Aunque la Guerra Europea contra Oriente Medio devastó Turquía y muchos países de Oriente Medio convirtiendo esa zona en una tierra sin ley, gobernada por gremios de lunáticos y demonios, en su momento la destrucción también llegó a Grecia.
Después de todo, lo único que lo dividía era el Mar Egeo que resultaba fácil de atravesar tanto para demonios o jugadores lunáticos.
El resultado de esa destrucción cambió la ciudad Atenas con respecto a antes del 'Gran Cataclismo'.
Los enormes edificios como rascacielos no eran comunes en Grecia, sino que la mayoría de los edificios eran de tamaño medio.
Su estilo por otra parte llevaba un toque antiguo con una apariencia 'homogénea' entre los edificios, logrando que fuera una vista impresionante cuando se lo combinaba con los templos imponentes.
El autobús atravesó esos lugares y los estudiantes empezaron a sacar fotos con sus relojes holográficos como turistas emocionados.
El hotel que se quedaron estaba en el centro, así que llegaron rápidamente.
Un hotel de 4 estrellas bastante reconocido por su vista desde los balcones a la ciudad y templos.
"Vayan a sus habitaciones, dejen su equipaje. Hagan lo que tengan que hacer y en 15 minutos los espero en la sala." Dijo la Profesora Villacrés, después de trasmitir la información de las habitaciones junto a la entrada personal de los estudiantes a sus respectivos relojes holográficos.
Cuando el autobús se detuvo, los estudiantes bajaron rápidamente con su equipaje.
Los anillos espaciales eran bastante comunes y si bien el precio variaba según el tamaño del espacio interior, todos tenían anillos espaciales de diferentes valores.
Pero para algunos llevar su equipaje en esos anillos era molesto debido a lo poco que se podía almacenar y era por eso que llevaban su equipaje a mano.
Sin embargo, también había otra razón y esa era...
¡Necesitaban espacio para sus nuevos objetos!
Los estudiantes rápidamente corrieron al hotel para dejar su equipaje y tratar de vaciar sus anillos espaciales.
Cuando entraron a la sala sus relojes holográficos vibraron identificando la entrada que la Profesora Villacrés le había trasmitido.
Al ver que estaba todo en orden con los asistentes del hotel, los estudiantes rápidamente se dirigieron a las habitaciones para dejar todos sus objetos.
Aurora siguió la información de su habitación y subió al segundo piso con Alice.
Dos estudiantes debían compartir habitaciones y a Aurora le tocó con su glotona amiga.
El hotel era bastante lujoso, digno de un hotel de 4 estrellas, mientras que las habitaciones también eran grandes y agradables, siendo cómodo para dos personas.
Aurora tenía un anillo espacial con un tamaño interior bastante grande, así que no tenía problemas para llevar su ropa, pero igual quería dejarla al mismo tiempo que revisaba su habitación.
Si bien había viajado antes a Grecia, en realidad nunca había realizado un viaje estudiantil.
No podía negar que ella estaba ligeramente emocionada.
"Ya reservé el restaurante para la cena." Informó Alice con un tono serio, y dando una sonrisa ligeramente emocionada, agregó. "Hoy comeremos comida griega."
Aurora puso una expresión ligeramente extraña ante la emoción de su amiga, pero asintió y respondió. "Vamos."
Bajando rápidamente a la sala, la Profesora Villacrés junto a algunos estudiantes ya se encontraba esperando a los demás.
No les tomó mucho tiempo para que los demás estudiantes llegaran.
Al ver que estaban todos, la Profesora Villacrés miró a sus estudiantes.
"Todos los presentes son adultos y futuros héroes responsables, no les tengo que recordar sus límites, ¿cierto?" Preguntó la Profesora Villacrés.
Todos tenían 18 años como mínimo, siendo legalmente adultos 'responsables'.
Saber que o no hacer era una cuestión que ellos mismos tendrían que saber.
Los estudiantes asintieron.
"Bien, solo déjenme darle un recordatorio." Dijo la Profesora Villacrés y observándolos atentamente, advirtió. "Ustedes tienen la libertad de hacer lo que deseen e ir a cualquier lugar, solo recuerden tener cuidado. Aunque Grecia es conocida debido a que las autoridades de seguridad están relacionadas con el Imperio Falion y son fuertes. Al otro lado del Mar Egeo se encuentra las ruinas de Turquía y están gobernadas por demonios."
La Guerra Europea contra el Oriente Medio fue empezada por humanos, pero después se la conoció como la Guerra Europeo-Demoniaca debido a la intervención de los demonios.
Si bien el Imperio Falion llegó y puso fin a la guerra, ese final solo fue una paz tras una larga guerra.
La guerra era imposible de ganar debido a que los demonios eran conocidos por ser la raza más beligerante, pero también la más peligrosa.
Si eran acorralados, nadie podría predecir qué actos de locura podrían realizar.
Así que se optó por una paz, que fue aceptada debido a que muchos de los demonios invocados eran individuos que le gustaba la diplomacia o estaban interesados en otros asuntos.
Es por esa razón que Turquía y Oriente Medio quedaron gobernados por demonios pacíficos y demonios beligerantes, junto a gremios de jugadores que en algunos casos eran clasificados como organizaciones terroristas.
Turquía en particular quedo como un país gobernado por un antiguo gremio y un demonio pacífico, sin embargo, eso no significaba que otros demonios no sean peligrosos.
"En la actualidad todos los demonios son considerados razas peligrosas, pero eso no significa que todos lo sean. Sin embargo, me gustaría que prioricen su seguridad y viajen en sus respectivos grupos." Dijo la Profesora Villacrés y sin importarle la mirada de sorpresa por sus primeras palabras, agregó. "Puede que sea complicado arreglar sus planes entre todo el grupo para que todos estén contentos, pero espero que puedan organizarse y arreglarlo de alguna manera."
Con esas palabras, la Profesora Villacrés se fue.
No los instó a hacer la tarea, debido a que hoy era viernes y tenían el sábado y domingo por delante.
Había llegado en la tarde así que debían disfrutar el resto de la tarde y la noche para viajar por esta ciudad mágica.
Los grupos empezaron a reunirse y dispersarse con sus respectivos grupos.
Alice y Aurora se acercaron a Érica, Joslyn y Andrés.
"A mí no me importa lo que hagamos." Dijo Andrés desde entrada.
"Yo tengo reservado el lugar donde vamos a comer." Comentó Alice y con un tono serio, declaró. "Espero que me acompañen, yo invitaré."
No se sintió como una amenaza, pero… ¿Por qué para Aurora si lo hizo?
"Está bien." Respondió Érica y con un toque de emoción, preguntó. "¿Qué tal si vamos al Mercado Dimensional y exploramos los alrededores?"
Inmediatamente todos se interesaron por la propuesta y asintieron.
A gran velocidad salieron del hotel y como el lugar donde se encontraba el 'Mercado Dimensional' no estaba lejos, decidieron caminar.
Su dirección era el antiguo barrio 'Monastiraki' que para los turistas era conocido por ser un mercado al aire libre donde se encontraban algunos lugares importantes.
Lamentablemente tras última guerra el barrio quedo devastado al ser el centro de los ataques y fue reconstruido, con un nuevo nombre.
El Mercado Dimensional.
Como el hotel estaba cerca, no se demoraron demasiado tiempo llegar, siendo los edificios lo primero que notaron diferente.
El Mercado Dimensional estaba en el centro, y sus edificios tenían un toque más antiguo y glamuroso.
Apenas entraron por las calles abarrotados notaron las decenas de negocios a ambos lados de la calle.
"Es un elfo…" Murmuró Andrés impresionado al ver la vendedora de una tienda.
La elfa era una mujer guapa de orejas largas, con un largo cabello verde y una figura muy encantadora.
Pero a diferencia de lo que pensarían los turistas normales cuando la palabra 'elfo' llegaba a su mente, no estaba vestido con ropa de color verde relacionada con la naturaleza… Estaba vestida con ropa de 'Chanel' y la tienda era de la misma marca.
Para Andrés que solo había visto elfos en fotos y que había estado deseoso de ver un poco del 'Mercado Dimensional' que unía dos mundos, sintió que su imaginación se rompía.
El grupo se fue adelantando al centro, reconociendo marcas modernas en el camino, pero cuando se adentraron más profundo, empezaron a notar la diferencia.
Personas de baja estaturas de complexiones corpulentas y con largas barbas estaban sirviendo cerveza en algunos bares y se juntaban a beber con sus propios clientes.
Tiendas de objetos mágicos dirigidos por elfos, y tiendas de armas dirigidas por enanos.
Incluso se encontraban algunos humanos que seguían vistiendo sus túnicas y ropa elegante que era muy común en Terra nova.
Entre el grupo solo Andrés y Joslyn parecían no haber visto a estas razas de otro mundo, así que no pudieron evitar emocionarse al verlos.
Ver a elfos, enanos incluso humanos con colores de pelo llamativos, sin duda para ellos era interesante y emocionante.
Agregando el estilo antiguo y elegante de los edificios, entonces les hacía creer a los espectadores como si hubieran viajado a ese otro mundo de fantasía.
Todo el grupo se emocionó al ver todo tipo de objetos que no verían en otra parte.
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"¿Este es un libro de magia de hielo avanzada?" Preguntó Érica con emoción a un vendedor.
Se encontraba en la plaza en el centro del 'Mercado Dimensional', en ese lugar muchas personas establecían sus pequeñas tiendas al aire libre.
Aunque estaba oscureciendo las luces y farolas mágicas iluminaban los alrededores.
Alice comió sus papitas y miró como Érica compraba desde lejos.
"Si, este libro fue escrito por unos de los poderosos Archimagos de la Academia del Imperio Falion." Explicó el vendedor con una sonrisa e inmediatamente Érica se lo compró a pesar del precio que parecía una estafa.
Era cierto que el libro fue escrito por un Archimago de Terra nova, pero ese libro circulaba libremente en Terra nova y los volúmenes habían llegado a este mundo.
Si uno lo buscaba podría haber encontrado el mismo libro a un precio menor.
Es este mercado al igual que cualquier otro, había todo tipo de vendedores y toda clase de trucos para vender sus objetos y más en esos pequeños mercados al aire libre que por lo general vendían objetos de segunda mano.
Como en cualquier situación de la vida, la mayoría de los negocios dependía de la perspicacia de los compradores y vendedores.
Érica era alguien fácil de engañar en ese sentido, seguramente por la perspectiva que tenía del dinero.
Alice desvió su mirada a Andrés.
"Dos mil dólares por este anillo… No sé, en la Ciudad Atlántida los anillos tienen que tener sistemas de seguridad, aunque este anillo tiene un gran espacio. Es arriesgado." Dijo Andrés con un tono serio y una mirada complicada.
Esa expresión seria no concordaba con su mentira descarada.
Los anillos espaciales tenían una estándar de seguridad cuando salían a la venta, tratando de evitar que por diferentes motivos no causara daño al usuario, como cualquier producto de la modernidad.
La mayoría de los anillos espaciales a la venta en este lugar tenían medidas seguridades incluidas y no era algo relacionado con una ciudad, pero tal tema sobre las regulaciones no lo sabría alguien que venía de otro mundo.
"Oh, pero joven este es un anillo de tamaño mediano, puedes llevar cosas de tamaño mayor." Dijo el enano con una expresión difícil y luego con una sonrisa como si se le hubiera ocurrido una gran idea, preguntó. "¿Qué tal si te llevas unos de los objetos mágicos y te hago precio?"
Andrés al ver los objetos seleccionó uno que estaba al lado artístico cuyo único efecto era que podía liberar una esfera de luz para iluminar los alrededores y compró ambas cosas.
Aunque no pudo reducir el precio del anillo espacial, se llevó otro objeto a un precio menor así que ambos ganaron…
Eso era lo interesante del mercadillo al aire libre.
Se podía regatear buscando un mejor precio como si fuera una competencia, para algunos turistas esto era algo entretenido y para los experimentados vendedores esta era una buena forma de obtener beneficios.
Alice mir�� como Aurora estaba ayudando a Joslyn en la compra de objetos defensivo de segunda mano.
Aurora no era buena regateando, pero conocía el verdadero valor de los objetos lo que hizo posible que pudiera ayudarle a conseguir algo útil a Joslyn que parecía desconocedora de los artículos mágicos.
Cuando terminaron ambos se acercaron a donde estaba Alice comiendo sus papitas.
"¿Vamos a cenar?" Preguntó Alice con un tono lleno de emoción.
Había estado mirando los restaurantes que servían comidas griegas y de Terra nova, es por esa razón que tenía bastante hambre.
Pero ya había planeado su tour de comida y hoy saborearía comida griega.
"Claro, esperemos a los demás y vamos." Respondió Aurora con una sonrisa, y estaba por seguir mirando la tienda cuando su reloj holográfico vibró.
Alice observó cómo Aurora se alejaba para atender la llamada.
Las llamadas de los relojes holográficos podían ser solo en audio o también en video, pero la mayor parte solo era mostrada al individuo y solo alguien que estaba en la espalda podría verlo.
Alice estaba por seguir comiendo sus papitas cuando notó que Aurora puso una expresión seria.
No era como si algo importante sucediera, pero era la misma expresión que siempre tenía cuando estaban trabajando.
Las cejas de Alice se movieron y ella inmediatamente se acercó a Aurora.
"¿Liam no puedes pedirle a otro grupo de mercenarios que se quede con el trabajo?" Preguntó Aurora con un tono serio.
"Lo siento jefa sé que está de vacaciones, pero ya sabe que nadie le gusta acercarse a ese bosque y la aldea que pidió ayuda está bastante cerca… Es difícil que alguien acepte la misión."
Alice escuchó la voz de su compañero de trabajo y sus pasos se aceleraron guardando las papitas.
"Entiendo, reserva el boleto y en unas horas estaré allí." Dijo Aurora asintiendo seriamente.
"Jefa los Portales Cosmos han terminado de construirse y están abiertos, le conseguiré un boleto para…"
"No, Liam estamos de vacaciones deja de molestar." Interrumpió Alice revelándose ante el hombre que estaba al otro lado.
Antes de que Aurora pudiera decir algo, Alice con una expresión seria ordenó. "Ya reservé un restaurante, no lo interrumpiré por nada. Le pediré a alguien que se encargue."
"Entiendo…" Respondió Liam al ver que Alice hablaba seriamente mirándolo con una expresión que decía que cortara de inmediato… Termino obedeciendo.
Aurora miró de forma extraña a Alice, pero esta última rápidamente inició una llamada con su reloj holográfico.
"Su Excelencia… ¿Señorita necesita algo?" Preguntó un anciano de cabello blanco canoso.
"¿Todavía lo haces que te llame 'Su Excelencia'?" Preguntó Aurora mientras sus labios temblaban con una sonrisa burlona.
La expresión de Alice tembló por un momento, pero miró al anciano seriamente.
"¿Paso algo con la reservación del restaurante? Deme un momento y me encargaré de arreglarlo." Declaró el anciano con un tono serio como si ese asunto fuera de suma importancia y la razón de la expresión de Alice.
"No, es otro asunto. Necesito que envíes alguien a nuestro grupo mercenario. Ha surgido un asunto y necesito que alguien se encargue." Ordenó Alice y con un poco de duda miró a Aurora para que hablara.
Aurora al ver la mirada seria de Alice, suspiró y explicó. "Es unas de las aldeas bajo nuestra influencia en donde han surgido algunos problemas, pero debido a la territorialidad de las bestias mágicas en esa área del Bosque Mágico es difícil que alguien acepte la misión por miedo a un ataque."
El Bosque Mágico era un bosque masivo que se había extendido por casi todo el centro de áfrica, cubriendo con el tiempo cerca de una decena de antiguos países.
Considerado como uno de los lugares más peligrosos en el mundo, era habitado por poderosas bestias mágicas y algunas de ellas tenían un fuerte sentido de territorialidad.
"Oh, entiendo. Me encargaré de enviar a alguien que se encargue de esa tarea." Respondió el anciano y al ver la expresión difícil de Aurora, agregó. "También tenemos que arreglar el trato comercial con los dueños del bosque, así que no hay necesidad de sentirse incomoda. Podemos solucionar ambos problemas al mismo tiempo."
Alice asintió sin interés y comentó. "Gracias Sebastián."
Los labios del anciano temblaron, pero la que tuvo mayor reacción al escuchar ese nombre fue Aurora que se empezó a avergonzar.
"Oye no lo llames Sebastián…" Murmuró Aurora con un tono ligeramente avergonzado.
"Tú fuiste la que primera que lo llamó 'Sebastián' diciendo que los mejores mayordomos tienen que llamarse de esa forma." Recordó Alice con una sonrisa entretenida, y mirando al anciano, agregó. "Gracias James."
"Disfruten sus vacaciones." Comentó James con una sonrisa alegre al ver al dúo y al momento siguiente cortó la comunicación.
Alice observó a Aurora que estaba avergonzada, pero ella solo se rio divertida.
Hace mucho tiempo Aurora llamó a su mayordomo como 'Sebastián' alegando que ese era el nombre perfecto para todo mayordomo, pero al igual que James la llamaba 'Su Excelencia' por cosas del pasado y su amiga se burlaba de ella, Alice tampoco olvidaría ese hecho.
"No deberías haberlo involucrado." Comentó Aurora con un suspiro.
"Es cierto que tiene trabajo, pero puede encargarse de esta pequeña tarea." Respondió Alice encogiéndose de hombros y al ver a Aurora mirarla extrañamente, agregó. "Además, me gusta verte sonriendo y no con la expresión seria que siempre tienes cuando trabajamos."
Aurora se avergonzó ante ese comentario sincero, pero Alice solo asintió.
Su amiga cuando trabajaba era demasiado seria y estricta, estaba bien para la tarea que hacían, pero no era nada saludable ser siempre de esa forma.
Alice no mentía cuando decía que le agradaba su amiga de esta forma… Era unas de las razones por la que apoyo a su madre cuando tuvo la idea de enviar a Aurora a la academia, tratando de apartarla un poco del trabajo.
"¿Vamos a cenar?" Preguntó Érica de repente interviniendo sin darse cuenta de su conversación.
"Sí, vamos." Respondió Alice con un tono hambriento, mientras que Aurora asentía con un suspiro.
Alice miró su reloj holográfico para buscar la dirección y luego empezó a dirigir el grupo.
Como este era el centro, el restaurante estaba relativamente cerca.
Tuvieron que caminar algunas calles, mientras observaban como las tiendas y edificios empezaban a cambiar de diseño.
Se empezaron a volver más modernos y brillantes.
Caminando por unas de las calles más concurridas de Atenas, el grupo se empezó a poner nervioso al ver las tiendas de todo tipo que atravesaban.
"¿Esto está bien?" Preguntó Joslyn mirando las tiendas que cada vez se hacían más… Elegantes y lujosas.
Esta sección tenía decenas de tiendas de ropas de marcas glamorosas y muy conocidas, cuyos diseñados eran de lujo y para individuos importantes que podían permitirse gastar una gran cantidad de dinero.
No solo se trataba de la marca o estilo, sino que de los materiales básicos que se usaban.
Ropas que se ajustaban a la medida del usuario, creadas a partir de materiales mágicos o materiales que provenían de monstruos.
Otorgaban una protección básica y por lo general estaban encantadas con diferentes efectos mágicos, como lo era la capacidad de ajustarse al cuerpo del usuario.
Las tiendas de armas, joyas, y comida eran iguales... Tenían algún efecto mágico debido a los materiales que usaron o debido al proceso por el cual fueron diseñados.
Y particularmente todo tenía un alto valor…
"Sabes, ¿si quieres invitar qué tal si vamos a un restaurante del Mercado Dimensional?" Preguntó Andrés por consideración.
Mirando las ofertas, podía notar que la comida saldría extremadamente cara… Y en realidad ese restaurante era pequeño y común entre el montón de esta calle.
Joslyn asintió a su lado.
Que los invitaran a comer algo de un restaurante cercano al azar era algo 'aceptable', pero que los invitaran a comer en unos de los barrios más caros de la ciudad… Era algo difícil de aceptar.
Pero Alice lo veía diferente.
"Cuando empiecen a trabajar se darán cuenta de que esto no es demasiado." Comentó Alice con un tono de una experta mientras observaba los restaurantes.
Aurora asintió con una sonrisa entretenida.
Este era un barrio costoso con artículos mágicos en venta, pero cuando se lo comparaban con las verdaderas tiendas de armas mágicas cuyos productos costaban millones, entonces se darían cuenta de la diferencia.
Sin embargo, las expresiones de todos temblaron cuando Alice se detuvo en un restaurante de 4 'tenedores', como era reconocidos.
Este restaurante estaba relacionado con la mayor empresa de alimentos del Mundo.
La Empresa Apicius una multinacional cuya prioridad era la producción de alimentos de todo tipo, y que también se dedicaba a desarrollar tecnología centrada en la comida.
También conocida como la distribuidora de ingredientes mágicos más grande del mundo y una empresa que había 'levantado' una ciudad en áfrica.
"¿Tienes reservaciones?" Preguntó Érica con una mirada ligeramente aturdida.
Aunque las clasificaciones antiguas se mantenían, en realidad para ser clasificados 4 o 5 'tenedores' debía tener expertos en cocinas y utilizar ingredientes mágicos.
En sus menús debían tener platos 'mágicos', eso significaba que tenían que ser creados con ingredientes mágicos ya sea desde carne de bestias mágicas hasta vinos y otros licores mágicos… Cada comida estaba imbuida con energía mágica, lo que aumentaba su sabor y valor.
Los restaurantes como estos se necesitaban reservaciones de semanas o meses para algunos casos, debido a la escasa producción de ingredientes mágicos inclusos cuando una multinacional los apoyaba.
"Si quieres yo puedo…"
Conseguir unas reservaciones…
Érica se tragó sus palabras al ver como el portero le abría la puerta a Alice con una gran sonrisa, como si la hubieran reconocido.
"Siempre se gasta toda su paga en restaurantes…" Explicó Aurora con una sonrisa entretenida, y mirando a su glotona amiga, comentó. "Y es una 'Gourmet' muy reconocida en estos ámbitos."
Todos asintieron entendiendo un poco de la famosa Rango A de su Academia… Y le encontraron sentido que ella fuera un Gourmet.
Después de todo, Alice también era conocida por ser una glotona.