completo. Sus brazos y piernas regresaron.
—Mei… Vete de aquí… Ella no es normal.
El brazo de la mujer se está regenerando rápidamente.
—Ese poder mágico… No es un demonio… Es un monstruo.
La mujer comienza a reír y se acerca a Kei.
—¡Tú podrás divertirme!
La mujer se dirige a él rápidamente e intenta golpearlo.
Kei esquiva perfectamente su ataque y atraviesa el pecho de la mujer con su espada.
Fuego comienza a rodearla.
Kei quería torturarla por lo que hizo, pero se dio cuenta de que era peligroso mantenerla con vida.
—¡Incineración! ¡Desaparece!
La mujer comienza a gritar del dolor y abraza a Kei con fuerza.
—¡Te llevaré conmigo!
—¡Hermano!
Kei la abraza también.
—¡Terminaré con esto ahora!
El fuego aumenta y Mei se aleja poco a poco de ellos.
—H-hermano…
—¡Estás loco, chico! ¡También morirás!
Los puntos de vida de Kei están bajando rápidamente, pero no le importa.
—¡Desaparece!
Kei la abraza fuertemente y la aplasta.
Se vuelve polvo y el fuego desaparece.
—Eso… estuvo cerca… Resistió mucho tiempo… Y no era un demonio, era un humano… ¿Qué mierda era eso?
Kei vomita sangre y Mei se dirige rápidamente a él. Está llorando, pues pensó que su hermano se estaba sacrificando.
—¡¿Por qué demonios hiciste algo tan peligroso?!
—No te preocupes, protegí mi cuerpo y mi ropa con magia. No me pasó nada y no estoy desnudo… Mei… Lo siento.
Kei abraza fuertemente a su hermana.
—¿Kei?
—Lo siento… Sufriste mucho… No llegué a tiempo… Lo siento, lo siento.
—No digas eso, hermano. Llegaste a tiempo. Gracias a ti, estoy viva.
Sei Molfer entra a la habitación.
—¡¿Qué pasó?!
—¡Protege mejor a tu hija! ¡Casi la matan!
—¡¿Qué mierda pasó?!
—¡No lo sé, una mujer intentaba matar a Mei y tuve que matarla! Pero esa mujer no era un demonio… De eso estoy seguro… Su presencia era más rara… Muy rara.
Sei Molfer observa la sangre y se da cuenta de lo que pasó.
—Mei… Lo siento… No escuché nada…
—No te preocupes, madre, ya estoy bien… Aunque ella me derrotó… Era muy poderosa… ¡Pero mi maravilloso hermano la derrotó!
Mei comienza a besar a Kei y él se pone completamente rojo. Obviamente, ella le está dando besos en la mejilla.
—¡Mei, no es momento de besos!
—¿Ella te derrotó…? Esto es malo… Kei, Mei, vengan conmigo, les explicaré lo que está pasando.
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En un enorme salón, una reina está sonriendo diabólicamente.
Es una mujer muy hermosa. Parece una mujer de 20 años. Tiene enormes pechos y una sexy figura.
Su corona es roja y brillante.
Tiene el cabello rosa y corto, ojos rojos y usa un vestido blanco.
—Vaya, vaya… Mei Molfer derrotó a número 10… Interesante.
A su lado, está un hombre con ojos completamente negros, tiene 4 brazos y tiene pelo blanco por todo su cuerpo. Usa un traje elegante negro.
—¿Qué hacemos, majestad? Si Sei Molfer sigue investigando, la descubrirán.
—No te preocupes, Gabrielku, aún nos quedan 9 guerreras. Cuando regresen de su misión, ellas se encargarán de Sei Molfer y sus hijos.
—Ellas volverán en 2 años, majestad.
—Lo sé, Gabrielku. Pero no te preocupes, no dejé ninguna pista, no nos descubrirán tan fácilmente.
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Kei está leyendo la información que le dio su madre.
—Más de 320 niños desaparecieron… La mujer no hizo ningún ruido… Los gritos de Mei no se escucharon… Y mis Golems tardaron en detectarla… Estaba usando magia rara… Magia muy rara… La líder solo está secuestrando a niños pequeños. Niños que tienen entre 3 y 10 años… Necesito Investigar más… Madre, protege a Mei mientras no estoy.
—Kei, ¿tienes alguna teoría?
—La información que tenemos es poca, así que no… Pero no te preocupes, encontraré a la líder… Y la mataré… Nadie se mete con mi familia… Nadie.