webnovel

cap. 23

Yo estaba parada en el nivel mas bajo del Arcade de Bo con mi espalda hacia la pared mirando varios juegos de billar. Las ventanas están bloqueadas así que no puedo ver si es de día o de noche. Stevie Nicks (cantante) esta saliendo de los altoparlantes, la canción sobre palomas blancas y estar al borde de cumplir 17. Nadie parece estarsorprendido por mi repentina aparición de la nada. Y después me acuerdo que no tengo nada más puesto que una camisola y mis pantys (ropa interior). ¿No soy muy vanidosa ni nada pero estar parada en una multitud compuesta completamente por el sexo opuesto, con mis partes esenciales apenas cubiertas, y nadie me esta mirando? Algo estaba...mal. Me pellizque. Perfectamente viva, por lo menos a mi parecer. Agite la mano para despejar la nube de humo de cigarro delante mio, vi a Patch al otro lado del cuarto. El estaba sentado en una mesa de póker, recostado hacia atrás con una mano de cartas muy cerca de su pecho. Camine descalza al otro lado de el cuarto cruzando los brazos en el pecho para asegurarme de estar bien cubierta. "¿Podemos hablar?" Dije a su oído entre dientes. Había un tono nervioso en mi voz, lo que era comprensible ya que no tenia idea de como había acabado en el Arcade de Bo. En un momento estaba en el motel y al siguiente estaba aquí. Patch empujo una pequeña pila de fichas de póker al montón que estaban en el centro de la mesa.

-"¿Tal vez ahora?", dije. "Es como que urgente...", deje de hablar cuando el calendario en la pared llamo mi atención. Estaba atrasado por 8 meses, mostrando Agosto del año pasado. Justo antes de que comenzara segundo de bachillerato (10mo grado). Meses antes de que conociera a Patch. Me dije a mi misma que era un error, que quien fuera que estuviera a cargo de arrancar las paginas del calendario se había atrasado, al mismo tiempo brevemente y sin querer considere la posibilidad de que el calendario estuviera justo donde debía. Y yo no lo estuviera. Hale una silla de la mesa de alado y me senté junto a Patch. "El tiene un cinco de espadas, un nueve de espadas, y el A de corazones..."

Pare cuando me di cuenta de que nadie me estaba prestando atención. No, no era eso.

Nadie podía verme. Se oían pisadas al otro lado del cuarto, y el mismo cajero que había amenazado con echarme la primera vez que vine al arcade apareció al pie de las escaleras.

"Alguien arriba quiere hablar contigo" Le dijo a Patch. Él alzo las cejas como transmitiendo una pregunta en silencio. "No quiso dar su nombre" Dijo el cajero a manera de escusa. "Le pregunte un par de veces y le dije que estabas en un juego privado pero no se quiso ir. La puedo echar si quieres"

-"No, mándala para acá."- Patch jugo su mano, junto sus fichas y se levanto de la silla. "-

Me salgo."- Camino hasta la mesa de billar mas cercana a las escaleras, se recostó de ella y se metió las manos en los bolsillos. Lo seguí hasta el otro lado del cuarto y chasquee mis dedos delante de su cara. Patee sus botas. Al final lo golpee en el pecho. El no pestañeo, ni se movió. Se escucharon pisadas ligeras en la escalera, acercándose, y cuando la Señorita Greene salio de la oscuridad experimente un momento de confusión.

Su cabello rubio llegaba hasta su cintura y estaba liso como una tabla. Tenía puestos jeans que parecían pintados y una camiseta rosada, estaba descalza. Vestida de esa manera se veía incluso mas joven, cerca de mi edad. Estaba lambiendo una paleta. La cara de Patch es siempre como una mascara, en ningún momento tengo la minima idea de lo que esta pensando. Pero tan pronto como miro a la Señorita Greene, supe que estaba sorprendido. Se recupero con rapidez, toda la emoción abandono sus ojos para dejarlo con una expresión de sospecha.

-"¿Dabria?"-

Mi corazón comenzó a latir con rapidez. Intente pelear para coordinar mis pensamientos, pero en lo único que podía pensar era que si en serio estaba en el pasado hace 8 meses, entonces ¿como se conocían la Señorita Greene y Patch? Ella todavía no tenía el empleo en la escuela. Y ¿Porque el se estaba dirigiendo a ella por su primer nombre?

-"¿Como has estado?"- La Señorita Greene-Dabria- le pregunto con una sonrisa tímida, tirando la paleta a la basura.

-"¿Que estas haciendo aquí?"- Los ojos de Patch mostraron aun mas sospecha como si pensara que lo que vez es lo que obtienes no se aplicaba a Dabria.

-"Me escape."- Sonrío con un solo lado de la boca. -"Tenia que verte de nuevo. He estado intentándolo por un largo tiempo pero la seguridad, bueno tú sabes. No es exactamente fácil. Mi tipo y tú tipo no se supone que nos mezclemos. Pero eso tu lo sabes."-

-"Venir aquí fue una mala idea."-

-"Se que a pasado un tiempo pero estaba esperando una bienvenida un poco mas amistosa"- Dijo ella haciendo un puchero. Patch no respondió.

-"No he parado de pensar en ti."- Dabria bajo su voz a un tono sexy y se acerco un paso mas a Patch. -"No fue fácil bajar hasta aquí, Luccianna esta haciendo excusas de porque es que estoy aquí abajo para mi. Estoy arriesgando su futuro y el mío. ¿No quieres por lo menos oír lo que tengo que decir?"-

-"Habla."- Las palabras de Patch no mostraban ni un poco de confianza.

-"No he perdido mi esperanza en ti. Todo este tiempo"- Ella dejo de hablar y comenzó a pestañear mostrando lagrimas. Cuando ella hablo de nuevo su voz estaba un poco más compuesta aunque aun tenía una nota triste. -"Se como puedes obtener tus alas de nuevo."- Ella le sonrío a Patch pero el no le devolvió la sonrisa. -"Tan pronto como consigas tus alas de nuevo puedes volver a casa."- Dijo ella ablando con más confianza. -

"Todo va a ser como antes. Nada ha cambiado. No en verdad."-

-"¿Donde esta la trampa?"-

-"No hay ninguna trampa. Tienes que salvar una vida humana. Muy justo considerando el crimen que te dejo aquí en primer lugar."-

-"¿Que rango tendré?"-

Toda la confianza se esfumo de los ojos de Dabria, y a mi me dio la impresión de que el había hecho la única pregunta que ella había esperado evitar. -"Yo te acabo de decir como conseguir de nuevo tus alas"- Dijo ella sonando un poco indignada -"Creo que me merezco por lo menos unas gracias..."-

-"Responde la pregunta."- Pero su sonrisa oscura me dijo que él ya sabía la respuesta. O por lo menos tenía una buena idea. Cualquiera que fuera la respuesta de Dabria, a él no le iba a gustar.

-"Bien. Vas a ser un guardián, ¿Esta bien?"-Patch inclino la cabeza y comenzó a reírse.

-"Que tiene de malo el ser un guardián?"- Pregunto Dabria -"No es lo suficiente bueno para ti?"-

-"Estoy trabajando en algo mejor."-

-"Escúchame Patch. No hay nada mejor. Te estas engañando. Cualquier otro ángel caído saltaría ante la oportunidad de conseguirsus alas de nuevo y convertirse en un guardián.

-"¿Por que tu no puedes?"- Su voz estaba entrecortada por la sorpresa, irritación, y rechazo. Patch se levanto de la mesa.

 -"Fue bueno verte de nuevo Dabria. Ten un buen viaje devuelta."- Sin ninguna advertencia, ella lo agarro por la camisa, lo acerco, y le planto un beso en la boca. Muy lentamente el cuerpo de Patch se volteo hacia el de ella, su cuerpo ablandándose. Levanto las manos y las puso sobre sus brazos. 

Yo trague en seco, intentando ignorar la puñalada de celos y dolor en mi corazón. Parte de mi quería voltearse y llorar, y parte de mi quería caminar hasta allá y comenzar a gritar. No era como que iba a resolver algo. Yo era invisible. Obviamente la Señorita Greene...Dabria...quien sea que fuera...y Patch tenían un pasado romántico juntos.

¿Todavía estaban juntos ahora, en el futuro? ¿Había encontrado trabajo en las secundaria Coldwater estar cerca de Patch? ¿Era por eso que estaba tan empeñada en asustarme para que me alejara de el?

-"Debería irme"- Dijo Dabria, alejándose. -"Ya me he quedado demasiado tiempo. Le prometí a Luciana que me apresuraría."- Ella apoyo su cabeza en su pecho. -"Te extraño"-

Ella susurro. -"Salva una vida humana, y tendrás tus alas de nuevo. Vuelve a mi"- Rogó ella. -"Vuelve a casa."- Ella se separo de repente. -"Tengo que irme. Ninguno de los otros puede enterarse de que estuve aquí. Te amo."-

Tan pronto como Dabria se volteo la ansiedad desapareció de su rostro. Una expresión de astuta confianza la remplazo. Era la cara de alguien que a base de engaños había logrado salirse de una difícil mano de cartas. Sin ningún aviso, Patch la sujeto del brazo.

-"Ahora dime de verdad porque estas aquí"- Dijo él.

Yo temblé ante el tono oscuro que tenia la voz de Patch. A alguien de afuera le parecería que estaba perfectamente calmado. Pero para cualquier persona que lo haya conocido por un tiempo, era obvio. Le estaba dando a Dabria una mirada de que había cruzado la raya y que a ella le convenía volver a saltar hacia atrás ahora. Patch la condujo hacia el bar. La sentó en un taburete y se sentó en el que quedaba alado. Yo tome el de alado de Patch y me incline para poder oírlo por enzima de la música.

-"¿A que te refieres con que porque estoy aquí?"- Tartamudeo Dabria. -"Ya te dije"- 

- "Estas mintiendo."- Se quedo con la boca abierta. -"No puedo creer. Tu crees"-

-"Dime la verdad, ahora mismo"- Dijo Patch.

Dabria titubeo antes de contestar. Le dio una mirada feroz y luego dijo -"Esta bien. Se lo que planeas hacer."-

Patch se río, era una risa que decía tengo muchos planes. ¿A cual te refieres?

-"Se que has oído rumores sobre el libro de Enoch. También se que crees que puedes hacer lo mismo, pero no es así."-

Patch cruzo los brazos en el bar. -"Te mandaron aquí para persuadir de tomar otro curso, ¿Verdad?"- Mostró una pequeña sonrisa. -"Si soy una amenaza entonces los rumores deben de ser verdad."-

-"No lo son. Son rumores."-

-"Si paso una vez puede pasar de nuevo."-

-"Eso nunca paso. ¿Alguna vez te molestaste en leer el libro de Enoch antes de caer?"-

Ella lo reto. -"Sabes exactamente lo que dice, ¿palabra sagrada por palabra?"-

-"Talvez me puedes prestar tu copia."-

-"¡Eso es blasfemia! ¡Tienes prohibido leerlo!"- Grito ella. -"Traicionaste a cada ángel en el cielo cuando caíste."-

-"¿Cuantos de ellos saben lo que me propongo?"- Pregunto él. -"¿Que amenaza tan grande soy?"-

Ella movió su cabeza de lado a lado. -"No te puedo decir eso. Ya te dije mas de lo que debía."-

-"¿Van a intentar frenarme?"-

-"Los Ángeles vengadores lo harán."-

El la miro con muchas intenciones -"A menos que pienses que me convenciste de lo contrario."-

-"No me mires así."- Ella sonaba como que todo su coraje lo estaba utilizando en esa frase para sonar firme. -"No voy a mentir para protegerte. Lo que estas intentando hacer esta mal. No es natural."-

-"Dabria."- Patch dijo su nombre como una amenaza silenciosa. Era lo mismo que estar torciendo su brazo atrás de su espalda.

-"No te puedo ayudar."- Dijo ella con una convicción silenciosa. -"No de esa manera.

Sácalo de tu mente. Conviértete en un ángel guardián. Enfócate en eso y olvídate del libro de Enoch."-

Patch planto sus codos en el ver de manera pensativa. Después de un momento él dijo - "Diles que hablamos y que yo mostré interés en convertirme un guardián."-

-"¿Interés?"- Dijo ella de manera incrédula.

-"Interés"- Repitió él, -"Diles que yo pedí un nombre. Si voy a salvar una vida necesito a alguien que este al tope de tu lista de su lista de personas que se marchan. Se que tu tienes esa información como un ángel de la muerte."-

-"Esa información es sagrada e privada, y no predecible. Los hechos de este mundo cambian en todo momento dependiendo de la decisiones humanas"-

-"Un nombre, Dabria."-

-"Prométeme primero que te vas a olvidar del libro de Enoch. Dame tu palabra."-

-"¿Confiarías en mi palabra?"-

-"No"- Dijo ella -"No lo haría."-

Patch se río fríamente y tomando un palillo del dispensor camino hacia las escaleras.

-"Patch espera"- Ella comenzó saltando del taburete. -"¡Patch por favor espera!"-

El miro por enzima del hombro.

-"Nora Grey"- Dijo ella poniéndose las manos sobre la boca tan pronto lo dijo. Hubo una pequeña fisura en la expresión de Patch, frunció el ceño con una mezcla de incredulidad y molestia. Lo que no tenia sentido ya que si el calendario en la pared estaba bien, ni siquiera nos habíamos conocido. Mi nombre no le debió parecer familiar.-"¿Como va a morir ella?"- Pregunto él.

-"Alguien quiere asesinarla."-

-"¿Quien?"-

-"No se"- Dijo ella cubriendo sus oídos y agitando la cabeza. -"Hay tanto ruido y conmoción aquí. Todas las imágenes se juntan, vienen demasiado rápido y no puedo ver claramente. Necesito irme a casa. Necesito paz y calma."-

Patch metió un mechón del cabello de Dabria detrás de su oreja y la miro de manera persuasiva. Ella tembló con su roce y luego asintió cerrando los ojos. -"No puedo ver...no puedo ver nada...es inútil."-

-"¿Quien quiere matar a Nora Grey?"- Patch la insto.

-"Espera la veo"- Dijo Dabria. Su voz se torno ansiosa.-"Hay una sombra detrás de ella. Es el. El la esta siguiendo. Ella no lo ve...pero el esta justo ahí. ¿Porque ella no lo ve? ¿Porque no esta huyendo? No puedo ver su rostro, es una sombra..."- Los ojos de Dabria se abrieron de repente y respiro muy profundo.

-"¿Quien?"- Dijo Patch.

Dabria se cubrió la boca con las manos y estaba temblando al alzar sus ojos para ver a Patch.

-"Tu"- Susurro ella.

Mi dedo se alejo de la cicatriz de Patch y la conexión se rompió. Me tomo un momento para reorientarme. Así que no estaba lista para Patch, quien lucho conmigo sobre la cama en un instante. Fijo mis muñecas sobre mi cabeza.

-"No se suponía que hicieras eso."- Allí estaba controlado en enojo en su cara, oscura y apunto de explotar. -"¿Que viste?"-

Levante mi rodilla y se la hundí en las costillas -"¡Quítate de encima!"-

Se deslizo sobre mis caderas y se montó sobre ellas, eliminando el uso de mis piernas.

Con mis brazos aun extendidos sobre mi cabeza, no podía hacer más que retorcerme bajo su peso.

-"¡Quítate de encima o gritare!"-

-"Ya estas gritando, y no vas a causar ninguna conmoción en este lugar. Es más un prostíbulo que un motel"- Mostró una sonrisa letal en las comisuras.

-"Ultima oportunidad, Nora ¿Qué viste?"-

Estaba luchando contra las lágrimas. Mi cuerpo entero zumbaba con una emoción tan extraña que no podía ni siquiera nombrarla. -"¡Me das nauseas!"- Dije -"¿Quién eres? ¿Quién eres verdaderamente?"- Su boca se volvió aun más macabra.

-"Nos estamos acercando"-

-"¡Me quieres matar!"- Su rostro no revelo nada, pero sus ojos se volvieron más fríos.

-"¿El jeep no murió realmente esta noche, verdad?"- Dije -"Mentiste, me trajiste aquí para matarme. Eso fue lo que dijo Dabria que quieres hacer. Bueno, ¿Qué esperas?"- No tenía idea a donde iba con esto, pero no me importaba. Estaba escupiendo palabras en un intento de mantener a raya mi horror.

-"Haz tratado de matarme todo este tiempo. Desde el inicio. ¿Me vas a matar ahora?"-

Lo mire fijamente, duramente y sin pestañar, tratando de impedir que las lágrimas se derramaran mientras recordaba el fatídico día en el que él entro a mi vida.

-"Es tentador"- Me retorcí bajo el. Intente rodar a la derecha, luego a la izquierda.

Finalmente comprendí que estaba gastando mucha energía y me detuve. Patch fijo sus ojos en mí. Estaban más negros de lo que jamás los había visto.

-"Apuesto a que esto te gusta"- Dije

-"Esa sería una apuesta inteligente"- Podía sentir mi corazón palpitando hasta en los dedos de mis pies.

-"Solo hazlo"- Dije con tono retador.

-"¿Matarte?"- Asentí. -"Pero primero quiero saber porqué, de los billones de personas en el mundo, ¿Porqué yo?"-

-"Malos genes"-

-"¿Eso es todo? ¿Esa es la única explicación que me das?"-

-"Por ahora"-

-"¿Qué significa eso?"- Mi voz se elevó de nuevo. -"¿Obtendré el resto de la historia cuando finalmente pierdas el control y me mates?"-

-"No tengo que perder el control para matarte, si te hubiera querido matar hace 5 minutos, hubieras muerto hace 5 minutos"- Trague saliva ante el trágico pensamiento.

Rozó su dedo grande gordo sobre mi marca de nacimiento. Su tacto era engañosamente suave, el cual lo hacía aun más doloroso de resistir.

-"¿Y que de Dabria?"- Pregunté, aun jadeando -"Ella es lo mismo que tú, ¿Cierto? Ambos son... ángeles."-- Mi voz se quebró en la palabra.

Patch giró liberando mis caderas, pero mantuvo sus manos en mis muñecas.

-"Si te suelto ¿me vas a escuchar?"-

Si él me soltaba, iba a salir como un rayo por la puerta. -"¿Te importaría si corriera? Simplemente me arrastrarías de nuevo aquí."-

-"Si, pero eso causaría una escena."-

-"¿Dabrina es tu novia?"- Podía sentir cada subida y bajada irregular de mi pecho. No estaba segura si quería oír su respuesta. No es que me importara. Ahora que sabía que Patch quería matarme, era ridículo que incluso me importara.

-"Fue. Lo fue hace mucho tiempo, antes de que cayera en el lado oscuro."- Esbozo una forzada sonrisa, intentando parecer divertido. -"También fue un error."- Se balanceo sobre sus talones, soltándome lentamente, probando para ver si luchaba de nuevo.

Tendida en el colchón, respirando con dificultad, apoyándome en mis codos. Tres minutos pasaron, y me lance a él con toda la fuerza que tenia.

Me acurruque contra su pecho, y otra vez se tambaleo un poco hacia atrás, aun así el no se movió. Me apresure alejarme por debajo de él y lo tome en mis puños. Golpeando su pecho hasta que el inferior de mis puños comenzaron a zumbar.

-"¿Lista?"- Pregunto él.

-"¡No!"- Conduje mi codo hacia abajo a su muslo. -"¿Que pasa contigo? ¿No sientes nada?"-

Me puse de pie, para encontrar mi equilibrio sobre el colchón, y lo patee tan fuerte como pude en el estomago.

-"Tienes solo un minuto más"- Dijo él. -"Para sacar la cólera de tu sistema. Luego me hare cargo"-

No sabía lo que quería decir con "me hare cargo." Y no quería averiguarlo. Salte rápidamente fuera de la cama, con la puerta a la vista. Patch me engancho en pleno vuelo y me arrincono contra la pared. Sus piernas estaban entrelazadas con las mías, frente a frente a lo largo de nuestras muslos.

-"Quiero la verdad"- Dije, esforzándome para no llorar. -"¿Has venido a la escuela para matarme? ¿Fue ese tu objetivo justo desde el principio?"-

Un músculo de la mandíbula de Patch salto. -"Si."-

Limpie una la lágrima que se atrevió a escaparse. -"¿Estas disfrutándolo en tu interior? De eso es lo que se trata, ¿no? Convenciéndome para confiar en ti y así podrías gritarlo en mi cara"- Sabía que estaba siendo irracionalmente furiosa. Debería haber estado aterrorizada o desesperada. Debería haber estado haciendo todo lo posible en mi poder para escapar. La parte más irracional de todo era que todavía no quería creer que él iba a matarme. Y no importara cuanto lo intentara, no podía apagar esa mancha ilógica de confianza.

-"Conseguí que estés enfada"- Dijo Patch.

-"¡Estoy destrozada!"- Grite.

Sus manos se deslizaron por mi cuello, trasmitiendo calor, presionando sus dedos pulgares suavemente en mi garganta, inclino mi cabeza hacia atrás. Sentí sus labios llegando sobre los míos tan fuerte que él detuvo cualquier nombre por el que había estado a punto de llamarlo saliera. Sus manos cayeron a mis hombros, rozando mis brazos, y llegando a descansar en la parte baja de mi espalda. Un pequeño estremecimiento de pánico y placer se dispararon a través de mi. El intento tirar de mí hacia él, y lo mordí en el labio. Lamió su labio con la punta de su lengua. -"¿Acabas de morderme?"-

-"¿Todo es una broma para ti?"- Pregunte.

Paso su lengua sobre sus labios de nuevo. -"No todo."-

-"¿Como que?"-

-"Tu."-

La noche entera se sentía desequilibrada. Era difícil tener una confrontación con alguien tan indiferente como Patch. No, no indiferente. Perfectamente controlado. Hasta la ultima célula de su cuerpo.

Escuche una voz en mi mente. "Relájate, confía en mí".

-"Oh dios mío"- Dije con un estallido de claridad. -"¿Estas haciéndolo de nuevo, no es así? Jugando con mi mente."- Recordé el artículo que había sacado de google sobre ángeles caídos. -"Puedes poner más que palabras en mi cabeza, ¿no? Puedes poner imagines, imágenes muy reales, allí"-

El no lo negó.

-"El Arcángel"- Dije, finalmente comprendiendo. -"Intentaste matarme esa noche, ¿no es así? Pero algo salió mal. Luego me hiciste pensar que mi teléfono celular estaba muerto, así no podría llamar a Vee. ¿Planeabas matarme de camino a casa? ¡Quiero saber como estas haciéndome ver lo que tu quieres!"-

Su cara era cuidadosamente inexpresiva. -"Pongo las palabras e imagines allí, pero depende de ti si las crees. Es un enigma. Las imagines superponen la realidad, y tienes que averiguar cual es real."-

-"¿Ese en un poder especial del ángel?"-

Sacudió su cabeza. -"El poder del Ángel Caído. Alguna otra clase de ángel no invadiría tu intimidad, aunque pueden."-

Porque los otros ángeles eran buenos. Y Patch no lo era. Patch apoyo sus manos contra la pared detrás de mí, una a cada lado de mi cabeza.

-"Puse un pensamiento en la mente del entrenador para rehacer la lista de ubicaciones porque necesitaba estar cerca de ti. Te hice pensar que caíste del Arcángel porque quería matarte, pero no pude llevarlo a cabo. Casi lo logro, pero me detuve. En cambio me conforme con asustarte. Luego te hice pensar que tu celular estaña muerto porque quería llevarte de vuelta a casa. Cuando entre a tu casa, cogí un cuchillo. Iba a matarte entonces."- Su voz se suavizo. -"Tu cambiaste mi mente."-

Tome un profundo suspiro. -"No te entiendo. Cuando te dije que mi padre fue asesinado, sonabas sinceramente dolido. Cuando conociste a mi mama, estabas bien."-

-"¿Bien?"- Repitió Patch. -"Vamos a mantener eso entre tu y yo."-

Mi cabeza giraba rápidamente, y podría sentir mi puso latiendo en mi cien. Había sentido este pánico, palpitando antes. Necesitaba mis píldoras férricas. O eso, o Patch me estaba haciendo pensar que las necesitaba. Incline mi barbilla y estreche mis ojos. -"Sal de mi mente. ¡De inmediato!"-

-"No estoy en tu mente, Nora."-

Me incline hacia adelante, apoyando mis manos sobre mis rodillas. Tragando aire. -"Si, lo estas. Te siento. ¿Así es como vas hacerlo? ¿Sofocándome?"-

Sonidos suaves zumbaban haciendo eco en mis oídos, y un negro borroso enmarco mi visión. Intente llenar mis pulmones, pero era como si el aire hubiera desaparecido. El mundo se inclino, y Patch resbalo de reojo en mi visión. Plante mi mano en la pared para mantener mi equilibrio. Más profundo intente inhalar, el apretón más fuerte en mi garganta.

Patch se acerco hacia a mí, pero saque mi mano de inmediato. -"¡Aléjate!"-

Apoyo un hombro en la pared y me dio la cara, su boca se fijo de preocupación.

-"Aléjate – de – mi."- Jadee.

El no lo hizo.

-"¡No – puedo – respirar!"- Me ahogaba, arañando la pared con una mano, y agarrando mi garganta con la otra.

De repente Patch me alzo y me cargo con la silla por la habitación.

-"Pon tu cabeza entre tus rodillas"- Dijo él, guiando mi cabeza hacia abajo.

Tenía mi cabeza abajo, respirando rápidamente, intentando mantener el aire dentro de mis pulmones. Muy despacio sentí el oxigeno fluyendo de nuevo en mi cuerpo.

-"¿Mejor?"- Pregunto Patch después de un minuto.

-"¿Tienes las píldoras férricas contigo?"-

Sacudí mi cabeza.

-"Mantén tu cabeza abajo y toma profundas respiraciones prolongadas."-

Seguí sus instrucciones,sintiendo una mordaza aflojarse alrededor de mi pecho. -

"Gracias"- Dije en voz baja.

-"¿Todavía no crees mis motivos?"-

-"Si quieres que confié en ti, déjame tocar tu cicatriz de nuevo."-

Patch me estudio silenciosamente por un largo rato. -"Esa no es una buena idea."-

-"¿Porque no?"-

-"No puedo controlar lo que ves."-

-"Ese es el punto."-

Espero unos minutos antes de responder. Su voz era baja, emociones indescifrables. - "Sabes que no estoy escondiendo cosas"- Había una pregunta sujeto a ello.

Sabía que Patch vivió una vida de puertas cerradas y secretos albergados. No era lo suficientemente presuntuosa para creer que incluso la mitad de ellos giraba alrededor de mí. Patch vivió una vida diferente aparte de la que compartió conmigo. Más de una vez me había especulado como podría ser su otra vida. Siempre tenía la sensación de que cuanto menos supiera sobre ello, mejor.

Mi labio tembló. -"Dame una razón para confiar en ti."-

Patch se sentó en la esquina de la cama, el colchón se hundió bajo su peso. Se inclino hacia adelante, apoyando sus antebrazos en sus rodillas. Su cicatriz estaba por completo a la vista, la luz de la vela danzaba sombras misteriosas a través de su superficie. Los músculos en su espalda aumentaban, luego se relajaban. -"Adelante"- Dijo él silenciosamente. -"Ten en cuenta que la gente cambia, pero en pasado no."-

De repente no estaba tan segura si quería hacer esto. En casi todos los niveles, Patch me aterraba. Pero en el fondo, no creía que él fuera a matarme. Si eso era lo que él quería, ya lo hubiera hecho. Eche un vistazo a sus horribles cicatrices. Segura de que Patch se sentía mucho más cómodo que caer en su pasado de nuevo y sin tener idea de lo que pudiera encontrar.

Pero si me echaba para atrás ahora, Patch sabría que estaba aterrorizada de él. El estaba abriendo una de las puertas cerradas solo para mí y solo porque se lo pedí. No podría hacer una petición así de fuerte, luego cambie de opinión.

-"¿No quedaré atrapada allí para siempre, verdad?"- Pregunte.

-"No"-

Convocando mi valor, me senté en la cama junto a él. Por segunda vez esta noche, mi dedo rozo el borde de la cima de su cicatriz. Una nebulosa gris lleno mi visón, consiguiendolo de vez en cuando. Las luces se apagaron.

Próximo capítulo