GRAN REVELACIÓN SOBRE EL REY

—Después de que Amanecer estuvo llena y se limpió, Cenit la llevó al dormitorio del Rey. Podía sentir los ojos de los guardias y guerreros sobre ella mientras caminaban, como si fueran a cavar un hueco en su espalda.

 

—Cenit, vas a crear un rumor innecesario si caminamos juntos así hacia el dormitorio del Rey —Amanecer frunció el ceño, se sentía como una amante.

 

La gente sabía que ella había estado preparándose para su ceremonia con Cenit, pero para que ella caminara de ida y vuelta al dormitorio del Rey libremente, haría que la gente hablara.

 

Amanecer miró a Cenit, pero no pudo ver qué tipo de expresión hacía detrás de esa máscara dorada, él tampoco dijo nada en absoluto, lo que la hizo mantener la boca cerrada.

 

Una vez que entraron en la habitación, solo estaba Piros al lado del Rey, hablando en voz baja, mientras que Zander se veía pálido, pero estaba vivo de todas maneras.