Capítulo 675: Mi sitio (Editado)

Un rayo de luz verde pálido salió volando de la punta de la varita de Harry, dirigiéndose directamente a Dumbledore.

El grupo se quedó atónito por lo repentino del ataque, incluso el gato acurrucado en los brazos de la profesora McGonagall dejó de ronronear y miró a Harry con los ojos muy abiertos.

Sin embargo, Dumbledore actuó como si hubiera estado preparado, estiró su mano para sostener la varita que había salido de su manga, y luego golpeó ligeramente un adorno de metal en la mesa, que inmediatamente se expandió y salió volando.

La maldición asesina golpeó el adorno, hizo un "estallido" y luego se desintegró rápidamente sin causar ningún daño.

"No puedes matarme así, Tom" Dumbledore miró a Harry con indiferencia, incluso si el hechizo de ahora no fuera bloqueado, como mucho haría que le sangrara la nariz.

"Hmph…" Harry se burló inconscientemente.

Al mismo tiempo, el odio que sentía se desvanecía rápidamente, seguido de un dolor agudo en la cicatriz de su frente.

"¡Ah!"

Harry tiró rápidamente su varita y cayó de rodillas, cubriéndose la cicatriz.

"Harry, ¿estás bien?"

(ΦωΦ)

Fish saltó de los brazos de la profesora McGonagall, y corrió hacia él para darle un hechizo [Estabilizador] y un hechizo [Rejuvenecedor].

Y Dumbledore rodeó el escritorio, fue al lado de Harry y le ayudó a levantarse del suelo.

"Profesor, profesor..." Harry intentó tirar del brazo hacia atrás, pero Dumbledore se lo sujetó con fuerza.

Miró a Dumbledore horrorizado y explicó incoherentemente: "Es que... no... no he sido yo... no sé..."

"Sé que no fuiste tu, pero por eso te pido que aprendas Oclumancia cuanto antes". Dijo Dumbledore en voz baja.

Vio que Harry aún parecía angustiado, así que añadió tranquilizador: "Pero no te preocupes demasiado, fue porque primero te agotaron los sueños de Voldemort, y luego tus emociones fluctuaron tan violentamente que Voldemort pudo aprovecharse de ello. Y la Maldición Asesina era tan débil que no podía herir a nadie, eso es todo lo que podía hacer."

"Además, no es tan fácil para Voldemort controlar tus acciones, también le drenaría la energía, y no puede vigilarte todo el tiempo".

Con las tranquilizadoras palabras de Dumbledore, Harry se sintió un poco más tranquilo, y al mismo tiempo sintió una fuerte urgencia por practicar la Oclumancia que había estado aflojando. Después de todo, no quería que llegara el día en que de repente y sin control atacará a sus amigos y familiares.

"Qué demonios, pensé que era Harry el que quería pelear con Albus también..."

(?ω?)

Dijo Fish con cara de aburrimiento.

La profesora McGonagall golpeó a Fish en la cabeza, y luego se volvió hacia Dumbledore: "Entonces, ¿Voldemort se tomó todas estas molestias, sólo para que Harry te atacará?".

"No", negó Dumbledore con decisión: "Él habría sabido que eso no me haría daño, debe haber una razón más profunda para que creara falsos recuerdos para engañar a Harry".

Frunció el ceño y reflexionó un momento, luego le dijo a Harry: "Harry, cuéntame otra vez lo que soñaste antes, incluyendo todos los detalles que puedas recordar."

El sueño anterior era tan impresionante, y lo había repetido tantas veces durante tanto tiempo, que Harry podía relatarlo sin recordar demasiado.

Todos, incluidos los sucesivos directores en el retrato, y Sirius y Moody en el extremo del espejo doble, escuchaban en silencio.

De vez en cuando, Fish intentaba interrumpir con una pregunta, pero la profesora McGonagall lo detenía con una mirada severa, así que Fish tuvo que resoplar, metiéndose cucarachas en la boca y masticándolas deliberadamente con un sonido de "clic-clac-clac".

"¿Quieres decir que... Voldemort dijo que no podía conseguirlo él mismo, que Sirius tendría que conseguirlo?". confirmó Dumbledore con expresión indiferente mientras escuchaba el relato de Harry.

Harry asintió y contestó: "Sí, en el sueño Sirius no cedía, y entonces Voldemort lo torturaba con la Maldición Cruciatus, y luego me despertaron Ron y los demás."

"¡Pero eso no está bien!" En el espejo, Sirius gritó sorprendido: "¿No debería... esa cosa, solo Voldemort y Harry pueden conseguirla?". Luego dijo con un sobresalto: "¿Está tratando de atraer a Harry para conseguirlo? Pero eso no tiene sentido..." dijo Sirius, confundido de nuevo.

"Alastor, ponte en contacto con Arthur..." Dumbledore sacudió la cabeza a media frase, "No, para estar seguro, será mejor que vaya yo mismo... Fawkes".

Hizo una seña al fénix, que descansaba en una percha.

Fawkes agitó las alas y se posó en el hombro de Dumbledore.

"Esperarás aquí mi mensaje". Dijo Dumbledore, y con un destello de fuego, él y Fawkes desaparecieron de la vista...

También se llevó con él a cierto gatito que de pronto alargó la mano y le agarró la túnica.

...

En la sala principal del Ministerio, Fish y Dumbledore se miraban fijamente, mientras Fawkes se marchaba tras un suave grito.

"Vas a luchar contra Voldemort, ¿verdad? ¡Fish también va!"

(?ω?)

Exclamó Fish con un brillo en los ojos.

"Bien..." Dumbledore suspiró impotente, y luego dijo: "Pero tienes que prometerme que no harás nada sin permiso".

"No hay problema nya". Fish asintió rápidamente con la cabeza y se puso obedientemente al lado de Dumbledore.

Volver atrás no era una opción, y cualquier cosa que el viejo malo quisiera, él la aceptaría primero.

Pero Fish, siempre inquieto, no había tardado mucho en estar junto a Dumbledore antes de empezar a mirar a su alrededor.

(°ω°≡°ω°)

"Albus, ¿no es éste el Ministerio de Magia? ¿Por qué está Voldemort aquí?" Preguntó Fish con curiosidad.

Fish había estado aquí hacía unos años, cuando la profesora McGonagall lo había traído para matricularse como Animagus.

Luego señaló la fuente dorada en medio del vestíbulo principal y se burló: "Fish solía pensar que los elfos domésticos de esa fuente eran tan estúpidos... que les salía agua por las orejas".

"Esto sí que es el Ministerio de Magia". Dumbledore también miraba a su alrededor, se dio cuenta de que no había nadie en el vestíbulo principal y frunció el ceño. "Tenemos que ir ahora al Departamento de Misterios y ver si esa cosa sigue allí, no vaya a ser que nos encontremos con Voldemort."

"¿Qué es esa cosa nya?"

(?ω?)

Preguntó Fish con curiosidad.

En cuanto a la posibilidad de no toparse con Voldemort, a Fish realmente no le importaba, sólo era un perdedor, así que si no podía toparse con él, sería divertido visitar el Ministerio de Magia.

La última vez, Fish estaba en forma de gato, siendo llevado por la profesora McGonagall todo el tiempo, y no había tenido la oportunidad de vagar adecuadamente.

"Bueno...", titubeó Dumbledore, pero dijo con sinceridad, "Es un orbe de profecía, contiene profecías sobre Harry y Voldemort, y sólo aquellos cuyas profecías los involucran pueden obtener profecías sobre ellos del Departamento de Misterios"

"Profecía..."

(?ω?)

Fish perdió el interés en cuanto oyó que estaba relacionado con una profecía, había engañado a Umbridge con la profesora Trelawney, y en la mente de Fish, profecía = engaño.

Así que Fish volvió a centrar su atención en el Ministerio y siguió mirando a su alrededor.

Aparte de eso, era un lugar bonito... excepto por la fuente, que era un poco tonta.

Con eso en mente, Fish volvió a cambiar repentinamente a su forma de gato y encontró unos cuantos lugares que parecían buenos, rascándose las patas o frotándose la mejilla contra ellos de vez en cuando, dejando las marcas de sus patas y su olor como huella.

Fish había querido marcar este lugar como suyo cuando llegó hace unos años, pero la profesora McGonagall le había puesto freno y no había podido hacerlo.

Pero...

A partir de hoy.

¡Este es ahora el territorio de Fish!

(=?ω?=)