Humanos contra demonios.
CAPÍTULO 169
(Pov- Daniel.)
Le entrego una rosa roja a mi abuela. A ella le encanta este tipo de flor.
… Pero… ¿Por qué estoy en un lugar completamente blanco?
No importa.
—¡Abuela, toma!
Con una gran sonrisa, le doy la rosa y espero su respuesta.
—No…
—¿Eh?
Mi abuela me observa con asco y se aleja de mí.
—No la quiero.
—… ¿Qué?
Mi sonrisa desaparece y lágrimas comienzan a salir de mis ojos… Mi pecho me duele mucho… Siento mucho dolor.
¿P-por qué me mira así? ¿Q-qué hice mal?
—¿P-por qué?
—No quiero recibir cosas de un inútil.
—¿I-inútil?
—Si tan solo fueras más fuerte…
Sufuco aparece al lado de ella… Comienza a tocarle el trasero y los pechos a mi abuela.
¡M-maldito!
Ver eso me llena de rabia y furia… ¡¡Nadie toca a mi abuela!!
—Si tan solo fueras más fuerte, no habría muerto.
¿M-muerto? ¿Q-qué está diciendo?
E-ella está bien… D-debe estar bien.
—A-abuela, ¿por qué dices…?
—¡Cállate, idiota!
—¿Eh?
Voltea a verme, sangre está saliendo de sus ojos y boca.
¿P-por qué…? ¡¿Por qué está pasando esto?!
—¡Eres un inútil! ¡Te odio! ¡Eres una decepción! ¡Ojalá estuvieras muerto!
—N-no…
Sufuco toma del cuello a mi abuela.
—¡Me voy a divertir mucho con tu abuela, Daniel!- Dijo Sufuco, burlándose de mí.
Mis dos ojos ahora son rosa… Estoy lleno de ira… ¡Quiero matarlo!
¡¡Quiero matarlo!!
Me dirijo hacia él corriendo.
—¡Te mataré!
Intento golpearlo con mi puño derecho, pero él detiene mi puño con su mano izquierda.
—Eres realmente patético.
Suelta a mi abuela y atraviesa mi pecho con su mano derecha… Me arrancó el corazón.
Quita su mano de mi pecho y me muestra mi corazón.
Ver eso me deja perturbado… Estoy asustado, pero también estoy realmente enojado.
—Eres realmente un inútil.
Sufuco cambia de forma… Se convirtió en Daniela.
N-no… ¿P-por qué estoy viendo esto?
—Por tu culpa, morí.
Todas mis compañeras muertas aparecen alrededor de mí.
—Eres un inútil. Un inútil. Un inútil…
Me pongo de rodillas y me tapo los oídos.
—Maldita sea… Ustedes no son reales…
Mi cabello se vuelve blanco… Estoy lleno de ira.
¡¡Esto es una pesadilla, ustedes no son reales!!
—¡Déjenme en paz!
Me levanto rápidamente y pongo la palma de mi mano derecha sobre el rostro de Daniela.
—¡¡No me engañarán!!
Tomo impulso y azoto la cabeza de Daniela contra el suelo.
—¡¡Sus almas desaparecieron para siempre!!
Mi abuela se acerca a mí.
—El momento llegó.- Dijo mi abuela, con la voz de Cano.
¿Cano?
Todo a mi alrededor se desvanece… Todo se vuelve negro.
—Otra pesadilla… Ya debería estar acostumbrado…
Lágrimas caen de mis ojos.
—Pero me duele… Me duele recordar esto…
La mitad derecha de mi cabello vuelve a la normalidad… Mi ojo derecho vuelve a su color normal.
—Me duele mucho el corazón…
Comienzo a partirme a la mitad.
—¡¡No permitiré que tomes mi cuerpo!!- Dijo alguien… No… Digo yo… Esa mi voz.
Un segundo Daniel, completamente normal, aparece frente a mí y me da un gran golpe en la cara con su puño derecho.
—¡¡Despierta!!
•
•
(Mundo 1.)
Es de noche, Sandro está parado frente a la cama, observando dormir a Daniel, y Nirfa está sentada junto a él, tomando su mano derecha.
—Está despertando.- Dijo Sandro.
Daniel abre los ojos poco a poco… Le duele la cabeza… Él no recuerda mucho… Solo recuerda que estaba peleando contra Sufuco, pero después de eso, no recuerda nada.
—Daniel… ¿Te sientes bien?- Dijo Nirfa, con una pequeña sonrisa.
—Hola, Nirfa…
Se sienta en la cama.
—¿En dónde estamos?
—Daniel… Tenemos algo importante que decirte… Es algo muy doloroso, pero debes aceptarlo… Te lo explicaremos poco a poco… Daniel… tu abuela…- Dijo Nirfa, antes de ser interrumpida por Rei.
—Tu abuela está muerta, Daniel.- Dijo Rei, que se dirige a él flotando en su forma como espada.
Escuchar eso provoca que su corazón le duela… Ignora el hecho de que Rei haya hablado frente a Nirfa… Su abuela está muerta… Él sabe que su maestro nunca le mentiría… Está diciendo la verdad.
—¡Rei!- Dijo Nirfa enojada.
—No tiene caso decírselo poco a poco. El resultado será el mismo.- Dijo Rei.
Daniel está perturbado… No puede creer esa noticia… Se niega a creerlo.
—¿Mi abuela... está muerta?
Lágrimas salen de sus ojos… Aunque se niegue a creerlo, él sabe que Rei está diciendo la verdad.
—Mi abuela…
"Mi abuela está muerta… Mi abuela está muerta..." Se está repitiendo la misma frase en su mente.
—Mi abuela... Mi abuela está muerta...
—Daniel...
Recuerda su sonrisa… Su rostro anciano… Su rostro joven… Su risa… Su amor.
"Dani"
Escucha la voz de su abuela en su mente… Cree que se está volviendo loco, pues comenzó a recordar demasiado.
Los momentos tristes.
Los momentos felices.
Todos los momentos que pasó con ella los está recordando... Y eso solo hace que su corazón se llene de tristeza y llore más.
—Daniel, sabemos que es algo muy doloroso para ti, pero debes aceptarlo.- Dijo Rei.
—Abuela…
"Eres un inútil, Daniel. No pudiste proteger a tu abuela".
Escucha la voz de Cano en su mente.
—Maldita sea…
Cierra los puños con furia… "No pude proteger a mi abuela… Cano tiene razón, soy un inútil... Un inútil". Pensó eso, mientras un pequeño mechón de su cabello se volvía blanco.
—Soy un inútil… Un inútil…
"97% de maldad". Dijo la voz en su cabeza.
—Daniel… Debes tranquilizarte… Escucha lo que Rei te va a decir.- Dijo Sandro.
—Sandro.
—¿Sí?
—¡¿Podrías callarte?!
Puso su mano izquierda en la boca de Sandro.
—Fue Sufuco, ¿verdad?
—Sí… Y no… Escúchame, por favor.- Dijo Rei.
—Iré por él…
Está lleno de ira…
—¡Mataré a Sufuco! ¡Lo mataré!
Varios mechones de su cabello comenzaron a volverse de color blanco.
—¡¡Mataré a Sufuco!!
Con un gran grito, Daniel se levanta rápidamente de la cama y toma a Rei con su mano derecha.
—¡¡Lo mataré!! ¡¡Lo mataré!!
Se dirige corriendo hacia la puerta.
—¡Espera, Daniel!- Dijo Nirfa preocupada.
Daniel sale corriendo de la casa. Está corriendo a una gran velocidad, y solo Sandro sería capaz de alcanzarlo.
—¡Daniel, te ordeno que te detengas!- Dijo Rei.
—¡Cállate!
"98% de maldad".
—¡¡Daniel, espera!!- Gritó Sandro.
Sandro se dirige corriendo hacia él rápidamente. Está cargando en sus brazos a Nirfa.
—¡¡Por favor, detente!!- Gritó Nirfa.
—¡Daniel, si vas por él, morirás! ¡No tienes oportunidad contra él!- Dijo Rei.
—¡No me importa!
Una voz en su cabeza intenta convencerlo… Es su propia voz.
"¡Daniel, detente! ¡Debes pensar en una estrategia! ¡Si vas, morirás!"
—¡Cállate, maldita sea!
"¡Detente, maldita sea! ¡Si te matan, el mundo 1 desaparecerá!"
—¡No me importa, solo quiero matar a Sufuco!
Su cabello comienza a cambiar de color rápidamente.
"99% de maldad… ¡Maldita sea, no me dejas otra opción!
Un portal rosa aparece frente a él y un segundo Daniel sale del portal. Ese Daniel es normal… No tiene el ojo rosa… Tiene su misma ropa… Es idéntico a él… Él es Daniel.
—¡Te dije que…!
El segundo Daniel le da un gran golpe en la cara con su puño derecho.
—¡… te detengas!
El primer Daniel volando y choca fuertemente contra un árbol.
El portal desaparece.
—¡No permitiré que nos volvamos malvados! ¡No permitiré que hagamos una locura! ¡Te detendré en este momento!
Sandro se detiene y observa al segundo Daniel confundido.
Nirfa también está confundida… Aunque es obvio el por qué.
—¿Dos Daniel?- Dijo Nirfa.
—¿Por qué hay dos?
El segundo Daniel voltea a verlos.
—¡No se preocupen, soy el Daniel bueno! ¡No soy peligroso!
El Daniel bueno voltea a ver al otro Daniel. Está en el suelo.
—Él es el único peligro…
El primer Daniel se levanta del suelo. Tiene el cabello blanco y los ojos de color rosa.
—Daniel malo… Él es el único peligro.
Daniel malo sonríe.
—Vaya, vaya. ¿Eres mi lado bueno? ¿Cómo saliste de mi cuerpo?
—¿Por qué no se lo preguntas a Cano? ¡Estuvo a punto de robar nuestro cuerpo! ¡Nuestro cuerpo casi se dividió en dos, pero afortunadamente, pude evitarlo!
—Sí… Supuse que eso había pasado… Pero se volvió a dormir después de su intento fallido… Según mis cálculos, tú representas mi 1% de bondad… Eres débil.
—Afortunadamente, la mitad de tu poder se unió a mi cuerpo.
—Eso significa…
—Sí… Somos igual de poderosos… Daniel, la muerte de nuestra abuela nos afectó… Pero no podemos ir por Sufuco. Aún somos débiles, debemos entrenar aún más.
—No me importa… ¡Lo mataré!
—No estás razonando… No importa que pienses que puedes, no lo matarás… Te matará.
—¡¿Por qué no te unes a mí?! ¡Juntos podríamos derrotarlo!
—Escucha… Tu lado bueno, yo, evitaba que nuestro cuerpo se dividiera… Cano solamente podría dividir nuestro cuerpo sin problemas, cuando fuéramos 100% malos… ¿Cómo lo sé? Cuando estuvimos a punto de ser 100% malvados, Cano tomaba más control sobre nosotros… Si fuéramos 100% malvados, no podría evitar la separación… Pero cuando me di cuenta de que no podía controlar mi furia, decidí separarme, usando la misma magia que usó Cano para dividirnos… Tomé la mitad de nuestra fuerza… Juntos, tenemos la fuerza del Daniel original, pero separados, somos la mitad de fuertes que el Daniel original.
—Entonces me robaste mi poder… ¡Si te mato, lo recuperaré!
—Sí, lo recuperarás, pero Cano tomará tu cuerpo.
—¡No me importa, quiero matar a Sufuco, eso es lo único que me importa!
—Sí… Supuse que dirías eso… La única manera de evitarlo, es destruyendo mi lado malo… Debo eliminarte.
Daniel bueno extiende su mano derecha.
—Maestro, ven.
Rei se vuelve polvo y se dirige hacia Daniel bueno.
—¡Maestro, yo también soy Daniel! ¡Yo soy tu amo también! ¡Ven!
Rei vuelve a su forma como espada y se detiene en medio de los dos.
—¡Ven!- Dicen los dos.
Rei se aleja volando… No quiere participar en la pelea.
—Bueno, supongo que no podemos contar con su ayuda.- Dijo Daniel malo.
Daniel bueno arrastra la tierra que hay en el suelo con su pie izquierdo, preparándose para pelear.
—Supongo que tendremos que pelear sin espada.
Daniel malo arrastra la tierra con su pie derecho, preparándose para pelear.
—Después de matarte, mataré a Sufuco… Voy a usar el hechizo de explosión, el mismo que usé contra Monderfol.
—Sí… No lo dudo.
Nirfa y Sandro están parados y confundidos… No comprenden por completo la situación.
—Entonces… ¿Los dos son los mismos?- Dijo Nirfa.
Dix está en la espalda de Sandro.
—Sí… Solo que uno es malo y otro es bueno.
—¿Qué hago, maestra?- Dijo Sandro.
—No debemos intervenir, ellos deben resolverlo solos.
—Está bien… Supongo.
Los dos Daniel activan su modo rosa.
—¡Modo rosa, al 80%!- Dicen los dos.
Daniel bueno se dirige corriendo hacia Daniel malo, y Daniel malo se dirige corriendo hacia Daniel bueno.
Sus puños derechos chocan, provocando una onda expansiva, que derriba a Sandro y a Nirfa.
—Tenemos la misma inteligencia.- Dijo Daniel malo sonriendo.
—Ganará el que la sepa aprovechar mejor.- Dijo Daniel bueno.
Intentan golpearse con sus rodillas derechas, pero ambas chocan entre sí.
—Daniel…- Dijo Nirfa triste.
Comienzan a intercambiar golpes, pero todos sus golpes son iguales. Sus puños chocan entre sí, sus piernas también, incluso sus cabezas… Están peleando igual.
—Vaya… Increíble.- Dijo Sandro.