Paragones en todas partes

Con un pensamiento, el Libro del Destino apareció.

El valor de suerte actual de Lu Ming había llegado a 2500 puntos.

Esto debería ser el aumento de las frutas del elefante de diez mil que había capturado la última vez.

Había aumentado más de 2000 puntos.

De aquí, se podía ver cuán asombrosa era la cantidad de valor del destino que uno podía obtener al buscar lugares extraños y aprovechar oportunidades.

Con un solo pensamiento, el Libro del Destino desapareció.

Lu Ming sacó el mapa que había obtenido del Dios de tres ojos y lo estudió.

Dentro de un radio de 100000 millas, solo la Montaña de la Doble Luna y el acantilado del ave divina son extraños. ¡Es muy probable que haya tesoros u oportunidades dentro!

Lu Ming miró el mapa por un rato y lo guardó.

—Vamos a ir primero al acantilado del ave divina a echar un vistazo.

Lu Ming eligió un lugar al azar y voló hacia el acantilado del ave divina según las marcas en el mapa.