Mientras tanto, con otros de mis cuerpos, llego a los nidos de las arpias, hay una gran variedad de colores, tanto de su pelo, piel y plumas. Algunas que parecen más jóvenes de lo que son realmente y otras más maduras.
Algunas tienen partes de ave por sus cuerpos, como una cola o plumas por la espalda, otras solo tienen las alas y garras que las diferencian de una mujer humana.
Las arpias son muy diferentes unas de otras, algunas de ellas tienen brazos aparte de las alas y otras los tienen integrados o incluso las alas sustituyen a los brazos.
Todas tienen en común las garras en sus pies y que hablan muy alto y sin parar.
Cuando llego volando a su nido todas vienen a encontrarme y están muy ansiosas por ayudarme. Les pido que me dejen estudiar su fisiología, y todas vuelan hacia mi para poder estar en contacto conmigo. Al final tengo que hacer un examen de todos sus cuerpos para no defraudar a ninguna de ellas. Al hacer un examen una a una, consigo una visión más clara de las características generales de la fisiología de las arpías.
Cuando me transformo en arpía me crecen alas y mis pies se transforman en garras como las de un águila. Mis huesos son más ligeros pero no son más frágiles ni débiles que antes.
Sus instintos las impulsan a lanzarse sobre mí, para formar una nidada. Como todas son hermosas y están prácticamente desnudas, no puedo resistirme a nuestros impulsos instintivos. Así también las arpias entran a formar parte de la familia, van a mudarse al piso de arriba de la mansión que se a adapta y crea una sala para ellas que es como un nido enorme y la entrada es como un campanario.
Las ninfas son un poco más difíciles de encontrar y reunir, ya que hay de varias clases, y sus hogares están separados. Hay ninfas de los bosques, ninfas de los campos y praderas y ninfas del viento, entre las que traje a mi mundo. Parece ser que hay muchos más tipos de ninfas que aún no he encontrado.
Las ninfas del aire se pasan los días volando por el mundo, o eso parece.
Las ninfas del bosque ayudan al crecimiento de los árboles y plantas del bosque en general
Las ninfas de los campos y praderas, son las que hasta el momento se han estado encargando de la gestión de la granja, se encargan de recojer la cosecha y volver a sembrar. Llevan todo lo producido al almacén y sólo toman algunas frutas para sus propias necesidades.
Pierdo mucho tiempo en reunirlas a todas, en especial a las ninfas del aire. Consigo que estén de acuerdo con la idea de vivir en la casa con las demás y conmigo. Pero no quieren viajar a otros mundos ni pelear. Prefieren quedarse en este mundo y cuidarlo.
Tras estudiar su fisiología, veo que es casi idéntica a la humana pero con una gran afinidad natural y elemental, cada una a su respectivo hábitat. Son todas bellezas, no he tenido sexo con ellas por el momento, pero seguro que se unirán a la cama con las otras chicas viviendo en la casa.
No tengo que hacer ninguna modificación en mi cuerpo para adaptarme a ellas.
Después de varios días, cada grupo de chicas de las diferentes razas ha terminado de mudarse e instalarse en la casa.
Para manejar mejor la situación, ahora tengo diez cuerpos de centauro para atender a las centaurides. Cinco cuerpos para las dríades. Cuatro cuerpos para las arpias y el resto de mis cuerpos los mantengo siendo humano.
En las comidas estamos todos juntos, pero a la hora de la elaboración de los alimentos, siempre hay representantes de cada especie y raza, para gestionar los alimentos y comidas según preferencias.
Las arpías prefieren la carne, incluyendo la de pollo. De hecho el pollo frito las vuelve locas. Las driades no necesitan comer, pero si lo hacen solo comen frutas y verduras frescas. Generalmente les basta con beber agua del estanque y tomar el sol.
Las ninfas prefieren las verduras y frutas, aunque la pasta con tomate frito y queso, les encanta a todas.
Las centaurides suelen comer de todo como las humanas, pero por motivos evidentes, la carne de caballo nunca está en el menú.
Los dos días siguientes a las mudanzas, ha sido una caos toda la casa, está llena de movimiento y está muy animada. Especialmente las horas de las comidas, cuando nos juntamos con chicas de las múltiples razas. Se llevan muy bien entre ellas y no han aparecido peleas ni problemas entre razas.
Por las noches se están manteniendo separadas por razas y las ninfas se han unido en su mayoría a pasar la noche con las mujeres humanas en mi cama y con la mayoría de mis cuerpos.
Hoy las he reunido después del desayuno, llevan dos días de acostumbrarse a la convivencia. Se han unido también en la formación, lo cual ha aumentado la cooperación y la amistad entre ellas.
Reúno a todas las razas no humanas, para que vengan conmigo y darles el anillo y las dos pociones que mejoran sus cuerpos.
Cuando se las toman, les pongo el anillo una a una. Las arpías sin manos lo llevan puesto como un collar. Les propuse otras opciones, como un brazalete o en los tobillos o en las piernas pero han preferido que sea un collar.
Todas han tomado la píldora y las ayudo con la limpieza corporal y de la zona donde la toman con mi habilidad.
Mañana es el día de viajar, hoy todas han vuelto a ver la película modificada.
Le digo a Beki que cuando estuve tirado en el suelo, que pensaron que había muerto, hablé con su antiguo jefe, que le daba recuerdos y deseaba que fuera feliz. Al escuchar me, se ha puesto a llorar. Al recordar cuando era una diosa becaria. Echa de menos a las otras diosas que eran sus amigas y compañeras, y también su jefe. Aunque era severo con ella.
"Ahora tienes una familia numerosa, me tienes a mi, y es posible que en el futuro, puedas volver a estar otra vez con esas otras diosas, pero como hermanas" (yo)
Paso el día consolando y mimando a Beki con uno de mis cuerpos.
Con los otros estoy ayudando a la formación de batalla en equipo a todas las que van a venir de viaje.
Todas las ninfas han decidido que se quedan aquí.
Muchas de las mujeres humanas rescatadas también han decidido quedarse y el resto han decidido venir.
Cada especie tiene su propia forma de luchar.
Ahora en la formación de combate también hay caballería, pero las centaurides solo permiten que sea yo quien las monte, de cualquiera de las formas.
Llevan armadura de mithril tipo coraza y el cuerpo inferior con cota de malla también de mithril. La armadura es como las demás guerreras pero con la adicional cota de malla, que les cubre toda su parte inferior, sin obstaculizar el movimiento.
Las arpias usan sus propias garras afiladas y algunas armas como lanzas las que tienen brazos.
Todas las nuevas integrantes tienen armaduras ligeras de mithril o cotas de malla de este mismo material,
Las driades se niegan a ponerse armadura pero llevan arcos como apoyo a las demás chicas.
También se ha creado una unidad de caballería, que no son las centaurides, sino mujeres humanas, equipadas con lanzas y escudos. Sus caballos llevan también armadura.
Esta noche después de la cena las animo a descansar ya que mañana después del almuerzo nos marcharemos.
Antes de dejar el salón para ir a mi habitación, las ninfas han rodeado algunos de mis cuerpos humanos y me preguntan de forma muy sensual.
"No quieres darnos una buena noche de despedida, hasta que vuelvas" (ninfas)
"Estoy encantado de pasar la noche con vosotras y disfrutar de vuestra colaboración para amenizar la noche, pero debo recordaros, que al viaje sólo iré con algunos de mis cuerpos, con la mayoría de ellos me quedaré aquí, realizando tareas de obtención de datos y de información de otros mundos." (yo)
"No debéis preocuparos señoritas, ya que no planeo dejaros solas en mi mundo." (yo)
Entre risas, las ninfas me escoltan a mi habitación y tenemos una noche muy movida.
El resto de chicas duerme y descansa en sus propias habitaciones y salas.
Hebe mañana estará agotada, aún continua viviendo en mi habitación, no quiere separarse de mí. Al menos ha sido la primera que ha caído inconsciente, cuidando de ella con tres cuerpos al mismo tiempo por casi dos horas seguidas.
Uso curación y limpieza en ella para que duerma agusto y mañana no tenga muchos problemas.
Por la mañana, después del almuerzo, Con uno de mis cuerpos en cada forma diferente para representar a todas. Me paro frente a la casa y espero a que todas estén listas antes de partir.
"Es posible que tenga que realizar alguna actividad con la que nos estéis a gusto, el dios que antes era el jefe de Beki me pidió que hiciera una serie de misiones en algunos de los mundos que fuera en el futuro. Acepte para que no fuera una molestia en nuestra vida, ya que el podía tirar de mi alma a su mundo sin que pudiera evitarlo. Preferí estar en su lado bueno, a estar peleando con él." (yo)
Hago que aquellas que no llevan sus bragas o el equipo completo, vuelvan a buscarlas y a equiparse correctamente.
Con esto hecho, chasqueo los dedos y todos nos vamos.
Aparecemos frente al templo sibilino de las vírgenes videntes.
Ding.
Tortura al rey Hyperion hasta la muerte con un toro de Falaris.
Ding.
Mata a todos los titanes presos, sin dejar que escapé ninguno.
Ding.
Consigue el arco de Epiro.
"Esperad aquí y montad el campamento, estar alerta, es posible que en poco tiempo aparezca el rey Hyperion con sus tropas." (yo)
Todas las chicas y yo con mis cuerpos no humanos montamos el campamento.
Mientras tanto, me acerco al templo con mi cuerpo principal. Voy desarmado, me quito la armadura y la guardo en mi inventario, en señal de buena voluntad.
Entro en el templo y sorprendo a cuatro sacerdotisas sentadas, una sacerdotisa más joven y varios sacerdotes.
"No puedes entrar aquí, es un lugar sagrado." (grita un sacerdote)
Una de las cuatro sacerdotisas, levanta la cabeza al cielo y tras unos segundos, se pone de pie y se me acerca.
"Así que tu eres la virgen vidente, ¿has visto a qué he venido?" (yo)
"Adelante, te damos la bienvenida al templo, soy Fedra la sacerdotisa vidente, como ya sabías." (Fedra)
Los demás sacerdotes y sacerdotisas murmura entre ellos pero no dicen nada.
"Este lugar no es seguro, sería mejor que todos recojan lo que sea necesario y salir de aquí, las tropas del rey Hyperion van a venir pronto, buscando encontrar el arco de Epiro."
(yo)
"Pero nosotros no tenemos el arco, ni tampoco sabemos dónde está." (sacerdotisa)
"El problema es que él piensa que la vidente puede encontrarlo y no le importa torturar y matar inocentes para obtener lo que quiere." (yo)
"Mi gente está esperando fuera. Hemos establecido un campamento. Si estáis dispuestos a venir y vivir, os escoltaremos con gusto. Tenéis hasta mañana para pensarlo." (yo)
Salgo de las salas del templo y los dejo hablar entre ellos. Cuando salgo me transporto al interior del laberinto, en la ciudad cercana, donde vive el protagonista con su madre.
El laberinto está desierto a esta hora, es el lugar de oración, donde dan la sepultura a sus muertos y culto a los antepasados.
Rompo la piedra que se destaca del resto de la sala central, dentro de la piedra está el arco de Epiro. Lo guardo dentro de la puerta de babilonia en mi alma. Completando así una de las misiones. Ha sido demasiado fácil.
Ding.
Recompensa. (cupón de lotería x1)
Jajajaja me rio de lo que acaba de pasar. Un cupón de lotería, es algo entretenido. No se que me dará si juego, ya que puedo conseguir lo que quiera de mi tienda. Pero es divertido.
Ahora en mi sistema además de lo que tenía antes ahora está la opción de lotería.
Me da la opción de usar el cupón y tener el sorteo de forma inmediata o de usar nueve cupones a la vez, y tener diez sorteos.
Voy a esperar a tener los 9 cupones y gastarlos todos a la vez.
Es gracioso, el cupón es una tarjeta dorada con la cara de MF impresa en ambas caras. (MF es el dios antiguo jefe de Beki)
Salgo del laverinto y doy una vuelta por la ciudad que está ubicada en un precipicio en la pared de la costa, escabada en la piedra.
Cuando salgo del laberinto veo a Teseo el protagonista de la película y a Zeus en su forma humana, como un viejo.
Zeus se me queda mirando, estudiandome, no dice nada y continúa hablando con Teseo.
Con un gesto de despedida que solo ve Zeus me despido y me transporto al campamento con mis chicas, mientras me río.
Dejo a un confundido Zeus con dudas de si conozco su disfraz.