No es cosa del Jefe

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Xue Xi se sobresaltó al escuchar esto.

De su manera aparentemente sensata, pero en realidad irrazonable, Liu Yiqiu continuó:

—Obtuviste el Primer Lugar en la Competencia Estrella de Matemáticas, así que definitivamente tendrás un buen desempeño en la Competencia Nacional también. Esto significa que obtendrás una admisión directa a la universidad, y por lo tanto, la Olimpiada de Física es solo un complemento para dar el toque final. Pero tu hermana menor también puede obtener una admisión directa si obtiene la posición entre los primeros sesenta. La noticia de ambas hermanas de la familia Xue obteniendo admisiones directas se vería bien para nosotros.

Anciana Xue estaba inclinada hacia la idea:

—Sí, entonces nuestra familia puede deshacerse de la reputación de nuevos ricos. Xue Xi, retírate de la clase de la Olimpiada de Física mañana.

Xue Xi miró apáticamente a las tres personas. Hizo una pausa por un momento, luego dijo:

—Los primeros sesenta obtendrán todos una admisión directa.

Lo que ella quería decir era: Aparte de la mía, habría otras 59 posiciones.

Aunque Xue Yao era buena en Física, no estaba entre la crème de la crème del grupo. Por lo tanto, si le daba la oportunidad o no era irrelevante.

Liu Yiqiu sonrió:

—Tener un competidor menos significa tener una mayor posibilidad, ¿no es así? Xixi, ¿estás de acuerdo? La Segunda Tía te dará otro Hermes.

—¿Dar qué? Con ese dinero, preferiría que compraras otro vestido para nuestra Yaoyao —regañó Anciana Xue—. Somos familia y debemos ayudarnos mutuamente. ¡Este asunto está decidido! Xue Xi, ¿me escuchas?

Xue Xi respondió lentamente:

—Sí.

Una rara sonrisa floreció en el rostro de la anciana:

—Así me gusta…

—…Pero no estoy de acuerdo.

La sonrisa de la anciana se congeló:

—¿Qué?

Sin darle otra mirada, Xue Xi devolvió la caja de regalo a Liu Yiqiu y se dirigió directamente hacia las escaleras.

Anciana Xue gritó:

—¡De veras es una ingrata que no se puede educar! Sabía que solo traería infortunio a nuestra casa. ¡Y también su madre! ¡Ni siquiera puede hacer bien las cuentas y aún sigue confundida con ese desorden. Yiqiu, ahora que has vuelto, ¡hazte cargo de los asuntos de la familia!

Un destello cruzó la mirada de Liu Yiqiu:

—Mamá, hablaremos de esto después.

A mitad de las escaleras, Xue Xi se detuvo al escuchar esto. Luego se dirigió a la sirvienta que limpiaba en el segundo piso:

—¿Dónde está mi mamá?

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—Está en el jardín del patio trasero —con una mirada reflexiva, asintió, subió las escaleras para dejar su bolso, luego bajó las escaleras hacia la parte trasera de la casa.

…

Ye Li tenía un dolor de cabeza insoportable.

Las cuatro personas en la cocina habían pasado la culpa sobre el incidente del desayuno. Al final, la verdad no pudo encontrarse. Por lo tanto, decidió cortar medio mes de salario a cada uno de ellos y promovió a Xiao Fang como la supervisora de la cocina. Si algo sucediera de nuevo en el futuro, iría directamente a buscarla.

Este método era uno que Xue Sheng usaba para la empresa. Sería un método igualmente útil aquí.

Sin embargo, después de todo un día, la casa parecía estar en un desorden.

Había estado tan ocupada que no había tenido tiempo para descansar. Ahora, incluso todavía estaba compilando la factura de agosto y el gasto de septiembre con la persona a cargo de las finanzas.

La persona a cargo de las finanzas del hogar era el sobrino de la Anciana Xue por parte de su familia materna, Liu Hao. Era un hombre de unos cuarenta años que no le daba ninguna importancia a Ye Li. Actualmente estaba informando con una sonrisa:

—...Señora, mire esta página. Muestra el gasto diario. Los huevos cuestan 2.80 yuanes cada uno. Se utilizan cincuenta huevos para las comidas de los miembros de la familia diariamente y otros cincuenta para los empleados. Usamos 89 huevos al principio del mes para el banquete. Además, los huevos son frágiles y hubo algunas pérdidas durante el transporte. Las pérdidas son del 2%. Este es el gasto de huevos, y también están los de verduras, cerdo, res, pollo... Señora, ¿ha recordado todo esto? —preguntó.

—... —Ye Li se frotó las sienes—. Informa el monto total —pidió.

Liu Hao dio una cifra exagerada.

Ye Li frunció el ceño. Sintió que no tendrían que usar tanto dinero. Sin embargo, ¡Liu Hao ora bien informaba el costo de cada artículo hasta el mínimo detalle, ora inmediatamente informaba el monto total para pedir dinero. Era totalmente poco cooperativo!

Incluso amenazó:

—Señora, la anciana señora lo manejaba así también en el pasado. Nunca ha pasado nada. Mire, ya está oscureciendo. Por lo tanto, apúrese y permítame reclamar el dinero para el próximo mes para que pueda seguir adelante y organizar las cosas. De lo contrario, si retrasamos los eventos del próximo mes, el viejo maestro se enojará de nuevo.

Mañana era primero de septiembre. Si no cedía ahora, ¡él se atrevería a detener todos los suministros para mañana y echarle la culpa a ella!

Ye Li estaba tan furiosa que le dolía el pecho.

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Liu Hao dio una sonrisa de suficiencia. Había estado manejando los gastos del hogar durante muchos años y había desviado bastante dinero desde hace tiempo.

¡Que intentara hacer que redujera los gastos diarios con solo una Ye Li recientemente nombrada! ¡Eso es imposible!

Al ver que Ye Li se negaba a ceder, dijo con desprecio —Señora, apúrese. Todo afuera necesita dinero. Si no puede tomar una decisión, entonces debería simplemente devolver los derechos de administración del hogar a la anciana señora.

El rostro de Ye Li se tornó rojo y verde por la burla.

Justo cuando Liu Hao se sentía complacido, una voz fría sonó —El costo total de los huevos es de 8,825.71429 yuanes.

Liu Hao —¿?

Se dio la vuelta y vio a Xue Xi acercándose lentamente.

La chica todavía estaba vestida con su uniforme y tenía una cola de caballo. Mientras avanzaba lentamente, desprendía un aura inexplicablemente opresiva.

Sus ojos estaban bajos mientras se paraba al lado de Ye Li, como protegiéndola. Luego miró a Liu Hao —Puedes informar sobre las verduras ahora.

No creyendo que pudiera repetir la hazaña, de inmediato informó —Los cálculos de las verduras son aún más complicados. La casa consume vegetales orgánicos y por lo tanto los precios son más caros. Además, los precios también son diferentes cada día. El primero, las espinacas eran 500 gramos, los brotes de bambú eran un kilogramo...

Habló durante cinco minutos y reportó las verduras usadas durante todo el mes. Despreciando a Ye Li, incluso él mismo estaba un poco mareado por el informe, así que la lenta Xue Xi debería estar aún más confundida, ¿no?

¡Ay! —justo cuando terminó de hablar, Xue Xi le devolvió un número exacto! ¡Quedó completamente atónito y horrorizado!

Xue Xi continuó impasible —Continúa.

Liu Hao ya estaba sudando frío en ese momento.

¡El cálculo mental de esta chica es más rápido que el de un ordenador!

Se secó el sudor y, bajo las insistentes indicaciones de Xue Xi, informó algunos artículos más.

Media hora después, ya tenía las piernas como gelatina. Eso era porque las cuentas estaban llenas de agujeros y errores.

Originalmente había planificado el tiempo adecuadamente para que Ye Li no tuviera tiempo de conseguir a alguien más para revisar las cuentas. Por lo tanto, no se preparó a fondo, pero ahora...

Xue Xi empleó una hora y media y recalculó todas las cuentas. Al final, descubrió que Liu Hao había informado 800,000 yuanes más que el monto real!

Ye Li tomó directamente el libro de cuentas, dejando a Liu Hao sentado solo en el suelo.

...

Xue Xi no se preocupó por lo que sucedió después.

Después de cenar y mientras estudiaba, pudo escuchar vagamente el rugido furioso del Viejo Maestro Xue y a Anciana Xue suplicando por perdón.

Al día siguiente, Ye Li le informó que Liu Hao había sido despedido.

Con la familia maternal de Anciana Xue completamente eliminada, nadie en la familia Xue se atrevía a crear problemas de nuevo.

Xue Xi asintió y partió hacia la escuela.

Como de costumbre, se bajó en la tienda de provisiones, y después de desayunar, tomó las manos de Xiang Huai durante dos minutos. En esos dos minutos, se dignó a mirarlo.

Cuando su corazón ya no le dolió, se preparó para levantarse con una expresión fría. En ese momento, Lu Chao de repente dijo —Estudiante Xue, lo extraño que te sucedió en realidad no fue obra del Jefe.

Xue Xi giró lentamente la cabeza al escuchar esto —...¿Qué?

Lu Chao decidió que ya no le importaban las consecuencias.

Desde que ella comenzó a ignorarlo, su jefe siempre tendría un aspecto sombrío. ¡No podía seguir así en la tienda de provisiones!

No importaba lo que pasara, tenía que explicar todo claramente. ¡No podía dejar que Xue Xi siguiera malinterpretando la situación!