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El rostro angular de Shen Zhilie se veía lindo y, a primera vista, parecía agradable. Cuando Yu Lili lo vio, ella frunció el ceño y luego se dio la vuelta y volvió a entrar.
Shen Zhilie inmediatamente dio un paso adelante y gritó: — Lili, Lili, esto es para ti.
Sin embargo, Yu Lili se alejó más rápido de él.
Shen Zhilie la siguió rápidamente y le dijo: — ¡Lili, no seas tan despiadada! ¡Dame una oportunidad!
Todos sus colegas miraron con expresiones divertidas o burlonas.
Bajo tales miradas, ella se volvió impaciente y gruñó, — ¿Has terminado?
Shen Zhilie puso las rosas en sus brazos, luego sonrió y dijo: —Mira, eso es todo lo que quería.
Ye Qianqian se estaba sirviendo una taza de agua. Al oír la conmoción, se acercó y miró con envidia las flores. —Guau, qué hermoso ramo. Lili, ¿este es tu novio? ¡Es tan guapo!
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