Parker colocó suavemente a Bai Qingqing sobre el montón de hierba y le dijo tiernamente:
—Qingqing, iré a buscarte un poco de miel. Espérame.
—Mm, mm —Bai Qingqing se sintió aliviada de que el médico no haya descubierto su mentira.
Después de que Parker se fue, el médico también se marchó. Ahora, Memi y Bai Qingqing eran las únicas que quedaban en la casa.
Memi se sentó junto a Bai Qingqing y se sintió conflictuada durante un largo rato, antes de decir finalmente:
—Dado que las cosas han llegado a este estado, te diré cómo eliminar la marca de cónyuge.
—Está bien —dijo Bai Qingqing con calma.
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