Capítulo 101: Los celos de Snape

Las líneas negras en el mapa del Merodeador formaban cada detalle del castillo y los terrenos de Hogwarts. Pequeños puntos de tinta se movían a su alrededor, cada uno etiquetado con un nombre en minúsculas letras.

Ivan se inclinó hacia adelante, sosteniendo firmemente su varita en su mano derecha.

Reunió todo el poder mágico en su cuerpo debido a la inmensa tensión; casi podía oír el sonido de los latidos de su propio corazón. Estaba esperando que apareciera el nombre de Peter.

Y luego, ¡BANG!

De repente, la rata se escapó del bolsillo a Ron. Saltó a la mesa tirando el plato y el vaso de leche de Ron. Se derramó mucha leche y se fue en la dirección del mapa. Harry se apresuró a tomar el mapa.

Ron se puso de pie apresuradamente y limpió la mesa, pero más platos fueron tirados al suelo.

La carne picada, la mantequilla, el pan, los platos y la leche estaban salpicados por todas partes, e Ivan, Harry y Hermione se pusieron de pie a toda prisa.

En el pánico, Scabbers saltó rápidamente al suelo y salió corriendo de la sala común.

"¡Oh, Scabbers!" Ron dio pasos hacia su dirección.

Los ojos de Ivan estaban fijos en él y su mano sostenía firmemente su varita. Estaba dispuesto a petrificarlo, pero fue inútil. Cuando tomó su varita de debajo de su manto, su brazo fue tropezado accidentalmente por Ron.

Ron quería ir tras Scabbers, pero se tropezó y se llevó a Ivan con él.

Cuando Ivan volvió a levantar la cabeza, Scabbers ya había desaparecido.

"¡Maldita sea!" Ivan agitó el puño y volvió a poner la varita en su cinturón.

Sabía que había perdido una gran oportunidad para atrapar a Peter. Afortunadamente, no lanzó su hechizo y el movimiento de su mano al levantar su varita fue muy sutil, no debería haber sido detectado. Peter, que estaba concentrado en correr, no debería haber sido capaz de darse cuenta de lo que estaba haciendo. Si lo hubiera notado, Ivan estaría en apuros.

Pero como Peter no debería alarmarse por él, Ivan no necesitaba preocuparse.

Después de todo, mientras tenga el Mapa del Merodeador, no tiene que ponerse en contacto con Sirius Black. Atrapar a Peter Pettigrew era sólo cuestión de tiempo. Podía correr, pero no podía esconderse.

"Ivan, Ron, ¿qué están haciendo?", dijo Hermione ansiosamente. Se adelantó y levantó a Ivan, su rostro no se veía muy bien. Obviamente, recordó lo que había ocurrido en la sala común hacía un mes, y temía que Iván y Ron volvieran a pelear.

"Estoy bien ¡Accidentalmente me tropecé una silla!" Ron se apresuró y se dio palmaditas en la ropa, diciendo: "Voy a buscar a Scabbers. No sé qué pasó, pero de repente se fue".

"No te preocupes, Ron, creo..." Harry no terminó sus palabras, cuando de repente se congeló y dejó de hablar, y sus ojos se fijaron por encima de los hombros de Ivan.

Fue Snape. Harry se puso rápidamente detrás de Ivan y este le oyó susurrar: "¡Se acabó la travesura!"

"Potter, ¿qué estás haciendo?" Snape caminó con una cara hosca. Sus ojos se pasaron entre los cuatro y finalmente se fijaron en Harry.

"Nada. El ratón de Ron accidentalmente tiró su vaso de leche y lo estamos limpiando", dijo Harry con ansiedad.

"¡¿Lo es?!" La voz de Snape estaba llena de sospechas. "¡¿Están pensando en cómo romper las reglas de la escuela?!"

"No." Los cuatro agitaron la cabeza a toda prisa.

"No creáis que no sé lo que pasa dentro de vuestras ciegas y arrogantes cabezas de Gryffindor. La Piedra Filosofal, la Cámara de los Secretos y el Basilisco, ¿Qué vas a hacer este año? ¿Atrapar a Sirius Black por su cuenta?" La boca de Snape tenía una siniestra mueca familiar. "Eso es todo, ¿no? Todos en el Ministerio de Magia han estado tratando de asegurarse de que el famoso Harry Potter no sea atacado por Sirius Black. Pero el famoso Harry Potter sigue infringiendo la ley, haciendo que toda esta gente común y corriente se preocupe por su seguridad. A él no le importan. No considera las consecuencias en absoluto. Definitivamente va a atrapar a Black solo. "

"¡No entiendo de qué estás hablando!" La expresión de Harry era ligeramente confusa ¿Por qué todos pensaron eso? Ya fuera el Sr. Weasley, Malfoy o Snape, todos pensaron que iría a buscar a Sirius Black. ¿Por qué pensaron que él quería eso? Debe haber algo que él no sabe.

"¡¿No lo entiendes?!" Snape murmuró, despectivamente. "Potter, ¿qué has escondido bajo tu capa?"

"Nada". Harry trató de ocultar sus emociones.

"Estás mintiendo. Veo claramente lo que pusiste ahí", Los ojos de Snape se pasearon de nuevo entre ellos, finalmente mirando a los ojos de Harry.

Como al entrar en contacto con un Hipogrifo, Harry trató de no parpadear.

Snape tenía la intención de usar su impulso para oprimir a Harry a que dijera la verdad, pero cuando vio los ojos verdes esmeralda de Harry, cayó en sus memorias.

La atmósfera era un poco extraña. Los dos se miraron fijamente y nadie habló.

Al verlos, Ivan se quedó sin palabras. Se dijo que los ojos de Harry eran muy similares a los de su madre. ¡¿Estaba Snape recordando a Lily?!

"Profesor, nosotros...", Hermione intentó explicar.

"¡Silencio, Granger!" Snape recuperó la compostura, y sus ojos se giraron hacia la cara de Harry, su expresión se convirtió en disgusto. "¿Por qué te pareces tanto a tu padre, Potter?"

"¡¿Qué?!" El grupo miró a Snape con sorpresa.

"James Potter, también era extremadamente arrogante, y su pequeño talento en el campo de Quidditch también le hizo pensar que era mejor que los demás. Él y sus amigos y admiradores se paseaban por el castillo todo el día". Los ojos de Snape brillaban, "Ustedes dos son terriblemente parecidos".

"¡Mi padre no era arrogante!" Harry dijo sin pensarlo, demasiado tarde para callarse: "Él no lo era, y yo tampoco."

"Tu padre tampoco obedecía las reglas", continuó Snape. Se inclinó hacia delante, y su delgada cara estaba llena de malicia. "Pensó que las reglas son para que la gente menor las obedezca, no para el campeón de Quidditch. La persona que ganó la copa, estaba tan lleno de él..."

"¡Cállate!" Harry gritó de repente. Nunca había estado tan enfadado.

"¿Qué quieres decirme, Potter?" Los ojos negros de Snape brillaron peligrosamente.

"¡Te dije que te callaras y no dijeras nada de mi padre!", gritó Harry. "No creas que no sé nada. Dumbledore me dijo la verdad. Mi padre te salvó la vida. Si no fuera por él, no podrías estar aquí".

Oyendo a Harry, la piel amarilla de Snape torno pálida.

"No puedo negar que me salvó, pero ¿el director te dijo por qué tu padre me salvó la vida?", Snape susurró, "¿O pensó que los detalles eran demasiado duros para que los preciosos oídos de Potter los oyeran?".

Harry se mordió el labio y los demás en el Gran Comedor los miraron a ambos con pánico.

"No quiero que sigas teniendo una imagen equivocada de tu padre, Potter", el rostro de Snape se retorció en una horrible sonrisa, "Dumbledore no debe haberte contado todos los detalles. Déjame completar la historia. Tu santo padre y sus amigos me hicieron una broma muy graciosa. Si tu padre no se hubiera acobardado en el último momento, yo habría muerto. ¡Nada de lo que hizo puede ser etiquetado como valiente! Me salvó para salvarse a sí mismo. Si su broma se hubiera completado, Hogwarts lo habría expulsado con sus estúpidos amigos".

Los dientes desordenados de Snape fueron expuestos, sus ojos miraron rápidamente al asiento de los maestros, y el profesor Lupin estaba sentado allí.

Harry jadeó y la situación pareció volver al punto de partida. Los dos hombres se miraron con los ojos abiertos. Nadie estaba dispuesto a mostrar debilidad.

"Profesor, siento interrumpir su maravillosa memoria." La voz de Ivan llegó en el momento adecuado. "Pero creo que en este momento y en esta ocasión, parece un poco inapropiado recordar estas cosas. ¿No le parece?"

Snape levantó la cabeza al escuchar las palabras de Ivan.

Parecía darse cuenta de lo que acababa de decir, y cuando vio que casi todos los estudiantes los miraban, su cara se volvió cada vez más sombría.