—Ya cumplí con mi acuerdo y te liberé de la Esfera Atrapa Espíritus. ¡Lo que ocurra a continuación no es parte del contrato!
La voz de Leylin sonaba extremadamente despreocupada.
Esto era sólo un simple juego de palabras. Todos los Magos eran personas inteligentes, y no se les podía mentir fácilmente.
Sin embargo, Roman era diferente. Ya había muerto hacía mucho tiempo, y su cuerpo espiritual se había transformado en un espíritu vengativo. Naturalmente, su inteligencia no podía ser comparable a la de un humano promedio.
Además, al pasar tanto tiempo dentro del laboratorio, Leylin había estado ejercitando diligentemente varios métodos para reducir la inteligencia de Roman, haciéndolo más confuso para interrogarlo.
Como era de esperar, incluso si Roman recuperó inesperadamente hoy su inteligencia, al borde de su muerte, estaba aún siendo manipulado por Leylin, y entregó importante información sobre la técnica avanzada de meditación.
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