Alabanzas

Después de conversar con los invitados, Tang Xiu se fue porque todavía tenía algunas cosas que hacer. Cuando estaba justo en la puerta, vio a Qin Ling acercándose, con los ojos mirando a su alrededor como si estuviera buscando a alguien.

"Oye, amigo. ¡Resulta que estás aquí!" Al ver a Tang Xiu, los ojos de Qin Ling se iluminaron cuando gritó y se acercó.

"¿Me has estado buscando?" preguntó Tang Xiu con una sonrisa. "¿Pasa algo?"

"Nada serio. Es solo que solo vi algunas caras conocidas aquí", dijo Qin Ling sonriendo. "Te dije que estamos destinados desde que nos conocimos afuera, ¿no? Además, quiero presentarte a un amigo mío. Sin embargo, no lo menosprecies. La identidad de mi amigo es un poco inusual".

"¿Te importaría decir quién es este amigo tuyo?" preguntó Tang Xiu sonriendo.