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Aniversario.

En la sala del edificio en Zerzura, Akira que estaba bien vestida dejó ver su sonrisa y…

"¡Fiesta!" Exclamó Akira mientras abrazaba a Aurora de forma bastante animada.

Hoy era el aniversario de la fundación de Zerzura, y era una enorme fiesta que Akira se estuvo preparando.

Ya tenían marcados a donde irían y que harían durante toda la tarde e incluso noche.

Estaba bastante emocionada.

Leslie que observaba con calma podía notarlo a simple vista, sin embargo…

"Eres demasiado pegajosa." Comentó Alice con una mirada agresiva directa a Akira y con una encantadora sonrisa, preguntó. "¿Quieres entrenar un poco conmigo?"

*Glup*

El sonido de tragar resonó al unísono y provenía de todos sus compañeros estudiantes… Incluso la misma Leslie.

Todavía seguían asustados, no podían evitarlo.

Ayer Akira les había comentado que esa era la manera de 'ayudar' de Alice y que les serviría en el futuro, pero saber la razones no evitaba que sus cuerpos temblaran al verla ahora.

Había grabado el miedo en ellos.

Akira se retiró y miró a Aurora buscando ayuda.

Con una expresión extraña Aurora respondió tomando del brazo a Alice.

"Hoy tendremos una gran tarde y noche. Pasaremos por los puestos de comida tradicionales, visitaremos las áreas culturales y si quieres miraremos los desfiles." Comentó Aurora con una sonrisa animada a su compañera.

Como Zerzura fue creado a partir de refugiados de toda áfrica, en este lugar se encontraban diferentes culturas que todavía seguían vigentes en la actualidad.

Y como esta fiesta era la más importante del año, las personas demostraban sus culturas de distintas maneras.

Desde comida, vestimenta, desfiles, obras musicales y decenas de otras diversas formas.

Era una fiesta que empezaba desde temprano y terminaba bastante tarde.

"Pero no quiero ir." Murmuró Alice con un tono bajo como si estuviera haciendo un ligero puchero.

Leslie y su grupo que observaron esa escena no supieron como sentirse.

Esa belleza que ayer parecía la personificación de la muerte, hoy estaba actuando como una niña que no quería ir a la escuela.

Era bastante extraño, pero cuando uno lo pensaba, esa clase de persona era Alice.

Alguien que comía sus papitas perezosamente y que se enojaba si alguien se las quitaba… Así de simple.

"Solo es por media hora. Luego vienes y cenamos juntas, ¿qué tal?" Preguntó Aurora tratando de convencer a su amiga.

Todos los presentes que estaban por salir miraron al dúo de amigas que estaban conversando.

"Quince minutos." Replicó Alice dando una expresión ligeramente entusiasta al escuchar sobre la comida.

"Claro." Respondió Aurora con una sonrisa y luego dando una mirada al grupo hizo una señal para que salieran rápidamente.

"Es mejor ir caminando. Viajar en auto será demasiado complicado después." Dijo Shao Ya con un tono entretenido.

Todo el grupo asintió.

Como era una gran fiesta, estaban queriendo ir todos juntos al menos hasta que decidieran dividirse.

Cada uno tenía intereses diferentes y quería ver cosas diferentes.

Todo el grupo se movilizó y empezaron a caminar por las calles para dirigirse a el área cultural cercana.

Como la ciudad era muy grande, la fiesta tenía diferentes áreas repartidas alrededor del centro.

Cerca de ellos estaba un área centrada en la venta de armas, en donde los aventureros, mercenarios o usuarios de habilidades podían ir a comprar sus armas preferidas.

Un estilo muy parecido al 'Mercado Dimensional' de Grecia, solo que esta vez centrada en todo tipo de armas frías siendo creaciones locales.

Era imposible restringir las armas frías y más cuando había tantos usuarios de habilidades, sin embargo, se restringía los lugares de venta y había leyes, que obligaban a obtener autorización para portar y vender armas.

Este mercado desplegado hoy, tenía autorización para su venta y era un sitio muy recurrido debido a los precios.

Caminando por las calles pudieron ver que había bastantes personas caminando en la misma dirección que ellos.

Tras un viaje apresurado por la emoción, llegaron al mercado que se encontraba en una plaza cercana.

Diferentes tiendas estaban esparcidas por los alrededores y vendían todo tipo de armas frías.

En cuanto a las armas de fuego, para el lamento de Leslie no estaba disponible su venta en estos lugares.

Aun así, se podían encontrar todo tipo de tiendas desde espadas, guantes de combate, arcos, artefactos, accesorios mágicos y decenas de otras tiendas más.

En el centro se encontraba un herrero enano que parecía venir de Terra nova forjando en una pequeña fragua una espada larga.

Sus martillazos resonaban por los alrededores e impregnaba con energía mágica su arma dándole poder y forma.

La mirada concentrada que daba el enano como si la creación de su arma fuera todo su mundo, fue demasiado llamativo y todo un espectáculo.

En otras áreas vendían todo tipo de flechas con efectos especiales, o armas y armaduras de hueso, que eran bastante impresionantes.

Su colorido blanco y su forma era extraña, pero no había necesidad de dudar de su resistencia y capacidad.

Herreros reconocidos en Zerzura o Encantadores ofrecían sus servicios permitiéndole realzar un objeto a su disposición o darle un efecto nuevo.

Era un lugar grande y había muchas tiendas para mirar y muchos objetos para comprar.

Como el grupo había ganado más de unos cientos de miles de dólares en la misión Arca, tenían lo suficiente para comprar algunos objetos interesantes de gran valor.

No importa si era un mecánico o un individuo con talento en armas de fuego, todos exploraban la zona buscando objetos a sus gustos.

Áreas de magos con todo tipo de elementos mágicos, el área de arqueros, espadachines, luchadores, tienda de objetos.

A pesar de que el grupo empezó al mediodía tras el almuerzo, esta área le tomó cerca de dos horas para explorarla y cuando salieron todos estaban satisfechos.

No importa si fue una psiónica como Clémentine, una mecánica como Leslie o una glotona como Alice, cada uno de ellos obtuvo algo de su gusto.

Clémentine compró algunos accesorios agradables a la vista con algunos relajantes efectos para usarlo en su vida diaria, Leslie compró algunos objetos de regalo para su familia y a pesar de que era un área centrada en la venta de armas, Alice pudo comer debido a que había unas tiendas de comida cerca.

Que parecía que siempre estuvieron en este lugar.

Como el desfile empezarían más tarde y tenían tiempo para explorar dos áreas más.

Era por eso que el grupo tras decidirlo dejaron el área de comida para más tarde y se dirigieron al área cultural.

Quedaba un poco lejos, aunque no lo suficiente como para evitar que ellos no quisieran ir.

La Ciudad Zerzura era brillante y era impresionante todo lo que se podía realizar un solo día, pero era lamentable al mismo tiempo.

Como un área con bestias mágicas al sur, también se encontraban algunas áreas de entretenimiento relacionado con las distintas bestias mágicas.

Un ejemplo clásico era volar en algunas bestias mágicas voladoras, o caminar por las 'hábitats' de bestias mágicas de esas áreas.

Al encontrarse bestias mágicas inteligentes, Zerzura también daba su propio entretenimiento para ellas.

Al llegar a la zona cultural que se hacía en otra plaza, de mayor tamaño, el grupo rápidamente se dispersó por toda la zona maravillándose por la atmósfera y las diferentes áreas que ofrecía esta zona.

Desde tiendas de vestimenta tradicionales que vendían diferentes tipos de ropas coloridas y típicas de áfrica.

Pequeñas zonas de musicales y bailes en donde también ofrecían todo tipo de instrumentos tradicionales africanos.

También se encontraban con lugares en donde algunos individuos realizaban pinturas corporales a un estilo africano a quienes desearan.

En ella se podían ver niños y jóvenes siendo pintados por algunos expertos o jóvenes y niños pintando a aquellos que se ofrecían.

Tras el 'Gran Cataclismo' la situación en áfrica cambió de forma muy repentina, la aparición y posterior expansión del bosque mágico junto a los 'jugadores' que solo buscaban crear caos, hizo que todo se convirtiera en un desastre.

El bosque mágico hizo que millones de personas migraran y los monstruos o criaturas, asesinaron o afectaron a otro gran grupo.

Individuos abandonaron sus hogares, perdieron sus tierras, y tuvieron que viajar a otros continentes en busca de salvación y esperanza, perdiendo sus tradiciones y culturas en el proceso para asimilarse en otras zonas.

La Ciudad Zerzura tenía un estilo occidental en la forma que se manejaba y organizaba, pero también apoyaba y buscaba que las diferentes culturas convivieran entre ellas de pacíficamente.

Incentivaba a continuar con los eventos culturales de los diversos países de este continente y a la vez, trataba de fusionar todo para crear algo nuevo.

Esta fiesta representaba lo que era Zerzura.

Una fusión de todo tipo de culturas que en vez de empequeñecerlas las reunía en algo más grande y único, que era Zerzura.

Esta área era más animada e incitaba a las personas a unirse a ellos para pintarse, bailar o aprender a tocar los instrumentos.

El grupo se divirtió a su manera a pesar de venir de diferentes áreas, representando lo que era Zerzura.

Akira atrapó a sus 'presas' también llamadas 'grupo de estudiantes' y los llevó a que se pintaran sus rostros.

Era difícil evitar la motivación de Akira para probar cosas nuevas y era fácil contagiarse de ella.

Hasta tal punto de que alguien serio y poco hablador como Santiago o alguien que parecía un erudito y formal caballero como Oscar, tuvieron que unirse y llevaron algunas pinturas en sus rostros… Pinturas realizadas gratuitamente por niños aprendices.

Divertirse mirando a sus compañeros llevar algunos lindos felinos pintados en sus rostros, era algo que Akira disfrutaba y una situación que llevaba a los demás a hacerlo.

Liam y Andrés fueron rápidos en escapar de ella.

Cuando estaba por atardecer se dirigieron a el área de comidas tradicionales que estaba cerca.

La Ciudad Zerzura fue apoyada por la Empresa Apicius para lograr lo que era hoy en día y en cierto sentido se podría decir que ellos eran los 'gobernantes' del mismo modo que la Empresa Cosmos era el gobernante en la ciudad Atlántida.

Y como una empresa centrada en los alimentos, comidas y restaurantes famosos incentivaba todo lo relacionado con ella.

Era por eso que el área de comidas tradicionales tenía su propia zona en la que se encontraban diferentes puestos de comidas con todo tipo de alimentos.

Desde el norte de áfrica hasta el sur de áfrica encontrándose comidas típicas hasta comidas exóticas como lo eran las 'Orugas mopan' que según decían eran altamente nutritivas.

A pesar de que Akira se animaba a probar cosas nuevas, no estaba interesada en la comida así que ella se llevó a su grupo 'sano' para comer cosas más 'normales', dejando a los 'atrevidos y audaces' compañeros con Alice.

Aurora acompañó a su amiga comiendo todo lo que ella comía, disfrutando al lado de su hermana.

La verdad no era como si no hubieran comido comidas 'exóticas' antes, en la misión arca, los aventureros y mercenarios hicieron de comer toda criatura que asesinaron.

Así que esto no era muy diferente a pesar de que las orugas se veían extrañas.

Alice le gustaba la comida deliciosa creada por chefs reconocidos, pero como una verdadera gourmet aceptaba cualquier comida que sea comestible, sin fruncir nunca el ceño.

A pesar de que los platos que ofrecían tenían diferentes tamaños para que las personas pudieran probar platos pequeños y luego visitar a otras áreas, Alice pedía platos de tamaño normal y los devoraba con Aurora.

Cuando llegaron a los platos tradicionales africanos como el 'Cuscús' un plato realizado a base de sémola de trigo y acompañado por otros productos o 'Ugali' un plato realizado a base de maíz, Aurora ya estaba llena y no podía más.

Alice se merecía el título de 'pozo sin fondo' y no había duda de que aceptaba el título de 'glotona'.

Cuando el grupo estaba completamente lleno, Alice siguió comiendo y paseando por los alrededores.

Desde bebidas, platos principales o postres, esta área era el sueño de cualquier gourmet que apreciara la comida.

Cuando estaba atardeciendo, el grupo para lamento de Alice tuvieron que dejar el área y dirigirse al lugar en donde se realizaría el desfile principal.

Esta fiesta de aniversario servía para unir a todos sus ciudadanos y sus culturas buscando que se asimilaran con Zerzura, pero también tenía un objetivo principal.

Demostrar el aprecio por aquellos que se esforzaron en levantar la ciudad Zerzura, en algunos casos dando su vida por ella y honrando a aquellos que se esforzaban en mantenerla todos los días.

El mismísimo Ministro de Zerzura estaba presente dando un discurso en el escenario principal que era proyectado en otras áreas por las pantallas desplegadas en los edificios o las proyecciones de los drones.

Un discurso para valorar y honrar a aquellos que protegen Zerzura, desde los aventureros, mercenarios, héroes o individuos independientes que se ocultan a los ojos del público.

El aprecio que demostraba no estaba dirigido a los altos mandos como la Empresa Apicius o los dirigentes de la Iglesia del Tiempo y el Espacio, estaba centrada en aquellos que se movían en la zona inferior de jerarquía.

Aquellos que arriesgaban su vida para proteger a Zerzura y a toda su gente en la ciudad o las aldeas a su alrededor.

El Ministro era un hombre carismático que fue elegido cuando la Ciudad Zerzura era pequeña y como la ciudad Zerzura fue fundada hace cinco años, en realidad era el 'Primer' Ministro de Zerzura.

Ese hombre siempre buscaba un bienestar general y alaba a aquellos que se esforzaban desde abajo, la mayor razón era que él fue un antiguo refugiado que empezó desde abajo.

Siendo una persona sin habilidades, logró hacerse un lugar apoyando a Zerzura desde atrás y conociendo lo que realizaban aquellos que estaban al frente.

Aurora lo había conocido así que entendía bastante bien su personalidad.

Entonces tras un breve y contundente discurso, el desfile comenzó.

Su grupo estaba en el centro de la calle en donde pasaría el desfile y como el camino abarcaba decenas de calles atravesando la carretera principal, tuvieron que esperar.

A pesar de que se demoró en llegar a su punto, en todo momento pudieron verlo a través de las proyecciones y pantallas desplegadas por la zona.

Los drones que sobrevolaban el cielo grababan y trasmitían las escenas a toda Zerzura y las aldeas y pueblos a su alrededor.

Entonces el desfile llegó a su área.

Primero fueron los carruajes de todo tipo que pasaban.

Algunos tenían temáticas culturales y se encontraban acompañados de grupos de danzas y musicales con tambores y otros instrumentos que resonaban vívidamente.

Contemplar a mujeres danzando por la carretera con una energía inagotable mientras la música resonaba fue sin duda atrayente.

Otros carruajes tenían temáticas de bestias mágicas.

En ella se encontraba algunos Leones Alados que rugían bajo la estatua de un poderoso felino con una corona que representaba a la 'Reina del Bosque Mágico'.

Que los Leones Alados que seguramente estaban relacionados con los 'Guardias de la Reina' estuvieran presentes dejaban ver su profunda lealtad a su gobernante y a la vez relación con la ciudad.

En otros carruajes los Gorilas Atronadores estaban bajo un gran árbol que representaba el 'Adansonia' gigante que se encontraba en el centro del Bosque mágico.

Los gorilas eran bestias mágicas animadas y la que mayormente se relacionaban con humanos, ellos bailaban imitando a los humanos mientras a veces saludaban a otros.

Luego llegaron los carruajes de los aventureros cuya temática en los carruajes eran las diferentes criaturas de Rango SS que se conocían en África.

El Zhar-Ptitsa estaba representado en unos de esos carruajes mientras a sus alrededores desfilaban humanos imitando a esas criaturas.

El siguiente grupo fueron soldados del ejército de Zerzura.

Ellos desfilaban formalmente llevando sus uniformes y disciplinadamente marchaban tácitamente en orden.

No realizaban nada llamativo, pero su sola presencia llenaba de orgullo a los ciudadanos.

Entre los que desfilaban se encontraba el Coronel Makeba y la Capitana Sadiya con otros soldados que vieron en la misión 'Arca'.

Ellos al notar al grupo dieron saludos oficiales y el mismo Coronel Makeba que iba primero saludó al grupo de Aurora, logrando que todos los soldados saludaran al unísono.

Los labios de Aurora temblaron, pero lo bueno fue que parecía un acto de los soldados así que nadie busco más razones.

El siguiente fue la Iglesia del Tiempo y el Espacio.

Ellos solo llevaban un carruaje con un pilar de mármol en el que la cima se proyectaba un escenario extraño.

Un pequeño pueblo en medio de la nada rodeada de criaturas y oscuridad… Al momento siguiente dos figuras borrosas llegaron salvando al pueblo y trayendo luz, pero también dando comienzo a que otras figuras llegaran.

Antes de que se dieran cuenta el pequeño pueblo creció y aumento de tamaño a una velocidad impactante mientras que el dúo de figuras se convirtió en cientos y esos cientos en miles.

Enormes edificios y una reluciente ciudad poblada defendida por cientos de figuras distintas cuyos rostros no se revelaban.

Esa era Zerzura.

Ese escenario se volvía a reproducir una y otra vez, sin volverse repetitivo y cada espectador lo disfrutó como la primera vez.

Inmersos en el pasado y esperando el futuro.

Los paladines, sacerdotes y otros miembros de la Iglesia desfilaron a su alrededor con expresiones serias parecidas a los militares.

En ella no solo se encontraban soldados, sino que también grupos de ayuda reconocidos en Zerzura por ayudar a los necesitados.

La Sumo Sacerdotisa Xaali dirigía al grupo y Aurora también pudo notar a Vanessa desfilando con los sacerdotes que fueron para apoyar en la misión arca.

Cuando pasaron a su lado, la Sumo Sacerdotisa Xaali miró al cielo y murmuró unas palabras que nadie pudo escuchar.

Los paladines levantaron sus espadas en alto mientras estaban rodeadas de una energía extraña que distorsionaba el espacio y cuando estuvieron en lo alto, sus alrededores empezaron a verse distinto.

Fue por unos segundos, pero todos pudieron ver cuando la ciudad Zerzura era solo un pueblo en ruinas, rodeado de peligros.

Entonces al momento siguiente advirtieron que todo cambiaba de repente.

Los pisos se pavimentaban, los edificios se construían y todo empezaba a construirse a lo que era hoy.

No fue solo percepción de ellos, las cámaras pudieron grabar lo sucedido y las personas exclamaron con emoción, mientras los paladines continuaban su marcha enfundando sus espadas.

Aurora dio una sonrisa al ver las hazañas de la Iglesia, siempre tan impresionante.

El año pasado realizaron una demostración igual, solo que centrada cuando las hordas de criaturas se dirigían en dirección de Zerzura.

Al final el desfile terminó con otros carruajes temáticos y bailes musicales para animar al público.

Cuando el desfile terminó ya estaba anocheciendo.

"Vamos a comprar unas máscaras para ir al concierto de 'Serafín'." Comentó Nicole bastante emocionada.

Serafín, una psiónica muy reconocida de alto rango que tenía la habilidad para trasmitir emociones con su voz y convertir sus canciones, en fantásticas obras que atraían a todo público.

Su habilidad ayudaba, pero las letras que contaban una historia siempre llena de heroísmo hacia aquellos que siempre se levantaron para luchar a favor de los necesitados, hizo que el corazón de cualquier se sintiera atraído.

Por lo general sus más leales fans usaban máscaras con distintos diseños que representaban algunos héroes que antes se ocultaban usándolas, demostrando el deseo de ayudar en secreto.

"Pueden ir ustedes. Ya es la hora de irnos por nuestra cuenta." Dijo Aurora con una sonrisa mirando a su compañera.

"Es una lástima." Murmuró Nicole con una media sonrisa un poco decepcionada, pero Aurora le hizo una señal para que no se preocuparan.

Aurora tomó a su amiga que parecía ligeramente deprimida y empezó a caminar.

La fiesta de altos mandos comenzaría pronto y Aurora no solo necesitaba preparar su amiga para que luciera bien, sino que…

"Espero que comamos algo delicioso, juntas." Comentó Alice con un tono serio.

"Claro, te prometí comer ese Smilodon Fatalis, ¿cierto? Bueno, mientras tú te preparas y vas a la fiesta, yo iré cocinando para la cena." Respondió Aurora con tranquilidad.

Se lo había prometido antes y ahora lo estaba cumpliendo.

Además, siempre ellas cenaban juntas y aunque este día tenían más visitas de lo normal, igualmente seguirían manteniendo su tradición.

En cuanto a la fiesta de altos mandos, era probable que durara unos minutos.

Era por eso que no podría asistir al concierto con los demás.

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