Una idea- Oh No...

"Tarde en la noche, Nora y Demetri caminaban de la mano a lo largo del muelle, disfrutando de la brisa fresca, sus pasos al unísono. Nora no pudo evitar suspirar. Ya había aceptado que se había enamorado de este hombre y aún así, ver este lado romántico, relajado y divertido de él la hizo caer más profundo. Todo el día había estado pensando en cómo enamorarlo y hacerlo caer por ella pero en cambio, ella era la que se estaba enamorando cada vez más. 

Y de alguna manera ella sentía que no tenía que hacer que él se enamorara de ella. Su corazón parecía estar seguro de que, no importa cuán imposible se sintiera, cuán ridículo pudiera ser, quizás sólo quizás, Demetri también estaba enamorado de ella. Y esa estúpida creencia la hizo querer confesarle su amor a él precisamente en este momento. Ella confiaba en él de que él no rompería su corazón.