Sin ataduras

[P.O.V Emma].

Al entregar la vacuna hecha por el ingeniero a los investigadores sus ojos se abrieron en shock.

Empezaron a revisar la vacuna rápidamente, y para la sorpresa de todos, en verdad funciona.

El ingeniero creó algo que nadie pudo crear en el menor tiempo y sin ayuda, de seguro era el favorito de sus maestros.

Después de salir del shock los investigadores me preguntaron de dónde saqué la vacuna.

Yo les dije que un hombre en la tienda del campamento había creado la vacuna.

Obviamente no me creyeron, incluso enviaron a alguien a revisar.

Cuando esa persona volvió dijo que yo había dicho la verdad, que había un hombre en la tienda con toda clase de libros a su alrededor y que tenía varios frascos iguales al anterior.

Los investigadores quedaron en shock otra vez, pero está vez no preguntaron y comenzaron a replicar la vacuna.

"Oigan, ¿recuerdan a la niña que estaban investigando?, es la hija del creador de la vacuna, así que les recomiendo que la mantengan viva" dije con tono amenazante.

"S-sí señora" dijeron los investigadores un poco asustados.

"Bien, qué bueno que nos entendamos" dije para luego irme.

Tuve que informar de la situación al presidente y hacer varias cosas más.

El presidente estaba encantado y quería conocer al creador de la vacuna, pero le dije que era imposible, el creador ahora estaba trabajando en la cura.

El presidente lo entendió, y envío toda la ayuda posible a la investigación del ingeniero, para poder acelerar la cura.

Al hacerse pública una vacuna, la gente se llenó de esperanza y por fin hubo un día bueno después de tanto tiempo.

En verdad lo logró, creó una vacuna y trajo esperanza a lo que queda de este país, él es en verdad un genio.

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[P.O.V Ken].

Luego de tomar el pequeño búho entré en la tienda de investigación para no volver a salir.

Lo tengo como un recordatorio y al mismo tiempo un tormento que debo resolver a cualquier costo.

Durante las primeras semanas estudié cada libro dentro de la tienda e internet, cada día era un nuevo libro a veces sobre el mismo tema, pero de otro escritor.

Mi pereza e inseguridad nunca aparecieron, solo era yo usando toda mi capacidad para resolver un problema.

Leí cada libro relacionado a la medicina, para luego leer cada libro relacionado a la botánica.

No dormí, la única vez que lo hice fue al desmayarme la segunda semana.

Me enviaban comida y bebida, lo cual agradezco sino probablemente habría tenido que salir.

Probé cada compuesto, cada elemento, cada método, cada interpretación, cada combinación, lo probé absolutamente todo.

Solo descansaba al desmayarme y nada más.

Leí todo lo que pude leer, hasta el punto en el que podía hacer mis propias predicciones de manera concreta y precisa.

Toda la información contenida aparecía cada vez que la necesitaba en mi mente, estaba totalmente libre de cualquier atadura.

No tenía miedo de fallar en mis investigaciones, tenía miedo de fallarle a Halley y por eso nunca dude de lo que hacía.

Y dos meses después de intentos, de fallos, de descubrimientos y de investigación, logré crear una vacuna.

Pero esto es solo para mantener a Halley completamente segura de cualquier persona.

Sé lo que piensan esos desgraciados, sé que quieren matarla o experimentar con ella y lo único que los detiene es la jefa.

Ella me ayudó a sobrevivir y confío en mí, así que yo solo puedo devolverle el favor.

Por eso creé la vacuna, para disuadir a los idiotas y hacer que se alejen de Halley.

Este es solo el primer paso, crear una cura será mucho más difícil, pero al menos ahora está segura.

Después de los 2 meses la jefa entró, probablemente a decirme que quieren deshacerse de Halley.

Yo solo le di la vacuna para disuadirlos y que me dejaran de molestar.

Inmediatamente después seguí con mis investigaciones sobre la cura.

Poco después me llegaban mensajes con el avance de todos los demás investigadores, además de algún que otro investigador a ayudarme con mi trabajo.

Esto solo me ayudará a hacer la cura más rápido, eso es lo único que importa.

Seguí con mis investigaciones, seguí intentándolo todo, seguí aprendiendo de todo, seguí fallando todo.

No sé hasta qué punto aguantará mi cuerpo, pero no tengo tiempo para morir ahora.

Tengo que salvar a Halley, tengo que cumplir mi promesa, aunque tenga que alcanzar mi límite de humano, no me voy a detener hasta encontrar la cura.

Ningún investigador me reclamó por mi bienestar, a ellos solo les importa lo que haga por la humanidad.

Y así seguí por 4 meses más, hasta el quinto, en el que me quedé estancado en la recta final.

No hacia reportes diarios, así que los investigadores perdieron el interés en mí y se centraron en otros avances.

Pero es mejor así, detesto que me miren esos hipócritas.

Yo solo seguí intentando hasta el punto en el que quedaba poco que intentar.