¡No digas su nombre!

Un poco antes de que Peter entrara en escena, estaba ocupado lidiando con otra persona problemática.

Después de que Flora fuera golpeada por Gorgath el Celestial, fue atrapada por nada menos que el gran espectro Peter. Tenía sus manos en sus hombros, agarrándolos fuertemente con una gran cantidad de presión, en cualquier segundo, si quisiera, podría apretar y hacer añicos los hombros de los demás.

—Escapaste de mí antes, pero no pienses ni por un segundo que escaparás de mí esta vez. —Peter sonrió.

Al darse cuenta de quién la sostenía, un sentimiento de miedo se apoderó de todo el cuerpo de Flora. Sin pensarlo, comenzó a balancear la gran espada en su mano.

A mitad del movimiento, lo que estaba viendo de repente cambió, ya que estaba viendo el suelo y el cielo, todo al revés. Fue entonces cuando se dio cuenta de que estaba en el aire en ese momento.