Capítulo 30: La ira rezumando en los ojos negros

Una oportunidad que otros suplican por obtener y nunca pueden tener hoy ha caído en su hija. ¿Cómo no iba a aprovecharla?

—Pero... —Ya Nian'er todavía tenía sus dudas, mirando nuevamente a Ya Molian.

El hombre era una figura notable en la aldea, era ampliamente conocido que Ya Molian tenía bastante fortuna, ella, por supuesto, deseaba tal riqueza.

Sin embargo, en ese momento, Ya Molian estaba inconsciente, sin lesión ni sangre aparentes, no pudo evitar preguntarse si padecería de alguna dolencia oculta.

De lo contrario, ¿por qué los numerosos pretendientes que llegaban a su puerta proponiendo matrimonio nunca obtenían su aprobación?

Cuanto más lo pensaba, más probable le parecía.

Incluso si él era rico, si eso significaba casarse con un hombre con problemas de salud, ¿cómo podría aceptar? Ella era la chica más bella de la aldea, podía elegir a cualquier hombre que deseara.

—Padre, no forcemos las cosas. Si Ya Molian despierta y se entera de que hemos estado conspirando, podría enfurecerse... —Ella negó con la cabeza, aún sin atreverse a dar tal paso.

—¿Qué enfado? ¡Que Ya Molian se case con mi preciosa pequeña es la suerte de su entera estirpe! —el hombre bufó molesto.

¿Qué podría hacer una vez que despertara y todo estuviera decidido? ¿Se atrevería a escabullirse?

Incluso si quisiera oponerse, tendría que ser capaz de hacerlo.

—Nian'er, escucha a tu padre. Esta es una oportunidad rara, ¿entiendes? Simplemente desvístete y métete en la cama. Una vez hecho, haré que Ya Molian sea nuestro yerno que se queda en casa, haciendo que todo su dinero sea nuestro. —Soñaba con tener a Ya Molian en casa como su yerno, entonces toda la cubilosa que cosechase o la caza que obtuviese serían suyos, para consumir o vender a su antojo.

Además, ya que sería su yerno, todas las tareas domésticas podrían ser cargadas en él, facilitándole la vida al hombre.

¡Qué buen trato, matar dos pájaros de un tiro!

—Yo...

—Hermana mayor, ¿estás esperando a que el Hermano Molian despierte? —Mientras Ya Nian'er dudaba, Ya Sui'er, pálida, la recordó.

Ella se había ofrecido, pero Padre insistió en enviar a la Hermana mayor. Sin embargo, viendo la reticencia de la Hermana mayor...

—Hermana mayor, ¿todavía sueñas con una familia más prometedora? El Hermano Molian ya es suficientemente bueno. No solo en nuestra aldea sino incluso más allá, ¿hay algún hombre tan capaz como Ya Molian? Puede cosechar cubilosa y cazar; lo mejor es que no hay ancianos en casa. Así que, no hay preocupación por servir a los suegros – puedes hacer lo que quieras. A pesar de todo esto, todavía vacilas; ¿estás siendo tonta?

—Yo...

Tras el recordatorio de su hermana, Ya Nian'er volvió a la realidad.

De hecho, mientras tenga suficiente dinero para que ella gaste, ¿por qué debería importarle su salud? Ella, Ya Nian'er, no era ninguna pusilánime; si realmente era problemático, simplemente podría echarlo una vez hubiera ganado lo suficiente.

Pensando en esto, su vacilación desapareció.

—Padre, sal y vigila la puerta con la hermana pequeña, yo...

—¿Qué quieres hacer? —Antes de que pudiera terminar, una voz profunda sonó junto a su oído.

El trío se sobresaltó y se volvió a mirar a Ya Molian en la cama, casi gritando en voz alta.

Ellos no sabían que Ya Molian había recuperado la conciencia y sus ojos ahora llenos de enojo, mirando a las tres personas frente a él.